La Candida auris es un tipo de hongo que suele contagiarse en los hospitales, ocasionando síntomas como fiebre alta, fatiga y aumento de la frecuencia cardíaca, por ejemplo. Este hongo causa infecciones graves en pacientes con el sistema inmune débil y con un largo tiempo de hospitalización.
La C. auris es multirresistente, por lo que también se le conoce como "superhongo", lo que significa que presenta resistencia a varios antifúngicos, siendo difícil de eliminar. El tratamiento debe ser individualizado y basado en los resultados de los exámenes para evitar complicaciones, como infecciones en el torrente sanguíneo e incluso la muerte.
Esta bacteria fue aislada por primera vez en 2009 a partir de una muestra de secreción en el oído de un paciente japonés, y en el 2016 se determinó que el surgimiento de este hongo debe ser notificado obligatoriamente, ya que controlar esta infección es complicado.
Principales síntomas
Los síntomas de la Candida auris son:
- Fiebre alta;
- Escalofríos;
- Mareos;
- Fatiga;
- Aumento de la frecuencia cardíaca;
- Vómitos.
La infección por Candida auris es más común en personas que permanecen en el hospital por largos períodos y poseen el sistema inmunitario comprometido, lo que favorece la presencia del hongo en el torrente sanguíneo.
Este hongo se identificó en el oído, sin embargo, se encuentra más asociado a infecciones urinarias y del sistema respiratorio, pudiendo ser confundido con otros microorganismos.
A pesar de esto, aún no está claro si el foco de la infección por Candida auris puede ser realmente el pulmón o el sistema urinario, o si el hongo surge en estos sistemas como consecuencia de la infección en otro lugar del organismo, ya que se ha detectado en fosas nasales, ingles, axilas e incluso el recto.
Cómo se realiza el diagnóstico
El diagnóstico de la infección por Candida auris es difícil, ya que los métodos de identificación disponibles son poco específicos para la identificación de esta especie además de su difícil acceso por parte de los centros de salud, sin embargo se cuenta con exámenes específicos, como MALDI-TOF MS o PCR específica para Candida auris que pueden ayudar al diagnóstico de esta infección.
Además, este hongo puede ser aislado de diversos materiales biológicos, como por ejemplo sangre, secreción de la herida, secreciones respiratorias o de la orina, por ejemplo, por lo que es importante que el laboratorio realice exámenes más específicos cuando se identifique en la muestra la presencia de levadura perteneciente al género Cándida.
Es importante también que a medida que el test de diagnóstico se realice, también se haga un antifungigrama, que es una prueba que tiene como objetivo identificar los antifúngicos al que el hongo es sensible o resistente y, de esta forma, saber cuál es el tratamiento más adecuado para la infección.
Quién tiene más riesgo de infección
El riesgo de infección por Candida auris es mayor cuando la persona:
- Se mantiene hospitalizada por un largo período de tiempo;
- Utilizó anteriormente antifúngicos;
- Posee un catéter venoso central u otros dispositivos médicos en el organismo, ya que este hongo tiene la capacidad de adherirse a los equipos médicos;
- Hace o hizo uso prolongado o indiscriminado de antibióticos;
- Fue sometida recientemente a procedimientos quirúrgicos;
- Posee enfermedades como diabetes, enfermedad renal crónica, neoplasias, y se encuentra con el sistema inmunitario débil.
Por esto es importante que el hospital tenga un sistema de control de infección eficiente y estimule medidas de prevención de infección, tanto con el paciente como con las visitas, así como con el equipo de salud. Conozca cómo prevenir las infecciones hospitalarias.
Cómo se contagia la Candida auris
El contagio de Candida auris ocurre principalmente en centros sanitarios, ya que se propaga fácilmente tanto por el contacto directo con una persona infectada (aunque no presente síntomas) como por el contacto con superficies contaminadas en el entorno, como pomos de puertas, barandillas de camas o equipos médicos, entre otros.
Tratamiento para Candida auris
El tratamiento para Candida auris es complicado, ya que este hongo ha demostrado resistencia a los antifúngicos utilizados normalmente en el tratamiento de las infecciones por Candida, como al fluconazol y, en ciertos casos, a la anfotericina B.
De esta forma, el tratamiento que el médico indicará dependerá de cada caso, de la gravedad de la infección y del estado de salud del sistema inmunitario del paciente, además de la realización de pruebas para evaluar a qué antifúngico es susceptible la Candida auris, pues la resistencia puede variar dependiendo de la región geográfica. Sin embargo, se ha recomendado el uso de equinocandinas, un tipo de antifúngico, como terapia inicial.
Es importante que la infección por Candida auris sea identificada y tratada lo antes posible para evitar que el hongo se extienda por el torrente sanguíneo y dé lugar a una infección generalizada, lo que a menudo suele ser fatal.
¿Existe algún tratamiento natural para la Candida auris?
En la actualidad, no existe un tratamiento natural aprobado para Candida auris debido a su alta resistencia a los medicamentos convencionales. Sin embargo, algunos estudios científicos han investigado el potencial de aceites esenciales, como los de orégano, árbol de té, y canela, que han mostrado actividad antifúngica in vitro.
Aunque estos aceites esenciales parecen prometedores, aún no están aprobados como tratamientos clínicos, siendo necesario realizar más investigaciones para garantizar su seguridad y eficacia.
Además, siempre es recomendable consultar a un médico antes de intentar cualquier tratamiento alternativo.
Cómo se previene
Para prevenir la infección por Candida auris, se recomienda:
- Lavar y desinfectar las manos antes y después del contacto con la persona con C. auris y áreas cercanas;
- En caso de brote, evitar visitar a la persona infectada por C. auris en el hospital;
- Lavar las manos antes y después de realizar algún procedimiento en el paciente con C. auris, en el caso de los profesionales de salud;
- Desinfectar las superficies del hospital y los dispositivos médicos.
Es importante que el hospital tenga un sistema de control de infección eficiente y estimule medidas de prevención de infección tanto con el paciente y el equipo médico como con los visitantes del hospital. Asimismo, también se deben establecer protocolos de identificación y seguimiento de laboratorio de las infecciones por Candida sp. que presenten resistencia a los antimicrobianos. Conozca cómo prevenir infecciones en el hospital.