El pterigion es el crecimiento del tejido de la conjuntiva, que es una membrana transparente que cubre la parte blanca del ojo, en dirección a la córnea, causando síntomas como visión turbia, ardor en el ojo, sensibilidad a la luz y dificultad para ver, principalmente cuando el tejido crece mucho y acaba recubriendo la pupila.
Esta afección, conocida popularmente como carnosidad en los ojos, ocurre con mayor frecuencia en hombres a partir de los 20 años de edad, y puede surgir debido a factores genéticos o a la exposición frecuente a los rayos UV del sol, polvo y viento, por ejemplo.
El tratamiento del pterigion es realizado por el oftalmólogo, el cual para aliviar los síntomas puede indicar el uso de lágrimas artificiales o de colirios descongestionantes o antiinflamatorios, y, en ciertos casos, la realización de cirugía.
Principales síntomas
Los principales síntomas del pterigion incluyen:
- Presencia de tejido que recubre la pupila;
- Irritación en el ojo y lagrimeo excesivo;
- Sensación de arena o cuerpo extraño en el ojo;
- Dificultad para ver;
- Comezón, sequedad, ardor y enrojecimiento en el ojo;
- Molestias al abrir y cerrar los ojos;
- Fotofobia, que corresponde a una mayor sensibilidad de los ojos a la luz;
- Visión turbia o doble, en casos más avanzados.
A pesar de que, en la mayor parte de los casos, el tejido que surge en los ojos es de un color más rosado, el de algunas personas puede tener una coloración más amarillenta y crecer gradualmente, pudiendo también provocar molestias a nivel estético y dificultad para utilizar lentes de contacto.
La carnosidad en los ojos es más común que surja del lado nasal de la región interpalpebral, es decir, en la esquina interna del ojo, en dirección a la córnea, recubriendo el iris, que es la parte coloreada del ojo.
Cómo confirmar el diagnóstico
El diagnóstico del pterigion es realizado por el oftalmólogo mediante la evaluación de los síntomas, antecedentes de salud y examen ocular, donde son evaluadas las características del tejido, como tamaño, localización, presencia de vasos sanguíneos, además del área afectada de la córnea.
Asimismo, el médico debe realizar otras pruebas como agudeza visual, movimientos oculares y exámenes de refracción, aparte del examen de lámpara de hendidura u oftalmoscopio, y la prueba de Schirmer, para evaluar la producción de lágrimas y su calidad. Veja los principales exámenes que evalúan la vista.
Posibles causas
La causa exacta de la carnosidad en los ojos no es totalmente conocida; sin embargo, los factores que pueden contribuir a su desarrollo incluyen:
- Edad, siendo más común entre los 20 y 40 años;
- Antecedentes familiares de pterigion;
- Exposición frecuente al polvo y al viento;
- Irritación ocular crónica;
- Exposición a climas calientes y secos.
Asimismo, otra causa muy común del pterigion es la exposición frecuente y prolongada de los ojos a la radiación ultravioleta (UV), siendo una condición común en surfistas, por lo cual también es conocido como "ojo de surfista".
Cómo es realizado el tratamiento
El tratamiento del pterigion debe ser realizado con las indicaciones del oftalmólogo, y varía de acuerdo con los síntomas y su gravedad.
Los principales tratamientos que pueden ser indicados por el médico para la carnosidad en los ojos incluyen:
1. Lentes de sol con protección UV
En todos los casos de pterigion, lo más recomendable es utilizar lentes de sol con protección UV, además de sombreros y gorras, en especial cuando el pterigion es pequeño y no ocasiona síntomas, pues la protección de los ojos contra los rayos UV del sol ayuda a evitar que el mismo aumente de tamaño.
2. Lágrimas artificiales
El uso de lágrimas artificiales sin conservantes puede ser indicado por el oftalmólogo para ayudar a aliviar la resequedad de los ojos y a reducir las molestias causadas por el pterigion.
3. Colirios
Los colirios que contienen descongestionantes, antialérgicos, corticosteroides o antiinflamatorios pueden ser indicados por el médico para aliviar los síntomas de irritación, ardor, comezón y enrojecimiento. Vea los principales tipos de colirio.
4. Cirugía de pterigion
La cirugía para el pterigion es indicada cuando el tejido crece de manera excesiva y, además de las molestias estéticas, la capacidad visual de la persona se ve afectada.
Esta cirugía es realizada bajo anestesia local, dura alrededor de 30 minutos y consiste en la remoción del exceso tejido, seguida de un trasplante de conjuntiva para recubrir la zona de la lesión.
A pesar de promover la remoción del exceso de tejido, es importante que sean adoptados cuidados con los ojos, como uso de sombreros y lentes de sol, pues el pterigion puede volver a surgir.