Qué es:

La enfermedad de Kawasaki, es una condición rara caracterizada por la inflamación de las paredes de los vasos sanguíneos, que causa el surgimiento de erupciones cutáneas, fiebre, inflamación de los ganglios y en algunos niños inflamación cardiaca y articular.

Esta enfermedad no es contagiosa y ocurre con más frecuencia en niños menores de 5 años, principalmente varones. El síndrome de Kawasaki, normalmente es causada por alteraciones en el sistema inmunológico, que hace con que las células del sistema inmune ataquen los vasos sanguíneos y originen su inflamación. Además de la causa autoinmune, esta enfermedad puede ser originada por virus o factores genéticos.

El síndrome de Kawasaki tiene cura, siempre que se identifique y se trate rápidamente, el tratamiento es orientado por el médico, el cual suele indicar la ingesta de aspirina para aliviar la inflamación y la administración intravenosa de gammaglobulinas, debido a la respuesta autoinmune.

Principales síntomas

Los síntomas de la enfermedad de Kawasaki son progresivos, caracterizándose tres etapas de la enfermedad. Sin embargo, no todos los niños presentan todos los síntomas. La primera fase de la enfermedad se caracteriza por los siguientes síntomas:

Fiebre alta, generalmente por encima de los 39 ºC, durante por lo menos 5 días;
Irritabilidad;
Ojos rojos;
Labios rojos y agrietados;
Lengua hinchada y roja como la fresa;
Garganta roja;
Ganglios linfáticos inflamados y engrosados en el cuello;
Palma de las manos y planta de los pies rojas;
Aparición de manchas rojas en la piel del tronco y en la cadera.

En la segunda fase de la enfermedad, comienza haber descamación de la piel de los dedos de las manos y pies, dolores en las articulaciones, diarrea, dolor de abdomen y vómitos, que pueden durar cerca de 2 semanas. En la tercera y última fase de la enfermedad, los síntomas comienzan a retroceder lentamente hasta desaparecer.

Cuál es la relación con COVID-19

Hasta el momento, la enfermedad de Kawasaki no se considera una complicación del COVID-19. Sin embargo, y de acuerdo a las observaciones realizadas en algunos niños con test positivo para COVID-19, especialmente en Estados Unidos, es posible que la forma infantil de la infección por el nuevo coronavirus produzca un síndrome con síntomas semejantes a la enfermedad de Kawasaki, particularmente fiebre, manchas rojas en el cuerpo e inflamación.

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Diagnóstico de enfermedad de Kawasaki

El diagnóstico de la enfermedad de Kawasaki, se realiza según los criterios establecidos por la Asociación Americana del Corazón, a partir de la observación de los síntomas presentados por el niño. Por lo tanto, son evaluados los siguientes criterios:

Fiebre por cinco días o más;
Conjuntivitis sin pus;
Presencia de lengua roja e hinchada;
Enrojecimiento y edema orofaríngeo;
Visualización de grietas y enrojecimiento labial;
Enrojecimiento y edema de manos y pies, con descamación en la región de la ingle;
Presencia de manchas rojas en el cuerpo;
Ganglios hinchados en el cuello.

Además del examen clínico, pueden ser solicitados por el pediatra exámenes que pueden ayudar a confirmar el diagnóstico, como exámenes de sangre, ecocardiograma, electrocardiograma y rayos X de tórax.

Cómo se realiza el tratamiento

El tratamiento de esta enfermedad consiste en el uso de medicamentos para disminuir la inflamación y prevenir la gravedad de los síntomas, debiendo realizarse durante la hospitalización, hasta que no exista riesgos y complicaciones para la salud del niño.

Por lo general, el tratamiento se realiza utilizando aspirina para bajar la fiebre y la inflamación de los vasos sanguíneos, principalmente de las arterias del corazón, además, se indican altas dosis de gammaglobulinas, que son proteínas que forman parte del sistema inmunológico, este tratamiento se realiza durante 5 días o de acuerdo a la orientación médica.

Es posible que el médico indique el uso de pequeñas dosis de aspirina durante algunos meses después que la fiebre desaparezca, esto con la finalidad de reducir el riesgo de que surja una lesión en las arterias del corazón y de que se formen coágulos. Sin embargo, para evitar el Síndrome de Reye, que es una enfermedad causada por el uso prolongado de la aspirina, puede utilizarse el Dipiridamol, bajo orientación médica.

Posibles complicaciones

Algunas complicaciones que puede generar la enfermedad de Kawasaki son problemas en las válvulas cardiacas, miocarditis, arritmias, pericarditis. Además de esto, aumenta el riesgo de que se formen aneurismas en las arterias coronarias, pudiendo causar la obstrucción de la arteria y, consecuentemente, un infarto y/o muerte súbita.