Qué es:
El condón femenino es un método anticonceptivo que puede sustituir la pastilla anticonceptiva para evitar un embarazo no deseado y también como forma de protección contra infecciones de transmisión sexual como el VPH, sífilis o el VIH.
Este tipo de preservativo se pueden adquirir en las farmacias, pero también pueden comprarse por internet o en sex shops, y normalmente es más caro que el condón masculino. En algunos países es ofrecido por algunos puestos de salud gratuitamente.
El preservativo femenino tiene cerca de 15 centímetros de longitud y está formado por 2 anillos de diferentes tamaños que se unen formando una especie de tubo. El lado del anillo más estrecho del preservativo, es la porción que queda dentro de la vagina, y se cierra impidiendo la entrada del espermatozoides en el útero, protegiendo a la mujer de las secreciones masculinas. Se puede colocar hasta 8 horas antes del contacto íntimo y no debe ser utilizado en conjunto con el preservativo masculino.
Cómo se usa el condón femenino
Para colocar el condón femenino de forma correcta se debe:
- Sujetar el preservativo con la abertura hacia abajo;
- Apretar en el centro del anillo más pequeño que queda hacia arriba, formando un '8' para introducirlo más fácilmente en la vagina;
- Elegir una posición cómoda, que puede ser agachada o con una de las piernas dobladas;
- Introducir el anillo en forma de '8' dentro de la vagina dejando cerca de 3 cm afuera;
Para retirar el preservativo, después del acto sexual, se debe sostener y girar el anillo más grande que quedó fuera de la vagina, de forma que no deje que las secreciones salgan y posteriormente se debe tirar del preservativo hacia fuera. Después de eso, es importante hacer un nudo en medio del preservativo y tirarlo a la basura.
Este método es estupendo porque además de evitar un embarazo, también impide la transmisión de enfermedades. Sin embargo, para quien está intentando evitar un embarazo existen otros métodos anticonceptivos que puede utilizar.
5 errores comunes al momento de usarlo
Algunos de los errores más comunes que disminuyen la eficacia del condón son:
1. Colocar el preservativo después de iniciar la relación
El preservativo femenino puede colocarse hasta 8 horas antes de la relación sexual, sin embargo, muchas mujeres sólo lo utilizan después de haber iniciado el contacto íntimo, impidiendo sólo el contacto con el esperma. Sin embargo, algunas enfermedades como herpes y VPH pueden ser transmitidas por la boca.
Qué hacer: colocar el preservativo antes del contacto íntimo o poco después de iniciar la relación, evitando el contacto directo de la boca y del pene con la vagina.
2. No verificar la envoltura antes de abrirlo
La envoltura de cualquier preservativo debe ser observada antes de su uso para verificar si existen agujeros o daños que puedan comprometer la seguridad del método anticonceptivo. Sin embargo, este es de los pasos que más fácilmente se ignoran durante todo el proceso de colocación.
Qué hacer: comprobar toda la envoltura antes de abrirlo y consultar la fecha de caducidad.
3. Colocar el preservativo de forma equivocada
Aunque es fácil identificar el lado de la abertura del preservativo, en algunas situaciones la mujer puede confundirse, acabando por introducir el preservativo femenino al contrario. Esto hace que la abertura quede hacia el interior y el pene no pueda entrar. En estos casos, el pene puede pasar entre el preservativo y la vagina, anulando el efecto deseado.
Qué hacer: observar correctamente el lado de la abertura del preservativo e introducir sólo el anillo más pequeño, que no está abierto.
4. No dejar una parte del preservativo fuera
Después de colocar el preservativo es muy importante dejar una parte afuera pues eso permite que el preservativo no se mueva y evita el contacto del pene con la parte externa de la vagina. Así, cuando el preservativo es mal colocado puede hacer que el pene entre en contacto directo con la vagina, aumentando el riesgo de contagio de enfermedades de transmisión sexual o de embarazo.
Qué hacer: después de colocar el preservativo en el interior de la vagina se debe dejar unos 3 cm afuera para proteger la región externa.
5. No utilizar lubricante durante la relación
El lubricante ayuda a reducir la fricción durante el contacto íntimo, facilitando la penetración. Cuando no hay suficiente lubricación, el movimiento del pene puede crear mucha fricción, pudiendo generar pequeñas fisuras en el preservativo.
Qué hacer: es importante utilizar un lubricante a base de agua adecuado.