Bochornos (sofocos): 9 causas y qué hacer

Los bochornos, conocidos también como sofocos, calorones o calores súbitos son sensaciones repentinas de calor que pueden ser causados por cambios hormonales que se producen durante la menopausia, la andropausia y el embarazo. No obstante, pueden surgir en personas con antecedente de cáncer de mama o que le hayan extirpado los ovarios, por ejemplo.

Estas sensaciones repentinas de calor se caracterizan porque se esparcen por el cuerpo y más intensamente en el rostro, cuello y pecho. Además, también pueden estar acompañados de intensa sudoración, enrojecimiento, manchas en la piel, aumento de los latidos cardíacos y sensación de frío o temblores cuando el sofoco pasa. 

No se sabe ciertamente cuál es el origen de los bochornos, pero se sabe que pueden estar relacionadas con cambios hormonales y con la regulación de la temperatura del cuerpo controlada por el hipotálamo, que es sensible a alteraciones hormonales.

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9 causas de bochornos

Las principales causas de bochornos son:

1. Menopausia

Los bochornos es uno de los síntomas más comunes de la menopausia, que surgen debido cambios hormonales que ocurren en el organismo de la mujer. Estos sofocos pueden surgir algunos meses antes de la mujer entrar en la menopausia y manifestarse repentinamente en varios momentos del día, variando de intensidad de acuerdo a cada mujer.

Qué hacer: el tratamiento va depender de la intensidad de los síntomas y debe ser determinado por el ginecólogo, que puede recomendar una terapia de reemplazo hormonal, otros medicamentos que ayuden a controlar estos síntomas, suplementos naturales e incluso alteraciones en la dieta. Vea cómo tratar los sofocos súbitos en la menopausia.

2. Andropausia

Los síntomas más comunes de la andropausia, son alteraciones repentinas del humor, cansancio, bochornos, disminución del deseo sexual y de la capacidad de erección, que se debe a una reducción en la producción de la testosterona alrededor de los 50 años de edad. Vea cómo identificar los síntomas de la andropausia.

Qué hacer: generalmente, el tratamiento consiste en el uso de medicamentos que aumenten los niveles de testosterona en la sangre, a través de comprimidos o inyecciones que solo se deben usar por recomendación del urólogo o endocrinólogo. 

3. Antecedentes de cáncer de mama

Mujeres que tuvieron cáncer de mama o realizaron tratamientos de quimioterapia que inducen a una insuficiencia ovárica, también pueden sufrir de bochornos, con síntomas semejantes a los que presentan las mujeres que están comenzando la menopausia. Conozca los tipos de cáncer de mama y los factores de riesgo asociados.

Qué hacer: en estos casos no es recomendado realizar terapia de reposición hormonal. La persona debe consultar con el médico, que puede recomendar terapias alternativas o productos naturales, para aliviar los síntomas. En estos casos no es recomendado realizar terapia de reposición hormonal. 

4. Remoción de los ovarios

La cirugía de remoción de los ovarios puede ser necesaria en algunas situaciones, como en el caso de la presencia de un absceso ovárico, cáncer, endometriosis o quistes ováricos. La remoción de los ovarios conduce a la aparición de una menopausia precoz, que también provoca síntomas como bochornos, ya que los ovarios dejan de producir hormonas.

Qué hacer: el tratamiento depende de la edad de la persona pudiendo ser necesario recurrir a terapias de reemplazo hormonal.

5. Efectos secundarios de los medicamentos

Algunos medicamentos, principalmente aquellos que inhibe la liberación de hormonas, también pueden causar calores súbitos,  como es el caso del acetato de leuprorelina, que es la sustancia activa del medicamento Lupron. Este medicamento indicado para el tratamiento de cáncer de próstata, mioma, endometriosis, pubertad precoz y cáncer de mama avanzado, actúa disminuyendo la producción de hormona gonadotrofina, bloqueando la producción en los ovarios y testículos, causando síntomas semejantes a la menopausia.

Qué hacer: generalmente, los síntomas desaparecen al suspender el medicamento, solo debe ser realizado cuando lo indique el médico. 

6. Terapia para cáncer de próstata

La terapia de supresión androgénica, es utilizada en el tratamiento del cáncer de próstata, que lleva a una reducción de testosterona y dihidrotestosterona en el organismo, y puede originar como efecto secundario la aparición de calor súbito.

Qué hacer: generalmente los síntomas desaparecen al descontinuar el medicamento, y sólo se debe realizar por orden médica.

7. Hipogonadismo

El hipogonadismo masculino, ocurre cuando los testículos producen poca o ninguna testosterona, que originan síntomas como impotencia, desarrollo anormal de los caracteres sexuales masculinos y calorones. El hipogonadismo femenino, ocurre cuando los ovarios producen poca o ninguna hormona sexual, como estrógeno y progesterona.

Qué hacer: este problema no tiene cura, pero los síntomas pueden ser mejorados a través de la terapia de reemplazo hormonal. Vea cómo se realiza el tratamiento del hipogonadismo.

8. Hipertiroidismo

El hipertiroidismo, se caracteriza por la producción excesiva de hormonas por la tiroides, que puede ser originado por alteraciones en el sistema inmunológico, inflamación o presencia de nódulos en la tiroides, originando síntomas como ansiedad, nerviosismo, palpitaciones, sensación de calor, temblores, sudor excesivo o cansancio frecuente, por ejemplo.

Qué hacer: el tratamiento depende de la causa que origina la enfermedad, de la edad de la persona y de los síntomas presentados, pudiendo ser realizado con medicamentos, yodo radiactivo o a través de la remoción quirúrgica de la tiroides.

Vea en el vídeo a continuación qué comer para ayudar a regular la tiroides:

Alimentación para problemas en la tiroides

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9. Embarazo

El embarazo es una fase en la vida de la mujer en que se presentan diversos cambios hormonales a nivel de los estrógenos y de la progesterona, lo que puede provocar una aumento de la temperatura corporal y como consecuencia el surgimiento de los bochornos.

Estos sofocos pueden surgir durante el día o la noche e incluso pueden provocar sudoración nocturna, causando malestar a la embarazada.

Qué hacer: se recomienda que la embarazada beba suficiente agua, que use ropa holgada de algodón para que la piel respire adecuadamente, tome una ducha con agua tibia y mantenga la casa ventilada, por ejemplo. En caso los bochornos se mantengan, lo ideal es acudir al obstetra para que realice una evaluación.

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