La congestión mamaria es la acumulación de leche en las mamas, lo que lleva a la aparición de síntomas como dolor, rigidez, enrojecimiento o aumento del volumen de las mamas.
Esta condición es más común en los primeros días después del nacimiento del bebé, siendo principalmente consecuencia de una técnica incorrecta de amamantamiento, succión ineficaz del bebé o uso de suplementos para aumentar la producción de leche.
El tratamiento para la congestión mamaria debe ser orientado por el obstetra y normalmente se realiza mediante masajes y compresas frías o calientes con el objetivo de aliviar los síntomas y promover la fluidez y, en consecuencia, la liberación de la leche.
Principales síntomas
Los principales síntomas de la congestión mamaria son:
- Mamas endurecidas debido al exceso de leche;
- Aumento del volumen de las mamas;
- Presencia de áreas enrojecidas y brillantes;
- Pezones achatados, que interfiere en la salida de la leche;
- Incomodidad o sensación de dolor en las mamas;
- Fiebre en algunos casos.
Además, el hecho de que los pezones queden achatados dificulta que el bebé los agarre, lo que dificulta la lactancia y el vaciamiento del seno, lo que aumenta el dolor y la incomodidad.
La congestión mamaria es una condición frecuente en el período inicial de la lactancia, debido al aumento en la producción de leche materna, pudiendo surgir de 2 a 4 días después del parto y generalmente dura alrededor de 24 a 48 horas.
Lea también: 6 factores que pueden interferir en la lactancia materna (y qué hacer) tuasaude.com/es/factores-que-interfieren-con-la-lactancia-maternaCómo confirmar el diagnóstico
El diagnóstico de la congestión mamaria se realiza por parte del obstetra mediante la evaluación de los síntomas y el examen físico, observando las características de las mamas, sin necesidad de realizar exámenes complementarios.
A través del examen físico de las mamas, el médico puede descartar otras condiciones con síntomas similares, como conducto obstruido o mastitis, por ejemplo.
También es importante que el médico pregunte sobre cómo está siendo la lactancia materna, la técnica de agarre del bebé y la frecuencia de las tomas, entre otros aspectos.
Causas de la congestión mamaria
Las principales causas de congestión mamaria son:
- Retraso en el inicio de la lactancia materna;
- Producción excesiva de leche materna;
- Técnica incorrecta para amamantar;
- Succión ineficaz del bebé;
- Lactancia poco frecuente;
- Uso de suplementos para aumentar la producción de leche.
Debido a la mayor cantidad de leche, esta se acumula dentro del conducto mamario, lo que resulta en una alteración en la fluidez natural de la leche, volviéndola más viscosa y dificultando aún más su paso a través de los conductos de leche hacia fuera de la mama.
Qué debe hacer
El tratamiento de la congestión mamaria debe llevarse a cabo bajo la orientación del obstetra, quien puede recomendar:
- Amamantar con frecuencia según la demanda libre, siempre que el bebé lo desee o cada 3 horas;
- No retrasar el inicio de la lactancia y no saltarse las tomas;
- Extraer el exceso de leche con las manos o con un sacaleches adecuado hasta que sea más fácil para el bebé agarrar el pecho;
- Verificar si el agarre del bebé es correcto;
- Vaciar completamente el pecho en cada toma;
- Aplicar compresas frías justo después de que el bebé haya terminado de mamar para reducir la inflamación del pecho;
- Aplicar compresas tibias en el pecho para ayudar a liberar la leche y aumentar su fluidez;
También es importante realizar masajes suaves en los senos para ayudar a conducir la leche a través de los conductos mamarios y hacerla más fluida, evitando así la formación de leche estancada.
Además de eso, el médico puede recomendar el uso de paracetamol o ibuprofeno para reducir el dolor y la hinchazón del pecho.
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