Qué es:
La enfermedad por arañazo de gato es una infección que puede ocurrir cuando una persona es arañada por un gato infectado por la bacteria Bartonella henselae, la cual puede proliferar e inflamar la pared de los vasos sanguíneos, generando en la región lesionada una especie de ampolla roja característica de la enfermedad, la cual se puede complicar causando una celulitis, que es un tipo de infección en la piel, o una adenitis.
A pesar de ser una enfermedad transmitida por gatos, no todos estos animales son portadores de la bacteria. Sin embargo, como no es posible saber si el gato posee o no la bacteria, es importante que sea llevado a consultas periódicas con el veterinario para que le sean realizadas pruebas y sea desparasitado, previniendo así esta y otras enfermedades.
Principales síntomas
Los síntomas de la enfermedad por arañazo de gato suelen aparecer algunos días después del rasguño, siendo los principales:
- Ampolla roja alrededor de la zona del arañazo;
- Ganglios linfáticos inflamados;
- Fiebre alta, la cual puede ser de 38 a 40 ºC;
- Dolor y rigidez en la zona lesionada;
- Falta de apetito y pérdida de peso sin causa aparente;
- Problemas de visión, como visión borrosa y ardor en los ojos;
- Irritabilidad.
Se sospecha de esta enfermedad cuando la persona presenta inflamación de los ganglios luego de haber sido arañada por un gato. La enfermedad puede ser diagnosticada a través de un examen de sangre que detecta anticuerpos específicos contra la bacteria Bartonella henselae.
Cómo se realiza el tratamiento
El tratamiento de la enfermedad por arañazo de gato es realizado con antibióticos como amoxicilina, ceftriaxona o clindamicina, de acuerdo con las indicaciones del médico con el fin de eliminar de forma eficaz la bacteria. Asimismo, los ganglios linfáticos inflamados con líquido pueden ser drenados con agujas para aliviar el dolor.
En los casos más graves, cuando la fiebre permanece y cuando se inflama el ganglio linfático cercano a la región del arañazo, puede ser necesario realizar una cirugía para retirar dicho ganglio y llevar a cabo una biopsia para detectar las alteraciones presentes. Después de la cirugía, puede ser preciso colocar un drenaje para eliminar las posibles secreciones que puedan salir durante algunos días.
La mayor parte de las personas que sufren de la enfermedad por arañazo de gato se recuperan en pocas semanas después del inicio del tratamiento.
Por otra parte, se necesita un control más estricto con personas portadoras del VIH, pues pueden presentar la enfermedad por arañazo de gato de forma más grave debido a la deficiencia en el sistema inmunitario. Por esta razón, puede ser necesario que estos pacientes permanezcan internados para tratar la enfermedad.