El condiloma es un tipo de lesión que puede surgir en la región genital como consecuencia de una infección de transmisión sexual (ITS), causada principalmente por el virus del VPH y por la bacteria Treponema pallidum, que es responsable por la sífilis. Según el agente que la origina, esta lesión puede ser clasificada en dos tipos principales:
- Condiloma acuminado, que son verrugas causadas por el VPH de los tipos 6 y 11, las cuales tienen aspecto semejante a una coliflor, principalmente cuando existen varias verrugas en el mismo lugar;
- Condiloma plano, que son lesiones asociadas a la sífilis secundaria y que corresponden a lesiones grandes y grisáceas que pueden aparecer no solo en la región genital y anal, sino también en las regiones de los pliegues.
Es importante que siempre que se note la presencia de lesiones en la región genital, que puedan indicar infección de transmisión sexual, se consulte al ginecólogo, urólogo o infectólogo para que se realice el diagnóstico y se pueda iniciar el tratamiento más adecuado.
Cómo identificarlo
El condiloma se puede identificar como una verruga o lesión presente en la región genital, la cual, en el caso del acuminado, puede tener una coloración blanquecina y una apariencia semejante a una coliflor. Además, si se trata de infección por el VPH, es común que existan varias verrugas juntas.
Con respecto al condiloma plano, las lesiones son grandes, elevadas y grises y aparecen no solo en la región genital, sino también en los pliegues del cuerpo. Asimismo, cuando esta lesión está presente en la región anal, es posible también que existan signos de irritación e inflamación en el lugar.
Independientemente del tipo de condiloma, estas lesiones contienen una elevada cantidad del agente infeccioso, por lo que la transmisión puede ocurrir fácilmente por medio del contacto sin protección con la lesión. Además, los condilomas se identifican con más frecuencia en la cabeza del pene, vulva, labios mayores y menores, cuello del útero y ano.
Para confirmar el tipo de lesión, el urólogo, ginecólogo o infectólogo deben evaluar en detalle las características de las mismas y verificar la presencia de cualquier otro síntoma, aparte de recomendar pruebas específicas para confirmar el agente infeccioso responsable por el condiloma.
Cómo prevenirlo
Para prevenir el desarrollo del condiloma, se recomienda evitar la relación sexual sin protección, incluso si no hay penetración, ya que cualquiera de estas lesiones que esté presente en la región genital puede contener el agente infeccioso que puede ser transmitido.
En los casos donde las lesiones se encuentran en la zona más externa de la región genital y no es posible proteger con preservativo, lo indicado es evitar el contacto sexual hasta que se considere totalmente eficaz el tratamiento.
De esta forma, la mejor manera de prevenir el desarrollo del condiloma es evitar la enfermedad, utilizando preservativo en todas y cada una de las relaciones sexuales.
Cómo se lleva a cabo el tratamiento
El tratamiento para el condiloma plano y acuminado varían según las características de las lesiones y del agente infeccioso asociado con la enfermedad, siendo importante que, en ambos casos, el tratamiento se realice de acuerdo con la recomendación médica, aunque no existan más síntomas aparentes.
1. Condiloma acuminado
El tratamiento para el condiloma acuminado generalmente se realiza con la aplicación de pomadas y soluciones que tienen en su composición sustancias químicas, tales como las siguientes:
- Ácido tricloroacético en concentración del 70 al 90%;
- Podofilina al 15%;
- 5-fluoracilo.
Este tipo de tratamiento puede demorar entre varios meses hasta algunos años para que las verrugas desaparezcan por completo; no obstante, el mismo también se puede llevar a cabo con cirugía para eliminar la lesión de manera inmediata.
Sin embargo, como el condiloma acuminado es provocado por una infección viral, las verrugas genitales pueden continuar reapareciendo hasta que el organismo pueda eliminar el virus del VPH, siendo necesario volver a realizar el tratamiento. Además del tratamiento, los médicos aconsejan que todas las parejas de las personas que tengan verrugas del VPH sean examinadas y tratadas si se les diagnostica la enfermedad, incluso si aún no han generado síntomas.
Vea más detalles sobre el tratamiento del VPH.
2. Condiloma plano
En el caso del condiloma plano, también conocido como condiloma lata, el tratamiento se realiza con antibióticos para eliminar la bacteria responsable de la sífilis, la cual conduce a la aparición de lesiones de este tipo en la piel.
Cuando el tratamiento no se realiza, el condiloma puede desaparecer; sin embargo, luego puede volver a surgir e incluso puede aumentar de tamaño y estar acompañado de síntomas más graves, como pérdida del apetito, anemia o síntomas neurológicos, los cuales caracterizan a la sífilis terciaria, que es la forma más avanzada de esta enfermedad.