La leche materna es un alimento esencial para el bebé que, además de asegurarle todos los nutrientes necesarios para un crecimiento y desarrollo normal, tiene varios beneficios para la salud, como prevenir diarreas, fortalecer el sistema inmunitario o prevenir la aparición de carencias nutricionales.
Además de eso, también hay beneficios de la lactancia materna para la madre, como recuperar el peso de manera más rápida y mantener el estado ánimo saludable.
Por todos estos beneficios, siempre que sea posible, se debe alentar a las madres a amamantar, sin embargo, existen algunas situaciones en las que la lactancia materna puede estar contraindicada, como cuando la madre tiene VIH, usa drogas o está en tratamiento contra el cáncer, por ejemplo.
Los principales beneficios de la lactancia materna para el bebé son:
1. Suministrar todos los nutrientes al bebé
La leche materna es producida de forma equilibrada y contiene niveles adecuados de proteínas, carbohidratos, grasas y agua para favorecer el crecimiento y desarrollo del bebé. Lo ideal es que él consuma toda la leche de un pecho antes de pasar al otro, pues así recibe todos los nutrientes de la mamada completa.
2. Facilitar la digestión
La leche materna es digerida fácilmente por el intestino del bebé, lo que favorece una adecuada absorción de nutrientes y un aumento de la frecuencia de la lactancia, aportando más calorías y alimentos al bebé. En los casos donde el niño consume fórmulas infantiles en polvo, la digestión es más lenta, pues ninguna leche artificial es tan buena como la leche materna.
3. Reducir cólicos
La fácil digestión de la leche materna también ayuda a evitar problemas como gases y cólicos intestinales; asimismo, también contiene sustancias responsables por proteger y reparar el intestino delicado del recién nacido.
4. Prevenir anemias
La leche materna contiene un tipo de hierro que es altamente absorbido por el intestino del bebé y, además, posee vitamina B12 y ácido fólico, que son importantes para la producción de los glóbulos rojos, células responsables por el transporte de oxígeno en la sangre.
5. Evitar diarrea
La leche materna es rica en bacterias que colonizan el intestino del recién nacido y componen su flora intestinal, actuando como una barrera protectora que también ayuda en la digestión y en la regulación del tránsito intestinal.
6. Fortalecer el sistema inmunitario
Por ser rica en anticuerpos producidos por la madre, la leche materna es una forma natural de defensa para el bebé, pues lo protege contra problemas como asma, neumonía, gripes, dolor de oído y afecciones intestinales. Esto ayuda a evitar enfermedades graves al inicio de la vida del recién nacido, y si este se enferma, el organismo de la madre aumenta la cantidad de proteínas y células de defensa en la leche, facilitando así la recuperación del bebé.
7. Desarrollar el sistema nervioso
La leche materna es rica en DHA, un tipo de grasa "buena" que participa en la formación de las neuronas y favorece la memoria, el aprendizaje y la atención. El DHA es uno de los componentes del omega-3, nutriente igualmente importante para prevenir problemas neurológicos como TDAH, Alzheimer y demencia. Conozca otros beneficios del omega-3.
8. Prevenir obesidad
Por su efecto antiinflamatorio, los niños que fueron amamantados durante la infancia tienen menor riesgo de desarrollar problemas como obesidad, diabetes y trastornos cardíacos a lo largo de toda la vida.
9. Estar siempre lista para ser consumida
Aparte de ser el mejor alimento para el bebé, la leche materna siempre está lista, a la temperatura adecuada y libre de contaminación que podría causar diarreas e infecciones en el recién nacido. Por otro lado, la leche materna puede ser extraída y conservarla. Sepa cómo almacenar y descongelar la leche materna.
10. Prevenir alergias
Los bebés que son amamantados de forma exclusiva hasta los 6 meses de edad tienen menores probabilidades de desarrollar alergias alimentarias, en especial alergias a la leche, a la soya, a los pescados y mariscos, al huevo y al cacahuate. Conozca qué no comer durante la lactancia para evitar problemas en el bebé.
Beneficios de la leche materna para la madre
La lactancia no solo es favorable para el bebé, sino también ofrece muchos beneficios para la madre, que incluyen los siguientes:
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Favorecer la pérdida de peso de manera más rápida después del parto, ya que la lactancia quema unas 500 calorías adicionales por día para crear y mantener la reserva de leche;
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Ayudar a una recuperación más rápida después de parto, al estimular la contracción del útero para que vuelva a su tamaño normal y disminuir las hemorragias posparto;
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Reducir el riesgo de desarrollar cáncer de mama y de ovarios, diabetes de tipo 2 e hipertensión arterial;
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Menor riesgo de infecciones del tracto urinario;
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Menos posibilidades de anemia;
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Aumento de la confianza y la autoestima de la madre.
Además de eso, la lactancia materna ayuda a la madre a mantener el estado emocional más saludable, con menos riesgo de depresión posparto, ya que amamantar produce hormonas naturalmente calmantes, como la oxitocina y prolactina, que promueven la reducción del estrés y los sentimientos positivos en la madre lactante.
Otro aspecto muy importante, es que la lactancia materna aumenta el vínculo físico y emocional entre la madre y el niño, promueve un mayor contacto piel con piel, más abrazos y caricias. Las madres que amamantan aprenden a leer las señales de sus hijos y los bebés aprenden a confiar en sus cuidadores. Esto ayuda a moldear el comportamiento temprano del bebé.