El dolor en el brazo derecho puede surgir por diversas causas, siendo las más comunes un golpe o la presencia de alguna lesión en las estructuras del brazo, como puede ocurrir al tener una mala postura, realizar esfuerzos repetitivos o al dormirse encima del brazo, por ejemplo.
El dolor en el brazo puede surgir en cualquier región, desde el hombro hasta el puño, generalmente ocurre porque se ven afectados los músculos, tendones, nervios, articulaciones, vasos sanguíneos o la piel. En los casos más raros podrá indicar un problema más grave como una enfermedad neurológica o inclusive un infarto.
Por lo que para identificar la causa exacta del dolor es necesario acudir al médico, el cual hará una evaluación de los síntomas, un examen físico del miembro afectado y si es necesario, podrá solicitar exámenes que ayuden a determinar la causa e indicar el tratamiento más adecuado.
14 causas de dolor en el brazo derecho
Las principales causas de dolor en el brazo derecho incluyen:
1. Realización de esfuerzo
La realización de esfuerzos intensos con el brazo es común en personas que van al gimnasio o practican algún deporte, lo que puede provocar pequeñas lesiones en los músculos del brazo o en las articulaciones del hombro, el codo o la muñeca, causando dolor que, por lo general, mejora tras algunos días de reposo.
Cuando el esfuerzo es repetitivo, especialmente en personas cuyo trabajo implica movimientos constantes del brazo, como profesores que escriben en la pizarra, músicos, atletas u operarios de maquinaria, puede producirse una lesión osteomuscular relacionada con el trabajo, conocida como lesión por esfuerzo repetitivo (LER).
Qué hacer: para prevenir este tipo de lesión, es necesario obtener orientaciones del médico y del fisioterapeuta sobre la postura correcta que se debe asumir durante la realización de los movimientos, para evitar el desgaste de las estructuras del brazo.
En momentos donde exista dolor agudo, el médico podrá indicar el uso de antiinflamatorios y reposo. Conozca recetas de antiinflamatorios naturales para ayudar a combatir el dolor.
2. Tendinitis
La tendinitis es una inflamación del tendón, un tejido que conecta el músculo al hueso, generando síntomas como dolor localizado y falta de fuerza muscular.
Esta inflamación suele surgir con mayor facilidad en personas que realizan esfuerzos repetitivos (con el hombro o el brazo) o en deportistas.
Qué hacer: para tratar la tendinitis se aconseja evitar realizar esfuerzos con el miembro afectado, tomar los analgésicos o antiinflamatorios indicados por el médico y acudir a las sesiones de fisioterapia. Conozca más sobre el tratamiento y cómo curar la tendinitis más rápido.
3. Síndrome del túnel carpiano
El síndrome del túnel carpiano ocurre debido a la compresión del nervio mediano, que se extiende desde el brazo hasta la mano. Es más común en profesionales que realizan trabajos que requieren el uso frecuente de las manos y las muñecas, como peluqueros, programadores, pintores, entre otros.
Este síndrome se caracteriza por la aparición de hormigueo y sensación de pinchazos, principalmente en el pulgar, el dedo índice o el dedo medio. Estos síntomas aparecen de forma gradual y, en algunos casos, pueden llegar a incapacitar a la persona.
Qué hacer: el tratamiento es indicado por el traumatólogo o reumatólogo e incluye el uso de antiinflamatorios, sesiones de fisioterapia y mantener el miembro afecto en reposo.
Vea en el vídeo a continuación algunos consejos de nuestra fisioterapeuta para aliviar el dolor en este caso:
SÍNDROME DEL TUNEL CARPIANO: Cómo aliviar el dolor
05:09 | 255.364 visualizações4. Mala circulación
Las alteraciones en la circulación sanguínea del brazo, causadas por una obstrucción en los vasos sanguíneos o una trombosis en las venas o arterias, pueden provocar sensación de pesadez, dolor, hormigueo e inflamación en el miembro afectado.
Se debe sospechar de mala circulación cuando las extremidades de las manos están muy pálidas o moradas, o cuando hay inflamación o sensación de hormigueo en el brazo o las manos.
Qué hacer: es necesario consultar un médico general o angiólogo, que realizarán una evaluación detallada y solicitarán exámenes como una ecografía con Doppler del brazo.
El tratamiento dependerá de la causa, y puede involucrar la realización de ejercicio, aumentar el consumo de líquidos o el uso de medicamentos para facilitar la circulación sanguínea en los casos más graves. Vea un tratamiento natural para la mala circulación.
5. Infarto
El infarto agudo de miocardio o una angina pueden provocar dolor en el pecho que se irradia hacia el brazo, siendo más frecuente hacia el brazo izquierdo. Sin embargo, también es posible que se irradie hacia el brazo derecho.
Este síntoma de infarto es menos común, pero puede presentarse principalmente en personas mayores, diabéticas o mujeres, quienes suelen mostrar con mayor frecuencia síntomas atípicos.
El dolor en el brazo asociado a un infarto generalmente se acompaña de una sensación de ardor en el pecho, además de dolor torácico, dificultad para respirar, náuseas o sudoración.
Lea también: Ardor en el pecho: 10 causas (y qué hacer) tuasaude.com/es/ardor-en-el-pechoQué hacer: en caso se sospeche de un infarto se debe acudir a la emergencia hospitalaria para que el médico evalúe los síntomas y solicite exámenes para confirmar si es o no un infarto. Identifique los principales síntomas de infarto.
6. Neuropatía diabética
La neuropatía diabética es una afección que se desarrolla debido a una exposición prolongada a niveles elevados de azúcar en la sangre, lo que puede causar daños progresivos en los nervios del cuerpo. Esto puede afectar los brazos, las manos o los pies, provocando síntomas como dolor agudo, sensación de ardor, hormigueo o adormecimiento.
Generalmente, la neuropatía diabética es más frecuente en personas que no siguen un tratamiento adecuado para controlar los niveles de azúcar en la sangre.
Lea también: Diabetes: tipos, síntomas y tratamiento tuasaude.com/es/diabetesQué hacer: el tratamiento lo debe realizar el endocrinólogo, que puede indicar el uso de medicamentos antidiabéticos, como insulina, para normalizar los niveles de azúcar en la sangre.
Además, para aliviar el dolor, el médico puede recetar medicamentos anticonvulsivos, antidepresivos u opioides, como pregabalina, amitriptilina o tramadol, por ejemplo. Conozca más sobre el tratamiento de la neuropatía diabética.
7. Bursitis
La bursitis es la inflamación de la bursa, una pequeña bolsa llena de líquido que actúa como amortiguador entre los huesos, tendones y músculos, evitando el roce entre estas estructuras y reduciendo el riesgo de daño por fricción constante.
Cuando afecta el hombro derecho, puede causar dolor en el brazo, dificultad para levantarlo por encima de la cabeza, debilidad muscular o sensación de hormigueo que se irradia a lo largo del brazo.
Qué hacer: el tratamiento de la bursitis debe ser realizado por el médico ortopedista el cual puede indicar reposo, la aplicación de compresas frías, antiinflamatorios o analgésicos como ibuprofeno o paracetamol, o corticoides inyectados en la articulación.
Además, el médico puede recomendar la realización de fisioterapia que ayuda a reducir la inflamación y mejorar el movimiento del brazo. En algunos casos, el médico puede indicar cirugía para drenar el líquido o remover la bursa inflamada.
8. Hernia discal cervical
La hernia discal cervical ocurre cuando el disco intervertebral, ubicado entre las vértebras del cuello, se desplaza de su posición original o se rompe, lo que puede comprimir los nervios de la zona y provocar dolor en el cuello que se irradia hacia los brazos, las manos o los dedos. Además, puede causar hormigueo, adormecimiento o disminución de la fuerza muscular.
Qué hacer: el tratamiento de la hernia discal cervical debe ser indicado por un ortopedista, quien puede recomendar fisioterapia y el uso de analgésicos o antiinflamatorios, como paracetamol o ibuprofeno, para aliviar el dolor y reducir la inflamación.
En los casos más graves, el médico puede considerar la opción de realizar una cirugía.
9. Artritis reumatoide
La artritis reumatoide es una enfermedad inflamatoria crónica autoinmune en la que el sistema inmunológico produce anticuerpos que atacan las células sanas del cuerpo, provocando inflamación en las articulaciones.
Esta puede afectar el codo o la muñeca, causando dolor crónico en el brazo, hinchazón, dificultad para sostener objetos o caminar e, incluso, deformidad en la articulación.
Lea también: Artritis reumatoide: qué es, síntomas y causas tuasaude.com/es/artritis-reumatoideQué hacer: el tratamiento de la artritis reumatoide debe ser orientado por el reumatólogo e incluye medicamentos antiinflamatorios y fisioterapia, por ejemplo, para aliviar el dolor y la inflamación de las articulaciones y mejorar la calidad de vida. Vea las opciones de tratamiento para la artritis reumatoide.
10. Lesión del plexo braquial
El plexo braquial es un conjunto de nervios que transmite señales desde la médula espinal hacia los hombros, brazos y manos.
Cuando estos nervios sufren una lesión, ya sea por compresión, estiramiento o un traumatismo, como en accidentes de coche o moto, puede causar dolor o una sensación similar a una corriente eléctrica en el brazo, además de hormigueo, adormecimiento, debilidad, parálisis o pérdida de control de los movimientos.
Qué hacer: el tratamiento de la lesión del plexo braquial debe ser realizado por un neurólogo de acuerdo al tipo de gravedad de la lesión, pudiendo indicarse el uso de analgésicos para ayudar a aliviar el dolor, fisioterapia o cirugía para reparar los nervios.
11. Fractura
Una fractura es una lesión en la que un hueso se rompe o quiebra, y generalmente ocurre debido a traumatismos como caídas, golpes o accidentes.
Sin embargo, también puede ocurrir debido a afecciones como osteoporosis o tumores óseos. Puede provocar dolor intenso en el brazo, inflamación, incapacidad total o parcial para moverlo e, incluso, deformidad.
Qué hacer: en caso de sospecha de fractura en el brazo, se debe buscar atención médica para realizar exámenes de imagen, como una radiografía, que permitan confirmar el diagnóstico e indicar el tratamiento adecuado. Este puede incluir el reposicionamiento del hueso, la inmovilización de la extremidad y, en algunos casos, cirugía.
12. Fibromialgia
La fibromialgia es una enfermedad reumática que causa dolor generalizado en el cuerpo, aunque su causa exacta es desconocida. Uno de los puntos dolorosos típicos se encuentra en el brazo, cerca del pliegue del codo.
El dolor en el brazo derecho, asociado a la fibromialgia, puede ser intenso, ardiente y persistente. Este dolor puede empeorar progresivamente o aparecer de forma repentina. Además, suele ir acompañado de dificultad para dormir y síntomas de depresión.
Qué hacer: si sospecha que puede tener fibromialgia, es recomendable consultar a un médico reumatólogo, quien realizará una evaluación detallada de los puntos dolorosos para proporcionar un diagnóstico adecuado.
El reumatólogo podría prescribir medicamentos como antidepresivos tricíclicos o inhibidores de la recaptación de serotonina y noradrenalina. Además, puede recomendar ejercicios, fisioterapia y terapia conductual como parte del tratamiento.
13. Dolor miofascial
El dolor miofascial es un cuadro doloroso causado por puntos gatillo miofasciales, que pueden aparecer debido a sobrecarga física, falta de ejercicio, estrés e incluso por hábitos posturales inadecuados. Estos puntos gatillo pueden generar dolor irradiado hacia otras partes del cuerpo.
Lea también: Dolor miofascial: qué es, síntomas y tratamiento tuasaude.com/es/dolor-miofascialSi se presenta un punto gatillo en áreas como la escápula, cuello anterior, hombro o brazo, es posible experimentar un dolor constante o intermitente en el brazo derecho, que se intensifica con la presión sobre los puntos gatillo.
Qué hacer: se debe acudir a un ortopedista o fisioterapeuta para que realice una evaluación. En algunos casos, el dolor puede mejorar rápidamente con el uso de analgésicos y antiinflamatorios, como paracetamol y diclofenaco, en otros casos, puede ser necesario realizar fisioterapia, cambio de hábitos o incluso infiltraciones.
14. Lesión de SLAP
La lesión SLAP es una condición que afecta al cartílago del hombro. Esta lesión puede ocurrir debido a exceso de ejercicio, movimientos repetitivos, caídas, enfermedades degenerativas o levantamiento de pesos superiores a lo que el cuerpo está preparado para soportar, lo que provoca un desgaste del cartílago.
Esta condición puede causar dolor en el brazo derecho al levantarlo por encima de la cabeza o al rotarlo hacia adentro o hacia afuera. El dolor generalmente se localiza en el hombro y en la parte superior del brazo y puede ir acompañado de crepitaciones articulares y una sensación de inestabilidad.
Qué hacer: se debe acudir a un ortopedista, quien después de una evaluación podrá indicar el uso de medicamentos antiinflamatorios como el diclofenaco, reposo, y fisioterapia. En los casos en que no haya mejoría con este tratamiento, podría ser necesario realizar una cirugía.