Cómo mejorar la voz para cantar

Para cantar bien es necesario enfocarse en ciertos aspectos esenciales, como mejorar la capacidad respiratoria para lograr mantener una nota sin tener que tomar descansos para respirar, mejorar la capacidad de resonancia y, por último, entrenar las cuerdas vocales y la laringe para fortalecerlas y que logren producir sonidos más armoniosos. 

Aunque algunas personas nazcan con un don natural para cantar y no necesiten de mucho entrenamiento, la gran mayoría requiere entrenar para desarrollar una voz de canto bonita. Por esta razón, de la misma forma que se entrenan los músculos del cuerpo en el gimnasio, las personas que necesiten cantar o tengan este deseo también deben entrenar la voz. 

Para garantizar los mejores resultados, siempre lo más ideal es participar en clases de canto y tener un profesor que ayude a entrenar y corregir las fallas individuales. Vea cómo engrosar la voz

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Ejercicios para mejorar la voz

Algunos ejercicios para mejorar la voz y cantar bien, que deben ser realizados durante al menos 30 minutos por día, son:

1. Aumentar la capacidad respiratoria

La capacidad respiratoria es la cantidad de aire que los pulmones logran reservar y utilizar. Esta es muy importante para quien quiera cantar, pues garantiza que se logre mantener un flujo de aire constante pasando por las cuerdas vocales, lo que permite mantener una nota durante más tiempo, sin parar para respirar. 

Una forma simple para entrenar los pulmones y aumentar la capacidad respiratoria consiste en inhalar profundo y retener la mayor cantidad de aire posible dentro de los pulmones, después se debe exhalar lentamente el aire al mismo tiempo que se hace el sonido "sssssss", como si fuese un balón vaciándose. Durante el proceso de liberar el aire se puede contar cuántos segundos demora y, luego, intentar aumentar este tiempo. 

2. Calentar las cuerdas vocales

Antes de comenzar cualquier ejercicio que utilice la voz, es muy importante calentar las cuerdas vocales, pues garantiza que están listas para ser bien trabajadas. Este ejercicio es muy importante, pues incluso puede mejorar la voz en menos de 5 minutos, pero debe ser realizado frecuentemente para garantizar mejores resultados. Aparte de calentar las cuerdas vocales, ayuda a relajar los músculos responsables por la producción de los sonidos.

Para llevar a cabo el ejercicio se debe realizar un sonido semejante al de una abeja "zzzz" y después ir subiendo la escala por lo menos 3 notas. Cuando se alcance la nota más alta, se debe mantener durante 4 segundos y luego volver a bajar la escala. 

3. Mejorar la resonancia

La resonancia está relacionada con la forma en como el sonido producido por las cuerdas vocales vibra dentro de la garganta y de la boca, tal como ocurre dentro de una guitarra cuando se hace vibrar una de sus cuerdas, por ejemplo. Por lo tanto, mientras mayor sea el espacio para que pueda ocurrir la resonancia, la voz será más rica y llena, lo que hará que sea más bonita al momento de cantar. 

Para entrenar la capacidad de resonancia se debe decir la palabra "hang" mientras que se intenta mantener la garganta bien abierta y el paladar levantado. Después de lograrlo se puede añadir una "a" al final de la palabra, es decir, "hang-a" y realizarlo varias veces seguidas. 

Durante este ejercicio es fácil identificar que la parte de atrás de la garganta se abre más, y es este movimiento el que se debe realizar cuando se está cantando, especialmente cuando es necesario mantener una nota. 

4. Relajar la laringe

Cuando la laringe se encuentra muy contraída durante el canto, es común sentir que se alcanzó un "techo" en la capacidad que se tiene para cantar de forma más aguda, por ejemplo. Asimismo, la contracción de la laringe también provoca una sensación de "bola" en la garganta, la cual puede acabar por perjudicar la forma en como la voz es producida. 

De esta forma, siempre que surjan estos signos, una buena forma de volver a relajar la laringe consiste en decir la palabra "ah" y mantener la nota durante algún tiempo. Después, se debe repetir el ejercicio hasta sentir que la laringe ya se encuentra más relajada y que la sensación de "bola" en la garganta está desapareciendo.