Los adenovirus son un grupo de virus que normalmente provocan infecciones del tracto respiratorio, como gripe, resfriado, crup, bronquitis o neumonía, por ejemplo, pero también pueden infectar el sistema gastrointestinal y nervioso, o los ojos, provocando gastroenteritis, encefalitis o conjuntivitis.
Este virus se transmite fácilmente por contacto directo con gotitas de saliva o secreciones respiratorias que se liberan al aire cuando una persona tose o estornuda, por tocar una superficie contaminada por el adenovirus o por contacto con heces infectadas durante el cambio de pañal.
Los síntomas del adenovirus dependen del órgano infectado, que pueden incluir fiebre, tos, dolor de garganta, diarrea o vómitos, y siempre deben ser evaluados por un médico, especialmente en personas con el sistema inmunológico debilitado o niños, ya que este virus se ha relacionado a la hepatitis infantil.
Síntomas de adenovirus
Los síntomas más comunes de la infección por adenovirus son:
- Fiebre o tos.
- Congestión o secreción nasal.
- Dolor de garganta, dolor de oído o dolor de cabeza.
- Náuseas o vómitos.
- Diarrea o dolor de estómago.
- Ojo rojo, irritado o lloroso.
Además, en el caso de una infección del sistema nervioso, pueden aparecer síntomas como rigidez en el cuello y la espalda, parálisis, debilidad muscular, confusión mental o incluso convulsiones. Vea otros síntomas asociados a una infección del sistema nervioso.
Por ello, siempre que aparezcan síntomas de adenovirus se debe consultar a un médico de cabecera o pediatra, para que se pueda realizar el diagnóstico e iniciar el tratamiento más adecuado.
¿Cuánto dura el virus adenovirus?
Los síntomas de la infección por adenovirus comienzan aproximadamente de 2 a 14 días después del contacto con el virus y duran unos días o hasta 3 a 4 semanas, según el tipo de enfermedad que causó.
Generalmente, los síntomas del adenovirus son leves, sin embargo, en niños, personas con el sistema inmunológico debilitado o que padecen enfermedades respiratorias o cardíacas, los síntomas pueden ser severos.
Cómo confirmar el diagnóstico
El diagnóstico de la infección por adenovirus es realizado por un médico general, pediatra o infectólogo, quien evalúa los síntomas, realiza un examen físico, revisa la historia clínica y, en algunos casos, solicita pruebas de laboratorio.
Entre las pruebas que el médico puede indicar se encuentran la serología para identificar la presencia de antígenos, el análisis de heces o de orina y el cultivo viral a partir de secreciones respiratorias.
En casos graves, es posible que el médico solicite una prueba de PCR molecular para detectar la presencia del adenovirus en las secreciones respiratorias o en la sangre. Vea cómo se realiza la prueba PCR.
Si existe sospecha de encefalitis, el médico también podría ordenar una punción lumbar para confirmar la presencia del adenovirus.
Lea también: Punción lumbar: qué es, técnica y contraindicaciones tuasaude.com/es/puncion-lumbarAdenovirus y hepatitis infantil
La hepatitis infantil se ha relacionado con la infección por adenovirus, ya que se ha identificado adenovirus tipo 41 en algunos niños con síntomas de hepatitis aguda, como dolor abdominal, diarrea y vómitos. Vea cómo identificar los síntomas de la hepatitis aguda.
Sin embargo, según la Organización Mundial de la Salud (OMS) [1], aún se desconoce la causa exacta del brote de hepatitis infantil en algunos países, y se necesitan más estudios para identificar las causas y otros factores de riesgo, como la presencia de otras infecciones infantiles o la exposición a toxinas.
Lea también: Hepatitis aguda: síntomas, causas y tratamiento tuasaude.com/es/hepatitis-agudaCómo ocurre la transmisión
El adenovirus es transmitido a través del contacto directo con personas infectadas con el virus o por medio de la inhalación de gotículas de saliva o secreciones nasales liberadas cuando la persona infectada tose o estornuda.
Además, la transmisión también puede ocurrir por tocar una superficie contaminada por el adenovirus o por llevarse las manos a los ojos, nariz o boca.
El adenovirus también puede ser transmitido por el contacto con heces contaminadas con el virus, como cambiar un pañal o, aunque sea menos común, a través de agua contaminada de las piscinas.
Cómo se realiza el tratamiento
El tratamiento de la infección por adenovirus debe ser orientado por un médico. En la mayoría de los casos, no se requiere un tratamiento específico, ya que la infección generalmente mejora en pocos días.
Sin embargo, el médico puede recomendar algunos cuidados para aliviar los síntomas del adenovirus, tales como:
1. Aumentar la ingesta de líquidos
Incrementar el consumo de líquidos, especialmente agua, es fundamental para prevenir la deshidratación causada por la fiebre, especialmente en niños. Conozca cómo identificar los síntomas de la deshidratación.
Además, el consumo de jugos naturales, tés sin azúcar, vitaminas y sopas también puede ayudar a mantener una buena hidratación y aportar nutrientes que favorecen la recuperación del organismo y el combate a la infección.
Para los bebés que aún no han iniciado la alimentación complementaria, se debe ofrecer leche materna a demanda o fórmula infantil.
2. Descansar
El descanso es esencial para que el cuerpo conserve energía y el sistema inmunológico pueda combatir la infección causada por el adenovirus.
Asimismo, el reposo ayuda a evitar el contacto con otras personas y la propagación del virus.
3. Uso de medicamentos
En algunos casos, el médico puede recomendar el uso de medicamentos para aliviar los síntomas y prevenir complicaciones, tales como:
- Analgésicos, como paracetamol, para reducir la fiebre y el dolor.
- Solución salina al 0,9 %, para realizar lavados nasales y destapar la nariz. Vea cómo hacer un lavado nasal correctamente.
- Broncodilatadores, en forma de nebulización o inhaladores, para reducir la inflamación de las vías respiratorias y facilitar la respiración.
- Colirios hidratantes o lágrimas artificiales, para aliviar la irritación ocular.
En casos graves, puede ser necesario el ingreso hospitalario, con tratamiento que incluya la administración de suero por vía intravenosa o incluso el uso de oxígeno mediante cánula nasal o ventilación mecánica no invasiva.
4. Alimentación ligera y de fácil digestión
El médico puede recomendar una dieta ligera y fácil de digerir para aliviar síntomas como diarrea, náuseas y vómitos.
Se deben priorizar alimentos como pan, arroz y pastas blancas, carnes magras y frutas sin cáscara, entre otros.
Lea también: Qué comer cuando tienes diarrea tuasaude.com/es/que-comer-con-diarreaCómo prevenir
Para prevenir la infección por el adenovirus, es recomendado:
- Evitar permanecer en ambientes cerrados o con mucha gente y con poca circulación de aire por mucho tiempo, como centros comerciales o gimnasios.
- Evitar el contacto con personas que tengan gripe o resfriados.
- Lavarse bien las manos, especialmente antes y después de ir al baño y cambiarle el pañal del niño.
- Colocarse alcohol en gel en las manos con frecuencia.
- Evitar tocar superficies y llevarse las manos a los ojos, la boca o la nariz.
- Evitar compartir objetos personales que puedan estar en contacto con gotas de saliva o secreciones respiratorias, como cubiertos, vasos y cepillos de dientes.
- Taparse siempre la nariz y la boca al toser o estornudar, utilizando un pañuelo desechable o ropa.
Además, las manos deben lavarse regularmente, con agua y jabón neutro, durante al menos 20 segundos antes de enjugarse, para prevenir la infección por adenovirus y prevenir la transmisión de enfermedades en general.
Vea el siguiente video sobre cómo lavar la manos en el siguiente video: