La fisioterapia después de un ACV mejora la calidad de vida y recupera los movimientos perdidos. El objetivo principal, es devolver la capacidad motora y preparar al paciente para realizar sus actividades diarias solo, sin necesidad de la ayuda de un cuidador
Las sesiones de fisioterapia deben comenzar lo antes posible, aún en el hospital y deben realizarse preferiblemente todos los días, ya que cuanto más rápido el paciente es estimulado más rápido es su recuperación.
Ejercicios para ACV
Algunos ejemplos de ejercicios de fisioterapia, que se pueden realizar después de un ACV para recuperar la fuerza y movilidad en los brazos y piernas, incluyen:
- Abrir y cerrar los brazos delante del cuerpo, que puede variar en: abrir solo un brazo a la vez y luego ambos al mismo tiempo;
- Caminar en línea recta y luego alternar entre puntas de los pies y talones;
- Utilizar la bicicleta elíptica por 15 minutos, luego se puede variar la resistencia y la distancia alcanzada;
- Caminar en la cinta de correr, durante unos 10 minutos con ayuda del terapeuta.
Estos ejercicios se pueden realizar de forma continua, durante más de 1 minuto cada uno. Además de estos ejercicios, es importante realizar estiramientos musculares, en todos los músculos para mejorar la amplitud de los movimientos, asimismo, realizar ejercicios respiratorios, para evitar la acumulación de secreciones que pueden llevar a una neumonía, por ejemplo.
También se pueden realizar ejercicios con pelotas, resistencias, espejos, pesas, camas elásticas, rampas, bandas elásticas y todo lo necesario para mejorar la capacidad física y mental del paciente. Sin embargo, también se puede recurrir al uso de TENS, ultrasonido y bolsas de agua caliente o hielo, según sea necesario.
Resultados de la fisioterapia después de un ACV
La fisioterapia puede lograr muchos beneficios, como:
- Mejorar el aspecto del rostro, haciéndolo más simétrico;
- Incrementar la movilidad de los brazos y las piernas;
- Ayudar a caminar, y
- Hacer al paciente más independiente en sus actividades diarias, como peinarse, cocinar o vestirse, por ejemplo.
La fisioterapia debe realizarse diariamente, al menos 3 veces por semana. A pesar del trabajo intenso de la fisioterapia, algunos pacientes pueden no mostrar grandes mejorías, ya que los ejercicios deben realizarse bien y esto va depender de la voluntad del paciente.
Como una de las secuelas del ACV es la depresión, estos pacientes pueden tener mayor dificultad en acudir a las sesiones por sentirse desanimados, realizando los ejercicios de manera incorrecta y dificultando su recuperación.
Por esto, es necesario que un paciente que haya sufrido un ACV, sea acompañado por un equipo multidisciplinario compuesto por médico, enfermero, fisioterapeuta, fonoaudiólogo y psicólogo.
Cuánto tiempo realizarlos
La fisioterapia puede iniciarse inmediatamente después del ACV, estimulando a la persona a permanecer fuera de la cama hospitalaria, siendo recomendado de 3 a 6 meses de tratamiento de fisioterapia neurológica individual. Las sesiones tienen una duración aproximada de 1 hora con ejercicios realizados con ayuda del terapeuta, o solo, según la capacidad que la persona posea. Además de los ejercicios realizados en el consultorio, puede ser necesario realizar ejercicios y estiramientos en casa para la estimulación muscular diaria. Colocar al paciente para jugar videojuegos que ejercitan todo el cuerpo, como Wii y la X-box, por ejemplo, para mantener el estímulo muscular.
Es importante que el tratamiento fisioterapéutico se lleve a cabo de forma continua y que el paciente tenga mucha estimulación, para evitar que las contracturas musculares aumenten y el rango de movimiento se haga cada vez menor, dejando al paciente postrado en la cama y totalmente dependiente del cuidado de otros.