La dishidrosis es una enfermedad de la piel que causa la formación de pequeñas ampollas llenas de líquido, las cuales generalmente aparecen en la palma de las manos, en la parte lateral de los dedos o en la planta de los pies. Estas ampollas de la dishidrosis causan comezón intensa, pudiendo durar hasta 3 semanas.
Se desconocen las causas de la dishidrosis; sin embargo, parece estar relacionada con alergias en la piel, exceso de humedad en las manos o en los pies y mayor estrés físico o emocional.
Siempre que se sospeche de dishidrosis, también conocida como eczema dishidrótico, es importante consultar a un dermatólogo para confirmar el diagnóstico e iniciar el tratamiento adecuado, que puede incluir el cuidado diario de la piel, el uso de medicamentos o la realización de algunos procedimientos, como la fototerapia o el bótox.
Principales síntomas
Los síntomas de las dishidrosis son:
- Surgimiento de ampollas llenas de un líquido incoloro;
- Comezón en las manos, los pies o la parte lateral de los dedos;
- Descamación de la piel;
- Dolor en las ampollas o a su alrededor;
- Humedad excesiva en torno al área afectada;
- Piel seca o agrietada después de que desaparecen las ampollas.
Generalmente, las ampollas se secan y se descaman alrededor de 3 semanas después de su aparecimiento.
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El diagnóstico de dishidrosis es realizado por el dermatólogo a través de una evaluación física de la piel, valorando la gravedad de síntomas como enrojecimiento, descamación o picor, además del número de ampollas y la extensión de la zona afectada.
Por lo general, no es necesario realizar exámenes de laboratorio para el diagnóstico de esta enfermedad; sin embargo, el médico puede solicitar algunos para excluir otros problemas de salud, pudiendo indicar un test de alergia a determinadas sustancias o un raspado de la piel afectada para verificar si hay o no la presencia de hongos. Vea cómo se realiza un test de alergia.
Posibles causas
La causa exacta de la dishidrosis no es conocida; no obstante, es más frecuente durante el verano.
Algunos factores que pueden contribuir en su aparición incluyen:
- Antecedentes familiares de eccema dishidrótico;
- Aumento de estrés emocional o físico;
- Alergias, como fiebre del heno;
- Dermatitis atópica o dermatitis de contacto;
- Lavarse las manos con frecuencia;
- Ejercer actividad profesional que necesite contacto frecuente con agua o productos que puedan causar irritación en la piel;
- Exposición o alergia de contacto con metales como cobalto, cromo o níquel;
- Uso de inmunoglobulina intravenosa.
Además, algunos estudios informan que la sudoración excesiva y constante de las manos o los pies, llamada hiperhidrosis, también puede aumentar el riesgo de desarrollar dishidrosis.[1]
¿La dishidrosis es contagiosa?
La dishidrosis, también conocida como eczema dishidrótico, no es una enfermedad contagiosa, por lo que no existe peligro de transmisión, incluso entrando en contacto directo con la piel de otra persona.
Tipos de dishidrosis
Los principales tipos de dishidrosis son:
1. Dishidrosis en la mano
La dishidrosis en la mano es el tipo más común y se caracteriza por el surgimiento de ampollas en la palma de las manos o en la parte lateral de los dedos,
2. Dishidrosis en el pie
La dishidrosis en el pie afecta principalmente la planta de los pies, pero también puede surgir en la parte lateral de los dedos, causando comezón intensa y pequeñas ampollas.
Lea también: Ampollas en los pies: por qué salen y cómo curarlas tuasaude.com/es/ampollas-en-los-pies3. Dishidrosis emocional
La dishidrosis emocional puede afectar las manos y/o los pies y es desencadenada o puede empeorar por factores emocionales, como estrés o crisis de ansiedad, por ejemplo.
Lea también: Ataque de ansiedad: qué es, síntomas y cómo calmar tuasaude.com/es/crisis-de-ansiedadCómo es realizado el tratamiento
Los principales tratamientos para la dishidrosis indicados por el dermatólogo incluyen:
1. Cuidados de la piel
Los cuidados con la piel ayudan a prevenir la formación ampollas o evitar que empeoren o se infecten, e incluyen:
- Aplicar compresas frías, de 2 a 4 veces por día, durante 15 minutos como máximo en cada aplicación, o meter las manos y/o los pies en agua fría para reducir el malestar o la comezón;
- Usar agua tibia al lavarse las manos;
- Aplicar cremas hidratantes indicadas por el médico para promover la restauración de la barrera protectora de la piel. Estas cremas deben ser utilizadas con frecuencia y todos los días para mejorar la sequedad de la piel;
- Evitar el contacto con sustancias que pueden causar alergia o irritación en la piel.
En los casos donde el cuidado de la piel no es suficiente para mejorar los síntomas, el médico puede recomendar el uso de medicamentos.
2. Uso de medicamentos
El tratamiento farmacológico está indicado por el médico cuando el cuidado de la piel no es suficiente para mejorar los síntomas, o en los casos más severos de dishidrosis, e incluye:
- Antialérgicos en forma de comprimidos, como difenhidramina o loratadina, para ayudar a aliviar la comezón y el enrojecimiento de la piel afectada;
- Cremas con corticosteroides, como mometasona o betametasona, para ayudar a reducir la inflamación y a secar las ampollas;
- Cremas inmunosupresoras, como o tacrolimus o pimecrolimus, prescrito por el médico cuando las cremas con corticosteroides no han sido efectivas para reducir los síntomas o para las personas alérgicas a los corticosteroides;
- Corticosteroides en forma de comprimidos, como la prednisona, por ejemplo, indicados cuando el uso de cremas con corticosteroides o inmunosupresoras no fueron eficaces.
Durante el tratamiento, también se recomienda colocar compresas o realizar baños con permanganato de potasio o agua boricada al 2 %, dos o tres veces al día, hasta que mejoren las lesiones. Conozca qué es el agua boricada y para qué sirve.
Además, para la dishidrosis severa que no responde a tratamientos previos, el médico puede recomendar otros medicamentos como azatioprina, metotrexato, micofenolato mofetilo, ciclosporina o etanercept.
3. Fototerapia
La fototerapia es un tipo de tratamiento realizado en el hospital por el médico, que utiliza luz ultravioleta sobre la piel afectada por dishidrosis, indicado en los casos en los que otros tratamientos no han sido efectivos para controlar los síntomas.
La luz ultravioleta se puede utilizar junto con un remedio oral o tópico, el psoraleno, denominándose este tratamiento PUVA, que consiste en tomar o aplicar psoraleno en forma de pomada sobre la piel, y 2 horas después exponer la zona a tratar con radiación ultravioleta.
4. Bótox
En los casos más graves, el médico puede recomendar la realización de inyecciones de toxina botulínica, también conocida como bótox, para disminuir el funcionamiento de las glándulas sudoríparas, reduciendo la sudoración excesiva, que es una de las causas de la dishidrosis.
5. Opción de tratamiento natural
Un buen tratamiento casero para ayudar a calmar los síntomas de la dishidrosis consiste en utilizar compresas de caléndula para complementar el tratamiento médico. La caléndula es una planta medicinal que contiene propiedades cicatrizantes y calmantes que ayudan a aliviar la comezón intensa y a secar las ampollas. Vea todos los beneficios de la caléndula.
Ingredientes:
- 2 cucharadas de flores de caléndula;
- 200 ml de agua hirviendo.
Modo de preparación:
Colocar las flores de caléndula en una olla con agua hirviendo, tapar y dejar reposar durante 10 minutos. Después, colar y mojar compresas limpias en la mezcla, aplicándolas sobre la piel afectada durante 5 a 10 minutos.
¿La dishidrosis tiene cura?
La dishidrosis no tiene cura; sin embargo, los síntomas, así como los nuevos episodios de dishidrosis, pueden ser controlados con el tratamiento indicado por el médico.