El hombro congelado es una situación en la que hay dolor, disminución progresiva de la amplitud de los movimientos y rigidez en el hombro, y sensación de que este está estancado. Esta afección puede ocurrir luego de largos períodos de inmovilización debido a una cirugía, o puede ser consecuencia de traumas en el hombro y ciertas enfermedades.
El hombro congelado, también conocido como capsulitis adhesiva o capsulitis de hombro, ocurre debido a la inflamación de la cápsula articular, que es el tejido que recubre la articulación del hombro, y del líquido sinovial, que sirve para lubricar la articulación y prevenir el desgaste de los cartílagos, seguida de la formación de adherencias y de tejido fibroso en la articulación.
Es importante que la capsulitis adhesiva sea identificada y tratada de acuerdo con las indicaciones del traumatólogo, el cual debe indicar el uso de medicamentos antiinflamatorios y/o corticosteroides, además de fisioterapia y, en ciertos casos, cirugía.
Síntomas de hombro congelado
Los principales síntomas del hombro congelado incluyen:
- Dolor en el hombro que empeora por la noche;
- Dolor en el hombro que aumenta gradualmente estando en reposo;
- Rigidez en el hombro;
- Dificultad para levantar los brazos;
- Sensación de que el hombro está estancado ("congelado").
Los síntomas de la capsulitis adhesiva son peores al inicio de la enfermedad, y suelen localizarse en la parte externa del hombro, pero también puede afectar la parte superior del brazo, causando una limitación de los movimientos y afectando las actividades del día a día.
Ante la presencia de síntomas de hombro congelado, se debe acudir a un traumatólogo para que realice el diagnóstico, identifique la fase de la enfermedad e indique el tratamiento más adecuado.
Fases del hombro congelado
De acuerdo con la evolución de la enfermedad, la capsulitis adhesiva se clasifica en las siguientes fases:
- Fase de congelamiento o dolorosa: el dolor en el hombro es difuso y aumenta gradualmente, y hay dolor agudo en límites extremos de movimiento. Esta fase dura entre 2 y 9 meses;
- Fase adhesiva o congelada: el dolor comienza a ceder y surge solo con movimiento; sin embargo, todos los movimientos se encuentran limitados y hay una compensación con la escápula. Esta fase dura de 4 a 12 meses;
- Fase de descongelamiento o recuperación: se caracteriza por una mejoría progresiva de la amplitud de movimiento del hombro, ausencia de dolor y sinovitis, pero con importantes restricciones de la cápsula. Esta fase dura de 12 a 42 meses.
Las distintas etapas del hombro doloroso son identificadas por el traumatólogo durante la consulta para el diagnóstico, lo que permite establecer el tratamiento más adecuado.
Cómo confirmar el diagnóstico
El diagnóstico del hombro doloroso es realizado por el traumatólogo mediante la evaluación de los síntomas, antecedentes de salud y examen físico del hombro.
Por lo general, no son necesarios otros exámenes; no obstante, si el médico sospecha de fracturas u otras condiciones de salud que pueden tener síntomas semejantes a los de la capsulitis adhesiva, como síndrome del manguito rotador, radiculopatía cervical o bursitis subacromial, puede ser solicitada una radiografía del hombro.
Posibles causas
Entre los factores que pueden contribuir al desarrollo de hombro congelado se incluyen:
- Diabetes;
- Enfermedades de la tiroides, como hiper o hipotiroidismo;
- Enfermedades degenerativas de la columna cervical, como espondilosis cervical;
- Enfermedades cardiovasculares;
- Enfermedad de Parkinson;
- Triglicéridos altos;
- Trauma en el hombro, como fracturas o rotura del manguito rotador;
- Inmovilización del hombro por tiempo prolongado, como luego de una cirugía de hombro, en la mama o en la columna cervical.
La causa de la capsulitis adhesiva no es totalmente conocida; sin embargo, se cree que la rigidez del hombro se debe inicialmente a un proceso de inflamación de la cápsula que reviste la articulación del hombro y del líquido sinovial, seguido de formación de adherencias y fibrosis del revestimiento sinovial, lo que torna la cápsula más gruesa y rígida, ocasionando al surgimiento de los síntomas.
Cómo es realizado el tratamiento
El tratamiento del hombro congelado debe ser realizado bajo la orientación del traumatólogo, con el objetivo de aliviar el dolor y mejorar la movilidad del hombro, e incluye:
1. Medicamentos
Los medicamentos que pueden ser indicados por el médico para el tratamiento de la fase inicial de la capsulitis adhesiva son antiinflamatorios, como ácido acetilsalicílico o ibuprofeno, para ayudar a aliviar el dolor.
Asimismo, el médico también puede indicar el uso de corticosteroides en forma de comprimidos.
2. Fisioterapia
La fisioterapia puede ser indicada por el médico y debe ser realizada bajo la orientación del fisioterapeuta, con ejercicios de estiramiento o ejercicios para aumentar la amplitud de los movimientos del hombro y, de esta manera, ayudar a mejorar la movilidad de la articulación del hombro.
El tratamiento fisioterapéutico debe ser escogido por el propio fisioterapeuta de forma individualizada, pudiendo incluso ser indicado el uso de neuroestimulación eléctrica transcutánea (TENS), que puede ayudar a aliviar el dolor y a mejorar la función de la articulación del hombro. Vea cómo es realizada la TENS.
3. Inyección de corticosteroides
La inyección de corticosteroides puede ser llevada a cabo por el traumatólogo, aplicando el medicamento directamente en la articulación del hombro, en especial en la fase inicial de la capsulitis adhesiva. Por lo general, es utilizada la cortisona, un tipo de antiinflamatorio fuerte, lo que puede contribuir al rápido alivio del dolor y mejorar la movilidad del hombro.
4. Hidrodilatación
La hidrodilatación puede ser realizada por el traumatólogo con la aplicación de suero fisiológico directamente en la articulación del hombro, para promover una dilatación de la cápsula articular, lo que ayuda a reducir el dolor y a mejorar la función de la articulación.
5. Manipulación de la articulación
La manipulación de la articulación del hombro puede ser indicada por el traumatólogo en aquellos casos donde las otras opciones de tratamiento no fueron eficaces para aliviar los síntomas de la capsulitis adhesiva.
Esta manipulación es llevada a cabo bajo anestesia general, lo que permite que el médico haga movimientos con el hombro en diferentes direcciones para intentar reducir la rigidez de la cápsula articular y ayudar a mejorar la amplitud de los movimientos del hombro.
6. Cirugía
La cirugía es indicada por el traumatólogo cuando no existe mejoría de los síntomas de la capsulitis adhesiva en un plazo de 9 a 12 meses con el uso de antiinflamatorios, inyección de corticosteroides en la articulación o fisioterapia.
Este procedimiento quirúrgico, conocido como artroscopia, es realizado removiendo el tejido fibroso y las adherencias de la articulación del hombro. Normalmente, es necesario llevar a cabo sesiones de fisioterapia luego de la cirugía para acelerar la recuperación. Conozca cómo es realizada la artroscopia de hombro y su recuperación.