Encopresis: qué es, causas, síntomas y tratamiento

La encopresis es la eliminación involuntaria de las heces en la ropa interior del niño, lo que generalmente ocurre sin que el niño se dé cuenta, especialmente después de los 4 años de edad.

Este escape de heces generalmente ocurre debido al estreñimiento, pero también puede presentarse en niños que tienen miedo de usar el inodoro o que retienen las heces para no tener que evacuar fuera de casa, por ejemplo.

En caso de sospecha de encopresis, es importante consultar al pediatra o a un gastroenterólogo pediátrico. El tratamiento depende de la causa y puede incluir cambios en la alimentación, seguimiento psicológico, uso de laxantes y, en algunos casos, cirugía.

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Síntomas de encopresis

Los principales síntomas de la encopresis son:

  • Salida espontánea de heces en la ropa interior;
  • Heces más endurecidas;
  • Disminución de la sensibilidad en la región anal.

Debido a estas alteraciones, también es común que los niños con encopresis presenten enuresis, que es la incontinencia urinaria durante la noche. 

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Cómo confirmar el diagnóstico

El diagnóstico de encopresis lo realiza el pediatra teniendo en cuenta los síntomas y la edad del niño, y generalmente se sospecha solo después de los 4 años, porque antes de esta edad es común que haya dificultades para controlar la evacuación.

Además, a veces el pediatra también puede indicar exámenes como la dosificación de hormonas tiroideas en la sangre y/o la resonancia magnética, especialmente cuando se sospecha que la encopresis podría estar causada por enfermedades como el hipotiroidismo o alteraciones en la médula espinal.

Causas posibles

Las principales causas de encopresis son:

  • Estreñimiento;
  • Incomodidad al evacuar;
  • Miedo o vergüenza de usar el inodoro;
  • Dificultad para llegar o acceder al baño;
  • No poder usar el baño fuera de casa;
  • No ir al baño cuando se tiene ganas de evacuar;
  • Ansiedad durante el aprendizaje del uso del baño;
  • Enfermedades como hipotiroidismo, enfermedad celíaca o fisura anal.

Además, la encopresis puede ser consecuencia del uso de algunos medicamentos, como antidepresivos u opioides.

Cómo se realiza el tratamiento

El tratamiento de la encopresis depende de su causa y, especialmente en caso de estreñimiento, es importante ayudar al niño a desarrollar el hábito de usar el inodoro regularmente, además de mejorar la alimentación, aumentando la ingesta de frutas, verduras y líquidos.

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Además, el pediatra o gastroenterólogo pediátrico puede indicar el uso de laxantes en jarabe, comprimidos o supositorios, como lactulosa o polietilenglicol, para evitar el desarrollo de encopresis.

Si la encopresis es provocada por una enfermedad que afecta el tracto digestivo del niño, podría ser necesario realizar un tratamiento específico de la enfermedad y, en casos más raros, realizar cirugía para permitir la evacuación normal.

Seguimiento psicológico

La psicoterapia también puede ser recomendada en el tratamiento de la encopresis, especialmente cuando se identifica que el niño tiene obstáculos psicológicos, como ansiedad o miedo, que le impiden estar cómodo usando el inodoro.