Dolor de cuello: 9 causas y qué hacer

El dolor de cuello en el lado izquierdo o derecho es un problema común que suele estar relacionado con la tensión muscular provocada por situaciones, como exceso de estrés, dormir en una posición incómoda o utilizar una computadora por mucho tiempo, por ejemplo.​

Sin embargo, el dolor en el cuello también puede ser causado por tras situaciones más graves como enfermedades de la columna, hernia discal o infecciones como amigdalitis, osteomielitis o meningitis. 

Por ello, cuando el dolor en el cuello dura más de 1 semana o no mejora con la aplicación de compresas tibias y la toma de analgésicos, como el paracetamol, se recomienda consultar a un ortopedista para que realice una evaluación e inicie el tratamiento adecuado. 

9 causas de dolor de cuello

Las principales causas de dolor de cuello son:

1. Tensión muscular

Tener una postura incorrecta durante largos períodos de tiempo como ocurre cuando se está leyendo o cuando se está en la computadora o al dormir en una posición incorrecta, puede provocar tensiones musculares. Además de esto, la tensión muscular también puede ser provocada por el bruxismo, que consiste en apretar los dientes durante el sueño, provocando una sensación de peso desde el cuello hasta el oído. Vea qué es el bruxismo y otros síntomas que pueden surgir.

Qué hacer: puede ser aliviada con la colocación de compresas calientes sobre la región con medicamentos analgésicos y antiinflamatorios, adoptando posturas del cuerpo más adecuadas, a través de ejercicios para fortalecer los músculos del cuello y el descanso. En los casos donde se presenta bruxismo, puede ser tratado con el uso de una férula que minimiza los daños y es recomendada por el odontólogo. 

2. Tortícolis 

Normalmente la tortícolis ocurre durante la noche haciendo con que la persona se despierte con dificultad para mover el cuello, pero también puede suceder al girar el cuello para mirar hacia un lado de forma muy rápida, lo que puede provocar un espasmo muscular. En la tortícolis es fácil identificar el lugar exacto del dolor y sólo se ve afectado un lado del cuello. Conozca qué es y cómo curar la tortícolis.

Qué hacer: debe colocarse una compresa caliente dejándola actuar de 15 a 20 minutos para que ayude a aliviar el dolor, pero hay otras técnicas que eliminan la tortícolis en pocos minutos, vea el video a continuación algunas de ellas:

3. Artrosis

La artrosis en la columna, también conocida por osteoartritis de la columna o espondiloartrosis, consiste en el desgaste del cartílago de las articulaciones de la columna, causando síntomas como dolor y dificultad para mover la espalda. 

Qué hacer: la artritis no tiene cura, pero el médico puede indicar el uso de algunos medicamentos, que incluyen el uso de analgésicos, como el paracetamol; opioides como el tramadol o antiinflamatorios, como el ketoprofeno o Ibuprofeno en comprimidos o pomadas. También se puede indicar la ingesta de suplementos alimentarios, como el sulfato de glucosamina con condroitina, que ayudan a regenerar los cartílagos. Conozca más sobre cómo tratar la artrosis.

4. Hernia de disco cervical

La hernia de disco cervical consiste en el desplazamiento de parte del disco intervertebral que es la región entre las dos vértebras, causada en la mayoría de las veces por el desgaste de la columna y mala postura. 

Uno de los principales síntomas de la hernia de disco cervical es el dolor en el cuello, que puede extenderse hacia los hombros, brazos y manos, y provocar sensación de hormigueo y de adormecimiento. Además de esto, en casos más graves también puede surgir disminución de la fuerza muscular y dificultad para mover el cuello. Vea qué es la hernia cervical y cómo es el tratamiento.

Qué hacer: los síntomas pueden ser aliviados con la colocación de compresas calientes sobre la región adolorida haciendo masajes de relajamiento de los músculos del cuello. El tratamiento puede ser hecho con medicamentos analgésicos para aliviar los dolores, como el paracetamol, y con relajantes musculares como la ciclobenzaprina. También es importante corregir la postura para intentar reducir la compresión de las raíces de los nervios y hacer estiramientos para mejorar los movimientos del cuello. 

5. Después de un accidente

Golpes en el cuello también pueden ocurrir cuando los tejidos más suaves del cuello se estiran hacia atrás y luego hacia adelante, como ocurre por ejemplo en un accidente. 

Qué hacer: el médico puede prescribir analgésicos fuertes así como relajantes musculares para aliviar el dolor, pero también puede ser necesario recurrir a la fisioterapia e inmovilizar el cuello con un collarín. 

6. Meningitis

La meningitis es una inflamación grave de las meninges que son las membranas que revisten el cerebro y la médula espinal. Generalmente este enfermedad es provocada por virus o bacterias, pudiendo surgir después de una gripe mal curada, por ejemplo, pero que en algunos casos también puede ser causada por golpes fuertes u hongos, especialmente cuando el sistema inmune está débil. Uno de los síntomas más comunes en la meningitis es la rigidez del cuello con intenso dolor y dificultad para la barbilla en el pecho. Vea qué es y cómo es el tratamiento de la meningitis.

Qué hacer: el tratamiento de la meningitis depende de su causa, pudiendo ser tratada con la ingestión de antibióticos, antivirales o corticosteroides en el hospital. 

Vea mejor qué es y cómo se realiza el tratamiento de la meningitis en el siguiente video:

7. Artritis reumatoide

La artritis reumatoide es una enfermedad autoinmune que provoca síntomas como dolor en las articulaciones y que no tienen cura. Sin embargo, cuando los tratamientos son hechos correctamente, puede ayudar a mejorar la calidad de vida, disminuyendo los síntomas y evitando que la enfermedad se agrave. 

Qué hacer: se puede optar por realizar un tratamiento natural con el uso de plantas como cola de caballo o berenjena con limón o con medicamentos antiinflamatorios, como el ibuprofeno o celecoxib; con corticosterioides como la prednisolona o inmunosupresores, como metotrexato o leflunomida, por ejemplo. El tratamiento con fisioterapia es una excelente forma de disminuir el dolor, la inflamación y mejorar la calidad de los movimientos en la articulación afectada. Vea cómo se realiza el tratamiento de la artritis reumatoide.

8. Cáncer

El surgimiento de un nódulo en el cuello en casos más graves, puede indicar la presencia de cáncer y en estos casos el nódulo está acompañado de otros síntomas como dolor en el cuello, ronquera, dificultad para tragar, sensación de tener una bola en la garganta, atragantamiento frecuente, pérdida de peso y malestar general. 

Qué hacer: en la presencia de estos síntomas se debe ir al médico lo más pronto posible, para que este pueda confirmar el diagnóstico, a través de exámenes como ultrasonido e indicar el mejor tratamiento. Conozca qué puede ser un nódulo en el cuello. 

9. Aneurisma cerebral

Un aneurisma cerebral es una dilatación en un punto de debilidad en un vaso sanguíneo cerebral y, por lo general, no causa síntomas, pero cuando se rompe provoca una hemorragia cerebral y síntomas como dolor de cabeza intenso (que comienza repentinamente), náuseas, vómitos, somnolencia o confusión mental.

Además, el aneurisma cerebral también puede causar rigidez o dolor en el cuello, e incluso dolor lumbar al flexionarlo. Vea otros síntomas de aneurisma cerebral.

Qué hacer: debe acudir de inmediato al servicio de urgencias más cercano, de manera que indiquen la realización de exámenes de diagnóstico que permitan identificar la ruptura de la aneurisma, ya que es un padecimiento grave que puede poner la vida en riesgo.

Cuándo ir al médico

Se debe consultar a un ortopedista o médico general siempre que el dolor de cuello se acompañe de otros síntomas, como:

• Fiebre;
• Dolor de cabeza;
• Rigidez o bulto en el cuello;
• Hormigueo o entumecimiento en los brazos, las manos o en un lado del cuerpo;
• Debilidad en las piernas o brazos;
• Dificultad para tragar.

Además, se debe buscar atención médica inmediata en caso de dolor de cuello después de un accidente o golpe o cuando la persona tenga náuseas, vómitos, somnolencia, cansancio, debilidad, confusión mental o pérdida del conocimiento.