Los antigripales son medicamentos que sirven para aliviar los síntomas de la gripe y el resfriado, como la congestión nasal, fiebre, dolor de cabeza, dolor de garganta y/o tos, por ejemplo.
Existen diversos tipos de antigripales, con diferentes composiciones, pero en general, estos suelen contener compuestos analgésicos, antipiréticos, descongestionantes, expectorantes, antihistamínicos y/o antitusígenos.
Este tipo de medicamentos pueden comprarse en las farmacias o parafarmacias, sin necesidad de presentar una receta médica, pudiendo conseguirse con diversos nombres comerciales. No obstante, es importante acudir siempre al médico general o pediatra, en el caso de los niños para que realice una evaluación e indique el tratamiento más adecuado.
15 antigripales efectivos
Los nombres comerciales de algunos antigripales efectivos son:
- Exaliv;
- Ladexgel;
- Tempra gripa y resfriado;
- Tylenol cold + flu;
- Agrifen;
- Antiflu-Des;
- Desenfriol-D;
- Next gripa;
- Theraflu;
- Tabcin;
- XL-3VR antigripal;
- Advil gripa;
- Legrip;
- Frenadol;
- Ilvico.
Es importante mencionar que los antigripales sirven para aliviar los síntomas de la gripe y el resfriado pero no los cura, pues se trata de un virus que el cuerpo combate por sí propio para eliminarlo, debiendo tomar antigripales siempre bajo orientación de un médico, así como mantenerse de reposo y comer de forma saludable para acelerar la recuperación.
Para qué sirven los antigripales
Los antigripales sirven para aliviar los síntomas de la gripe y el resfriado, que incluyen:
- Tos;
- Estornudos y goteo nasal;
- Fiebre;
- Malestar general;
- Congestión nasal;
- Dolor de cabeza, muscular y de garganta.
En algunos casos, principalmente en personas que tienen mayor riesgo de desarrollar complicaciones, como neumonía o enfermedades cardíacas, podrá no ser suficiente el tratamiento con antigripales, por lo que el médico podrá indicar el uso de antivirales, como el oseltamivir (Tamiflu), por ejemplo, para acelerar la eliminación del virus de la gripe, aliviando los síntomas más rápido y previniendo complicaciones. Vea para qué sirve el oseltamivir.
Cómo funcionan los antigripales
Los antigripales son medicamentos que poseen diversos principios bioactivos, para poder aliviar los diversos síntomas de la gripe y del resfriado, variando entre una marca comercial y otra. Vea cuáles son los síntomas de la gripe.
Por este motivo, estos medicamentos pueden contener analgésicos y antipiréticos, como el paracetamol o la dipirona; descongestionantes, como la fenilefrina; expectorantes, como la guaifenesina; antihistamínicos, como la clorfenamina, loratadina y la desloratadina; antivirales, como la amantadina, así como antitusígenos, como el dextrometorfano o el benzonatato, por ejemplo.
Efectos secundarios
Los efectos secundarios de los antigripales varían de una marca a otra, pues dependerá de los compuestos activos que contengan, siendo importante leer el prospecto del medicamento. Algunos de los efectos más comunes son la somnolencia, nerviosismo, mareos y debilidad muscular.
Contraindicaciones
Los antigripales deben ser evitados en mujeres embarazadas y en período de lactancia materna, así como en los niños, debiendo consultar siempre al obstetra o al pediatra antes de ingerirlos.
Además, también están contraindicados en personas con alergia a alguno de los componentes del medicamento, siendo importante leer el prospecto para conocer su composición antes de ingerirlo.
Asimismo, personas que sufren de hipertensión arterial, enfermedades renales, del corazón o del hígado graves, tampoco deben ingerir antigripales sin consultar al médico.
Los antigripales por tener diversos componentes pueden interactuar con diversos medicamentos. Por este motivo, si ingiere alguna medicación para tratar alguna enfermedad, debe siempre informar o consultar a su médico tratante antes de tomar cualquier antigripal.