Existen diversas formas de quitar una cicatriz, debiendo optar en primer lugar por un tratamiento estético, el uso de parches y pomadas o con inyecciones, y en caso que estas opciones no funcionen, también existe la posibilidad de realizar una cirugía plástica.

La cirugía tiene como finalidad corregir los defectos ocasionados por una mala cicatrización de la piel, como consecuencia de un corte, quemadura o cirugía previa, como una cesárea o apendicectomía, por ejemplo.

Este tipo de procedimiento quirúrgico ayuda a mejorar las irregularidades en la textura, tamaño o color de la cicatriz, proporcionando una piel más uniforme, realizándose solo en cicatrices graves o cuando otro tipo de tratamientos no funcionan.

Cómo se lleva a cabo la cirugía

El procedimiento realizado para remover la cicatriz depende del tipo, tamaño, localización y gravedad de la cicatriz, y es escogido por el cirujano plástico de acuerdo con las necesidades y el tipo de cicatrización de cada persona, pudiendo usar técnicas que impliquen cortes, remoción o reorientación de las partes de la piel afectada.

La Plastia en Z o zetaplastia es el tipo de cirugía más popular para tratar las cicatrices, existiendo diversas técnicas que dependerán del tipo de cicatriz a tratar.

Tipos de cirugía

Existen diversos tipos de cirugías, estos son:

Plastia en Z media: cuando la piel adyacente de uno de los lados de la cicatriz es elástica y del otro no;
Plastia en Z en cuatro colgajos (colgajo de Limberg): se usa particularmente para la liberación de contracturas cicatriciales graves que tensan o restringen la flexión normal o en quemaduras;
Plastia en Z planimétrica: indicada para áreas planas, y el triangulo de la z-plastia es colocado en forma de injerto;
Plastia en S: para el tratamiento de cicatrices ovales contraídas;
W-plastia: para mejorar cicatrices lineales irregulares;
Líneas geométricas quebradas: sirve para convertir una cicatriz lineal larga en una cicatriz irregular de forma aleatoria, para que sea menos visible;
V-Y y avance tipo V-Y: en casos de cicatrices pequeñas contraídas;
Subsición y rellenado: sirve para cicatrices retraídas y profundas que requieren de relleno de grasa o ácido hialurónico;
Dermoabrasión: es la técnica más antigua y puede realizarse manualmente o con un dispositivo.

Para la realización del procedimiento quirúrgico, el médico puede solicitar algunos exámenes preoperatorios. Como en cualquier cirugía, se debe realizar ayuno de 8 horas, y el tipo de anestesia que se suministre, dependerá del procedimiento que será llevado a cabo, pudiendo ser local, sedación leve o general.

En algunos casos, la realización de una única cirugía es suficiente para garantizar buenos resultados, sin embargo, en casos más complicados, puede ser necesario repetir la cirugía o la realización de nuevos tratamientos.

Cómo es la recuperación

Después de la cirugía, puede aparecer inflamación en la zona tratada, por esto, el resultado del procedimiento puede notarse al cabo de unas semanas. La cicatrización total puede tomar meses, e incluso 1 año para completarse. En el período de cicatrización, se recomienda:

Evitar actividades físicas intensas;
No exponerse de forma excesiva al sol durante 30 días;
El uso de protector solar a diario, incluso después de se complete el proceso de cicatrización.

Además de esto, para favorecer la cicatrización luego de la cirugía y evitar que vuelva a ser antiestética, el médico puede recomendar otros tratamientos tópicos, como por ejemplo, parches de silicona, pomadas cicatrizantes o la colocación de un vendaje.

Quién puede realizarse la cirugía

La cirugía para corrección de cicatriz puede ser indicada por el cirujano, en situaciones donde existan defectos en la formación de la cicatriz, que pueden ser:

Queloide: es una cicatriz endurecida, con un crecimiento mayor de lo normal, debido a una excesiva producción de colágeno, pudiendo presentar comezón y enrojecimiento. Conozca qué es un queloide.
Cicatriz hipertrófica: es una cicatriz engrosada, debido a la desorganización de las fibras de colágeno, que pueden ser más oscuras o más claras que la piel de alrededor.
Cicatriz retráctil: causa una aproximación de la piel de alrededor, muy común en cesáreas, abdominoplastias o debido a una quemadura, dificultando la movilidad de la piel y las articulaciones próximas.
Cicatriz ensanchada: es una cicatriz rasa y blanda, con una superficie más baja que la de la piel.
Cicatriz discrómica: causa una alteración en el color de la piel, pudiendo ser más clara o más oscura que la piel de alrededor.
Cicatriz atrófica: la cicatriz es profunda con respecto al relieve de la piel de alrededor, muy común en heridas y cicatrices de acné.

La intención de la cirugía es mejorar la apariencia y uniformar la piel, sin embargo, no siempre garantiza la desaparición completa de la cicatriz, además, los resultados pueden variar de acuerdo con la piel de cada persona.

Otras opciones para tratar la cicatriz

Otros tratamientos recomendados que deben intentarse antes de realizarse una cirugía son:

1. Tratamientos estéticos

Existen diversas técnicas que pueden aplicarse para mejorar la apariencia de las cicatrices leves, como las que surgen por el acné, por ejemplo. Algunos de estos tratamientos son el peeling químico, la microdermoabrasión, el uso de láser, radiofrecuencia, ultrasonido o carboxiterapia.

Estos tratamientos pueden realizarse por un cirujano plástico o dermatólogo, sin embargo, cuando las cicatrices son más grandes y difíciles de tratar, es posible que estos tratamiento no sean tan eficaces, debiendo optar por otros tratamientos o por la realización de una cirugía.

2. Tratamiento con parches y pomadas

Se realiza con la colocación de parches de silicona, cintas adhesivas o vendaje compresivos, indicados por el cirujano plástico, que pueden usarse durante algunas semanas o varios meses. También se pueden indicar masajes con productos especiales, los cuales ayudan a disminuir el grosor, la fibrosis o la alteración del color de la cicatriz.

3. Tratamiento inyectable

Para mejorar la apariencia de las cicatrices deprimidas o atróficas, se pueden inyectar sustancias como el ácido hialurónico o el polimetilmetacrilato por debajo de la cicatriz, para lograr rellenar la piel y dejarla más lisa. El efecto de este tratamiento puede ser temporal o duradero, dependiendo del tipo de material utilizado y de las condiciones de la cicatriz.

En las cicatrices hipertróficas se puede realizar la inyección de corticoides, para así disminuir la formación de colágeno, reduciendo el tamaño y el grosor de la cicatriz.