La disbiosis intestinal es un desequilibrio o alteración de la flora intestinal, compuesta por billones de microorganismos, como bacterias, hongos y virus, que habitan en el tracto digestivo.
Este desequilibrio puede producirse debido a factores como una mala alimentación, estrés, uso excesivo de antibióticos o enfermedades, y dar lugar a síntomas como hinchazón abdominal, náuseas, gases, diarrea o estreñimiento.
La disbiosis ocurre cuando disminuyen las bacterias beneficiosas del intestino y aumentan aquellas que pueden causar enfermedades. Aunque la disbiosis tiene tratamiento, es importante que este sea indicado por un gastroenterólogo y un nutricionista, ya que suele incluir cambios en la dieta, la ingesta de suplementos probióticos y cambios en el estilo de vida.
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Principales síntomas
Los principales síntomas de la disbiosis intestinal son:
- Náuseas o vómitos;
- Exceso de gases y eructos;
- Molestias o hinchazón en el abdomen;
- Diarrea o estreñimiento;
- Cansancio;
- Irritabilidad.
En la mayoría de los casos, la disbiosis intestinal es transitoria y los síntomas tienden a mejorar a medida que la flora intestinal se recupera de forma natural. Sin embargo, la persona puede desarrollar síntomas persistentes en algunos casos.
Lea también: Flora intestinal (microbiota): qué es, beneficios y medicamentos tuasaude.com/es/flora-intestinalAdemás, la disbiosis intestinal parece estar asociada a enfermedades como intolerancias alimentarias, síndrome del intestino irritable, diabetes y cáncer colorrectal. Sin embargo, no se sabe con certeza su participación en el desarrollo o la gravedad de estas enfermedades.
Causas de la disbiosis intestinal
Las posibles causas de la disbiosis intestinal son el tipo de dieta o el uso de medicamentos. Además de eso, otros factores como el consumo exagerado de bebidas alcohólicas y el estrés también pueden generar disbiosis.
1. Tipo de dieta
La dieta es la principal causa de disbiosis, ya que pequeños cambios, excesos o restricciones en la alimentación, pueden empeorar la calidad y cantidad de bacterias en el intestino.
La ingesta excesiva de proteínas de origen animal, como carnes, pescados o huevos, aumenta la producción de compuestos que son tóxicos para las bacterias beneficiosas del intestino, pudiendo ocasionar disbiosis.
Asimismo, las dietas ricas en grasas, especialmente las grasas saturadas, como las que están presentes en las carnes rojas, leches, quesos y helados, contribuyen para la disminución de las bacterias buenas y en el aumento de las bacterias patógenas, causando desequilibrios de la flora intestinal. Vea qué es la flora intestinal, para qué sirve y cómo restaurarla.
Algunos estudios muestran que una dieta rica en alimentos bajos o sin fibras, como azúcar refinada, harinas blancas y alimentos dulces, como galletas, tortas y otros alimentos industrializados, también favorecen el aumento de las bacterias patógenas en el intestino, pudiendo causar disbiosis.
2. Uso de medicamentos
El uso de algunos medicamentos sin el debido acompañamiento médico, también pueden causar alteraciones en el equilibrio de la flora intestinal, resultado una disbiosis. Algunos antiinflamatorios, como la aspirina y el ibuprofeno, cuando son utilizados como medicamentos que disminuyen la acidez natural del estómago, alteran el equilibrio de las bacterias del intestino, causando disbiosis.
Muchos antibióticos causan alteraciones en la flora intestinal, y cuando son tomados por mucho tiempo, pueden generar cambios más graves, generando el crecimiento de bacterias patógenas y resistentes a la acción de los medicamentos, perjudicando el tratamiento de enfermedades que necesitan de antibióticos, como las infecciones intestinales.
3. Otros factores
Además de los medicamentos y la dieta, otros factores como el consumo exagerado de bebidas alcohólicas, la edad, ansiedad, estrés, y algunas enfermedades intestinales ya existentes, como síndrome de intestino irritable, diverticulosis e inflamación intestinal, también favorecen el desequilibrio de la flora intestinal, y consecuentemente, causan la disbiosis.
Cómo se realiza el diagnóstico
El diagnóstico de disbiosis intestinal normalmente es realizado por un gastroenterólogo o nutriólogo, con base en los síntomas presentados, el historial de salud de la persona y los resultados de exámenes que ayudan a identificar alteraciones en la microbiota intestinal.
Algunos exámenes que el médico puede indicar para evaluar la salud de la microbiota intestinal incluyen:
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Test urinario: es un examen realizado en la orina para evaluar la cantidad de indican, una sustancia producida por el organismo en respuesta a la alimentación. En caso de desequilibrio de la flora intestinal, la eliminación de indican en la orina puede estar aumentada.
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Microbioma intestinal: se trata de un test genético realizado a partir de una muestra de heces para identificar las bacterias presentes en la flora intestinal.
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Prueba del hidrógeno espirado: consiste en identificar la presencia de gases producidos por las bacterias en el intestino mediante una muestra recolectada al pedir a la persona que respire en una bolsa de plástico. Esta muestra es analizada con un equipo especializado, y los tipos y cantidades de gases presentes pueden indicar alteraciones en la microbiota intestinal.
No obstante, es importante que el resultado de estos exámenes sea interpretado por un especialista, ya que, especialmente en personas que no presentan otros problemas de salud, la composición de la flora intestinal puede variar considerablemente sin que esto sea necesariamente un problema.
Tratamiento de la disbiosis intestinal
En la mayoría de los casos, el tratamiento de la disbiosis es realizado por medio de los cambios en los hábitos alimentarios, sin embargo, en algunos casos puede ser necesario el uso de suplementos probióticos, y dependiendo de la gravedad, inclusive la realización de un trasplante fecal.
1. Cambios de los hábitos alimentarios
Para tratar la disbiosis, además del acompañamiento médico, es importante recibir orientaciones de un nutricionista, porque el tratamiento es enfocado principalmente en recuperar la salud de la flora intestinal con una alimentación adecuada. De esta manera es recomendado:
- Priorizar los alimentos ricos en grasas insaturadas, como aceite de oliva, aguacate o almendra, pues promueven el aumento de bacterias benéficas del intestino, mejorando los síntomas de disbiosis;
- Tener una dieta rica en prebióticos, un tipo de fibra presenten en algunos alimentos como la avena, ajo, biomasa de banana verde, miel y yacón, pues son fundamentales para recuperar la flora intestinal, ya que son los nutrientes esenciales para las bacterias beneficiosas del intestino;
- Comer alimentos ricos en fibras, como frijoles, frutas con cáscara y vegetales frescos es fundamental, pues aumentan la variedad de las bacterias que son beneficiosas para el intestino, mejorando también la absorción y producción de vitaminas y minerales por el intestino;
- Consumir alimentos ricos en probióticos, que son bacterias buenas para el intestino, como yogur, kéfir o kombucha, promoviendo el equilibrio de la flora intestinal, mejorando la disbiosis.
Para el tratamiento de la disbiosis, además de los cambios de los hábitos alimentarios, la práctica regular de actividad física, también es muy importante.
Vea cuáles son los alimentos ricos en probióticos en el video siguiente:
Probióticos: alimentos vivos que van a mejorar tu vida
06:17 | 33.812 visualizações2. Uso de suplementos
El uso de suplementos probióticos que contienen la cantidad y los tipos adecuados de bacterias buenas para el intestino, como los lactobacillus y las bifidobacterias en la forma de cápsulas o líquidos, también pueden ser indicados para tratar la disbiosis. Estos suplementos equilibran la flora intestinal, ayudan a tratar los síntomas y a mejorar la producción y absorción de nutrientes por el intestino.
Para obtener los beneficios de los suplementos probióticos, es importante que la ingesta sea de manera diaria, en la cantidad y tipo de bacteria necesaria para cada síntoma o enfermedad causada por la disbiosis. Los estudios muestran que 108 a 109 Unidades Formadoras de Colonias (UFC) de probióticos, cuando son consumidos por 15 días, mejoran la flora intestinal.
Los suplementos probióticos pueden ser encontrados con facilidad en las farmacias o tiendas naturales. Sepa más sobre los probióticos, para qué sirven y cómo tomarlos.
3. Mejorar los cuidados de la salud
Para el tratamiento de la disbiosis intestinal, es fundamental que los problemas de salud que puedan perjudicar el equilibrio de la microbiota intestinal, como la diabetes, la enfermedad de Crohn o la colitis ulcerosa, sean tratados adecuadamente según la orientación del médico.
Además, adoptar hábitos saludables, como practicar actividad física regularmente y dejar de fumar, también contribuye a restaurar el equilibrio de la flora intestinal, al favorecer condiciones adecuadas en el organismo para el crecimiento de bacterias beneficiosas.
4. Trasplante fecal
El trasplante fecal, que es la transferencia de una flora intestinal de una persona saludable para otra con disbiosis, es utilizado para equilibrar las bacterias intestinales y mejorar los síntomas de disbiosis.
Este procedimiento solamente es indicado en los casos de infecciones intestinales muy recurrentes. Conozca más qué es el transplante fecal, para qué sirve y cómo se realiza.