Violeta de genciana: para qué sirve, cómo usar y efectos secundarios

La violeta de genciana es un medicamento que posee acción antifúngica, antiséptica y antibacteriana y que se usa sobre la piel. Está indicada para el tratamiento de heridas, dermatitis o infecciones bacterianas o fúngicas de la piel o mucosas, como candidiasis oral, pie de atleta, estomatitis o aftas, aliviando síntomas como comezón, enrojecimiento y sensación de ardor en la piel.

Además, la violeta de genciana, también llamada cristal violeta, puede ser empleada en el champú o en la mascarilla de hidratación para mejorar el aspecto de los reflejos dorados en el cabello decolorado, con mechas o teñido de rubio. Otro uso de la violeta de genciana es en laboratorios para permitir la identificación de ciertas bacterias.

La violeta de genciana puede encontrarse en farmacias, droguerías y tiendas de productos naturales, en forma de solución alcohólica al 1 o 2 %, en frascos de 30 ml, y debe ser empleada bajo orientación médica o de otro profesional de la salud, pues puede causar irritación y manchas en la piel.

Frasco y gotero con violeta de genciana

Para qué sirve

La violeta de genciana está indicada para ayudar en el tratamiento de inflamaciones o infecciones de la piel o mucosas, tales como:

  • Candidiasis oral;
  • Aftas o estomatitis;
  • Impétigo;
  • Dermatitis;
  • Eczema atópico;
  • Eritema multiforme;
  • Prurigo nodular;
  • Pie de atleta;
  • Heridas superficiales de la piel.

La violeta de genciana también puede ser empleada para matizar el cabello rubio teñido o con reflejos; no obstante, como este producto contiene alcohol en su composición, el uso prolongado en el cabello puede causar resequedad, además de poder manchar la ropa y la piel.

Asimismo, la violeta de genciana puede ser utilizada para el diagnóstico de la tiña versicolor, para marcar la piel antes de cirugías o para permitir la identificación de ciertas bacterias en laboratorios, por ejemplo.

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Cómo usar

La forma de uso de la violeta de genciana varía según el objetivo, pudiendo ser empleada sobre la piel para tratar condiciones de salud o en el cabello para matizar el rubio.

Las principales formas de uso de la violeta de genciana incluyen:

1. Violeta de genciana en la piel

La violeta de genciana debe ser empleada sobre la piel afectada. Para esto, se debe aplicar un poco de la solución en un hisopo, algodón o gasa, para evitar manchas en la piel, y luego pasar solo en la zona afectada, evitando hacerlo en la piel saludable, 1 o 2 veces por día, o según las indicaciones médicas.

El uso de la violeta de genciana debe realizarse por un máximo de 3 o 4 días, pues puede causar irritación de la piel o manchas permanentes.

Antes de usar la violeta de genciana, se recomienda lavar y secar bien la piel, y después de usarla, lavar inmediatamente las manos, excepto cuando la área a tratar sea en las manos.

No se recomienda cubrir el área afectada con vendas de algodón, de plástico o impermeables, a menos que haya sido indicado por el médico, pues puede aumentar el riesgo de irritación de la piel.

Cuando la violeta de genciana es aplicada en la boca, se debe tener precaución de no ingerir la solución.

2. Violeta de genciana en el cabello

Para usar la violeta de genciana en el cabello rubio para matizarlo y eliminar el aspecto amarillento, se pueden adicionar 1 o 2 gotas de la solución de violeta de genciana en el champú o en la mascarilla de hidratación del cabello y mezclar bien. Aplicar la mezcla en el cabello húmedo y dejar actuar durante algunos minutos hasta obtener la tonalidad de rubio deseado, y luego enjuagar. Se debe tener cuidado de no dejarla por mucho tiempo, pues los pigmentos de la violeta de genciana pueden teñir el cabello de morado.

Es importante utilizar guantes para evitar manchas en la piel y tener precaución de que el champú o la mascarilla no entren en contacto con la piel de la cara.

Asimismo, otra opción es comprar los champús matizadores o champús morados, que contienen violeta de genciana y ya están listos para su uso.

Posibles efectos secundarios

Los efectos secundarios más comunes que pueden ocurrir durante el uso de la violeta de genciana son enrojecimiento, hinchazón o irritación de la piel. Además, el uso por mayor tiempo del recomendado puede causar manchas permanentes en la piel.

Se recomienda buscar ayuda médica inmediatamente o acudir al centro de emergencias más cercano si surgen síntomas de alergia a la violeta de genciana como formación de ampollas o descamación en la piel, comezón intensa, sensación de opresión en el pecho, dificultad para respirar, tragar o hablar, sensación de garganta cerrada e hinchazón en la boca, lengua o rostro. Vea cómo identificar los síntomas de reacción alérgica grave.

Contraindicaciones

La violeta de genciana no debe ser utilizada por mujeres embarazadas o en período de lactancia ni por personas que tengan úlceras en la piel, heridas abiertas o profundas, mordidas de animales o quemaduras graves, o que sean alérgicas a cualquier componente de la fórmula.

Asimismo, la violeta de genciana no debe ser empleada en la cara debido al riesgo de manchas permanentes. Este medicamento tampoco debe ser utilizado dentro de la nariz o los oídos, a menos que sea indicado por el médico.

La violeta de genciana tampoco debe ser empleada en los ojos, y en caso de que ocurra contacto accidental, se debe lavar inmediatamente con agua durante al menos 15 minutos y buscar atención médica si los ojos presentan irritación.