El té de manzanilla sirve para eliminar las náuseas, mejorar la mala digestión y aliviar los gases, además de prevenir problemas gastrointestinales, como la gastritis y úlceras gástricas. Esto se debe a que la manzanilla posee propiedades antiinflamatorias, digestivas y antiespasmódicas que actúan controlando la producción de ácidos en el estómago.
Además de eso, el té de manzanilla también contiene apigenina, un compuesto bioactivo con propiedades relajantes, siendo indicado para ayudar a disminuir el estrés, la ansiedad y mejorar la calidad del sueño.
El nombre científico de la manzanilla es Matricaria recutita, conocida también como manzanilla alemana, dulce o cimarrona. La infusión se puede preparar con sus flores secas o usando los saquitos ya preparados, y se puede conseguir en supermercados o tiendas de productos naturales. Asimismo, el té de manzanilla también se utiliza mucho para combinar con otras plantas, como anís y menta, por ejemplo.
Vea con Tatiana Zanin todos los beneficios del té de manzanilla en el siguiente video:
TÉ DE MANZANILLA: el mejor remedio natural para el estrés
11:00 | 28.160 visualizaçõesPara qué sirve
Los principales beneficios de la manzanilla para la salud son:
1. Mejorar el sueño
La manzanilla posee propiedades calmantes y relajantes, debido a que posee un tipo de flavonoide llamado apigenina, un compuesto bioactivo que actúa en el sistema nervioso central promoviendo un efecto tranquilizante y sedativo, mejorando la calidad del sueño. Conozca otros tés naturales que también ayudan a mejorar el sueño.
2. Aliviar problemas estomacales
La manzanilla posee propiedades digestivas y antiinflamatorias que ayudan a tratar problemas gastrointestinales como cólicos abdominales, acidez, náuseas, mareos y gases.
Además de esto, gracias a sus propiedades antimicrobianas podría evitar el crecimiento de la Helicobacter Pylori, una bacteria que aumenta el riesgo de formar gastritis y úlceras estomacales.
3. Prevenir algunos tipos de cáncer
Gracias a sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, el consumo regular de camomila podría prevenir el surgimiento de ciertos tipos de cáncer, como el de próstata, tiroides y ovario, por ejemplo.
Los estudios [1] [2] [3] indican que tiene propiedad de inhibir el crecimiento tumoral gracias a la apigenina, uno de los compuestos bioactivos de esta planta medicinal, la cual induce la muerte de células cancerígenas.
4. Prevenir enfermedades cardiovasculares
El té de manzanilla es rico en luteina, quercetina y esculetina, antioxidantes que evitan la oxidación de las células de grasa, ayudando a equilibrar los niveles de colesterol total y colesterol llamado “malo“ o LDL en la sangre, previniendo así el desarrollo de enfermedades cardiovasculares, como infarto de miocardio o derrame cerebrovascular.
Asimismo, los flavonoides presentes en el té de manzanilla, también promueven la elasticidad y salud de las arterias, mejorando la circulación en la sangre y previniendo la presión alta.
5. Auxiliar en el tratamiento de la ansiedad y estrés
El té de manzanilla puede ayudar a tratar el trastorno de la ansiedad generalizada, incluso el estrés y la hiperactividad, pues contiene apigenina, un flavonoide que calma el sistema nervioso central y disminuye los niveles de cortisol en el organismo, una hormona que está relacionada con el estrés. Conozca otros tés que ayudan en el tratamiento de la ansiedad y estrés.
6. Controlar la diabetes
El té de manzanilla podría regular el azúcar en la sangre debido a sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, los cuales protegen las células del páncreas, por lo que su ingesta regular puede prevenir picos de hiperglucemia, siendo una excelente opción para ayudar a controlar la diabetes e incluso a prevenirla.
Sin embargo, es importante resaltar que el té de manzanilla es apenas un complemento y no se debe sustituir con el tratamiento indicado por el médico.
7. Aliviar los cólicos menstruales
El té de manzanilla posee propiedades analgésicas, antiespasmódicas y antiinflamatorias que ayudan a aliviar los cólicos menstruales.
Además de eso, la manzanilla también posee compuestos bioactivos que promueven el relajamiento del sistema nervioso central, aliviando la tensión premenstrual, como la irritabilidad, ansiedad e insomnio.
8. Ayudar en el tratamiento de la candidiasis
El té de manzanilla contiene flavonoides y alfa-bisabolol, compuestos bioactivos con propiedades antifúngicas, que ayudan en el tratamiento de la candidiasis, aliviando los síntomas de picazón, irritación y dolor.
9. Promover la salud de la piel
El té de camomila es excelente para la piel, pues ayuda a calmar y combatir el crecimiento de bacterias, ayudando en algunas situaciones, como alergias, dermatitis, quemaduras de sol, heridas y eccema.
10. Aliviar la gripe
Según algunos estudios [1] el té de manzanilla posee propiedades antiinflamatorias y antiespasmódicas que ayudan a mejorar los síntomas de los estados gripales y resfriados, como la tos, ronquera, dolor del cuerpo, irritación y congestión de la nariz. Incluso, además de beber el té de manzanilla, también puede usarse para inhalar el vapor y ayudar a aliviar la congestión de las vías aéreas.
Propiedades de esta planta
El té de manzanilla se caracteriza por tener propiedades antibacterianas, antiespasmódicas, estimulantes de la cicatrización, antidiarreicas, analgésicas, antiinflamatorias, antioxidantes, anticancerígenas y calmantes.
Estas propiedades se deben a sus componentes activos como lo son flavonoides, terpenos, cumarinas, ácido cafeico, luteolina, ácido clorogénico, entre otros.
Cómo se prepara el té de manzanilla
Para hacer el té de manzanilla, basta con adicionar de 0,5 g a 4 g de flores de manzanilla deshidratadas en una taza con 150 ml de agua hirviendo. Luego, tapar y dejar reposar por 4 o 5 minutos. Por último, colar y beber hasta 4 tazas de té de manzanilla por día.
Recetas con té de manzanilla
Los tés pueden ser preparados usando apenas flores secas de Manzanilla o mezclas hechas con otros tés, de acuerdo con el gusto y con los beneficios pretendidos.
1. Té de manzanilla con anís
El té de manzanilla con anís posee acción antiinflamatoria y calma el estómago, ayudando a reducir y combatir los gases, la acidez en el estómago y la mala digestión.
Ingredientes:
- 1 cucharadita de manzanilla seca;
- 1 cucharadita de semillas de anís;
- 500 ml de agua hirviendo.
Modo de preparación:
A 500 ml de agua hirviendo, agregar la mezcla y tapar. Dejar reposar alrededor de 5 minutos y colar antes de beber. Este té debe ser bebido 2 a 3 veces por día o siempre que sea necesario.
2. Té de manzanilla para los ojos
El té de manzanilla con semillas de hinojo machacadas y con flor de saúco cuando es aplicado en los ojos ayudan a refrescar los ojos cansados y a reducir la hinchazón. El té de manzanilla por si solo también puede ser aplicado con compresas para limpiar los ojos en los casos de conjuntivitis.
Ingredientes:
- 1 cucharada de manzanilla seca;
- 1 cucharada de semillas de hinojo machacadas;
- 1 cucharada de flores de saúco secas;
- 500 ml de agua hirviendo.
Modo de preparación:
A 500 ml de agua hirviendo se debe agregar la mezcla y tapar. Dejar reposar durante alrededor de 10 minutos, colar y colocar en el frigorífico.
Este té debe ser aplicado en los ojos cerrados utilizando una franela humedecida durante 10 minutos, siempre que sea necesario.
3. Té de manzanilla con limón
El té de manzanilla ayuda a aliviar a los síntomas de la sinusitis, gripes, resfriados e inflamaciones en la nariz, debido a sus propiedades antiinflamatorias. El limón también ayuda a aliviar estos síntomas debido a que posee propiedades antifúngicas y antibacterianas, complementando la manzanilla.
Ingredientes:
- 6 cucharaditas de hojas secas de manzanilla;
- 1/2 limón exprimido.
- 2 litros de agua hirviendo.
Modo de preparación:
Agregar las flores secas a 1 a 2 litros de agua hirviendo, tapar y dejar reposar alrededor de 5 minutos. El vapor del té debe ser inhalado profundamente alrededor de 10 minutos y para un mejor resultado debe colocar el rostro sobre el recipiente y cubrir la cabeza con una toalla grande.
4. Té de manzanilla con miel
El té de manzanilla con miel también puede ser usado para ayudar a calmar el dolor de garganta irritada e inflamada, debido a sus propiedades antiinflamatorias y antimicrobiana.
Ingredientes:
- 1 cucharadita de flores secas de manzanilla;
- 1 cucharadita de miel;
- 1 taza de agua hirviendo.
Modo de preparación:
Agregar la manzanilla a una taza de agua hirviendo y dejar reposar hasta enfriar. Este té debe ser usado para hacer gárgaras. Además de esto, también puede ser usado para facilitar la cicatrización de la gingivitis y de la estomatitis.
5. Té para calmar los mareos
El té de manzanilla con frambuesa o con menta piperita ayuda a aliviar las náuseas y los mareos.
Ingredientes:
- 1 cucharadita de manzanilla seca;
- 1 cucharadita de hojas secas de menta piperita o frambuesa;
- 1 taza de agua hirviendo.
Modo de preparación:
A 1 taza de agua hirviendo, agregar la mezcla y tapar. Dejar reposar alrededor de 10 minutos y colar antes de beber. Este té debe ser bebido 3 veces por día o siempre que sea necesario, sin embargo, no debe ser tomado por embarazadas sin orientación médica. Conozca más sobre los beneficios de la menta piperita.
Efectos secundarios
Los posibles efectos secundarios por el consumo excesivo de té de manzanilla son náuseas, vómitos, diarrea, irritación en la piel y somnolencia.
Contraindicaciones
El té de manzanilla no está indicado en las personas que son alérgicas a esta planta y a las plantas de la familia de las margaritas, como la ambrosía, la margarita y los crisantemos.
Además de eso, las personas que se encuentran utilizando anticoagulantes, analgésicos u otros medicamentos, deben consultar al médico antes de tomar té de manzanilla, ya que esta planta puede alterar los efectos de estos fármacos.
Este té no está indicado en bebés menores de 6 meses.
El té de manzanilla (Matricaria recutita) puede ser utilizado durante el embarazo y en el periodo de lactancia. Sin embargo, el té de manzanilla romana, debe ser evitado, pues todavía no existen estudios que comprueben su seguridad y eficacia con el uso de esa planta en mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.