La coledocolitiasis es la presencia de cálculos en el conducto biliar común, también llamado conducto colédoco, lo que provoca síntomas como dolor abdominal en el lado superior derecho, náuseas, fiebre o coloración amarillenta de la piel y los ojos (ictericia).
Los cálculos en el conducto biliar común pueden estar formados por colesterol, pigmentos y/o lípidos. Algunos factores, como obesidad, dieta rica en grasas y azúcares, o embarazo, pueden aumentar el riesgo de formación de estos cálculos.
El tratamiento de la coledocolitiasis lo realiza un hepatólogo, gastroenterólogo o médico general, e incluye la extracción de los cálculos mediante cirugía.
![Persona mayor en el médico con dolor en el abdomen](https://image.tuasaude.com/media/article/vo/xh/coledocolitiase_62202.jpg?width=686&height=487)
Síntomas de la coledocolitiasis
Los principales síntomas de la coledocolitiasis son:
- Dolor abdominal en el lado superior derecho.
- Dolor que puede irradiarse hacia la espalda.
- Fiebre o escalofríos.
- Náuseas y vómitos.
- Pérdida del apetito.
- Coloración amarillenta de la piel y los ojos (ictericia).
- Picazón en el cuerpo.
- Heces claras y orina oscura.
El dolor puede ser moderado o intenso, presentarse de manera intermitente o ser prolongado.
En caso de que surja dolor intenso, confusión mental o presión baja, se debe acudir inmediatamente al hospital, ya que se trata de una emergencia médica que requiere atención inmediata.
Cómo confirmar el diagnóstico
El diagnóstico de la coledocolitiasis lo realiza un hepatólogo, gastroenterólogo o médico general mediante la evaluación de los síntomas, historial clínico y un examen físico.
Además, se solicitan análisis de sangre para medir:
- Hemograma completo.
- Fosfatasa alcalina.
- Bilirrubina.
- Alanina aminotransferasa (ALT).
- Aspartato aminotransferasa (AST).
- Gamma-glutamil transferasa (GGT).
Estos análisis permiten evaluar la función hepática. También se puede realizar un ultrasonido para identificar la dilatación del conducto biliar común y la presencia de cálculos.
Si el ultrasonido no confirma el diagnóstico, se puede solicitar una resonancia magnética para descartar otras condiciones similares, como cáncer, estrechamiento del conducto biliar o quistes en el colédoco.
Posibles causas
La coledocolitiasis puede deberse a la formación de cálculos en el conducto biliar común o al paso de cálculos desde la vesícula biliar hacia el conducto.
Factores que aumentan el riesgo:
- Factores genéticos.
- Dieta rica en grasas y azúcares.
- Embarazo.
- Obesidad.
- Pérdida rápida de peso debido a cirugía bariátrica o dietas restrictivas.
- Cirrosis hepática.
- Anemia falciforme.
- Ayuno prolongado en personas con nutrición parenteral total.
Otros factores incluyen medicamentos como estrógenos, clofibrato o análogos de somatostatina.
Tipos de coledocolitiasis
La coledocolitiasis se clasifica según el origen de los cálculos:
- Coledocolitiasis primaria: Los cálculos se forman dentro del conducto biliar común, generalmente compuestos de pigmentos negros o marrones.
- Coledocolitiasis secundaria: Los cálculos se forman en la vesícula biliar y migran al conducto biliar común, estando principalmente compuestos de colesterol.
El tipo de coledocolitiasis se identifica mediante estudios diagnósticos.
Cómo se realiza el tratamiento
El tratamiento de la coledocolitiasis se realiza en el hospital por un hepatólogo, gastroenterólogo o médico general mediante cirugía para remover los cálculos del conducto biliar común.
La cirugía para la extracción de los cálculos del conducto biliar común puede llevarse a cabo mediante endoscopia, conocida como colangiopancreatografía retrógrada endoscópica (CPRE), que se suele recomendar en casos de coledocolitiasis primaria.
En casos de coledocolitiasis secundaria, también se puede realizar una cirugía llamada colecistectomía, que implica la extracción de la vesícula biliar. Sepa cómo es la recuperación después de la operación de la vesícula.
Posibles complicaciones
Si no se trata, la coledocolitiasis puede causar diversas complicaciones, incluyendo:
- Colangitis (inflamación de los conductos biliares).
- Pancreatitis biliar.
- Cirrosis hepática.
- Insuficiencia hepática o renal.
Las complicaciones de la cirugía incluyen pancreatitis post-CPRE, infecciones, recurrencia de los cálculos, lesiones en el conducto biliar o vasos sanguíneos hepáticos, o incluso sepsis.