Qué es:
La epiglotitis es una inflamación grave causada por una infección de la epiglotis, que es la válvula que evita el paso de líquido de la garganta a los pulmones.
Generalmente, esta situación surge en niños de 2 a 7 años de edad debido a que su sistema inmunitario no está completamente desarrollado; sin embargo, también puede aparecer en adultos con SIDA, por ejemplo.
La epiglotitis es una enfermedad rápida que puede causar obstrucción de las vías aéreas, ocasionando complicaciones muy graves cuando no es tratada, como paro respiratorio, por ejemplo. El tratamiento requiere hospitalización, ya que puede ser necesario recibir oxígeno a través de un tubo colocado en la garganta y antibióticos vía intravenosa.
Cuáles son los signos y síntomas
Entre los síntomas de la epiglotitis normalmente se incluyen los siguientes:
- Dolor de garganta;
- Dificultad para tragar;
- Fiebre por encima de 38ºC;
- Ronquera;
- Exceso de saliva en la boca;
- Dificultad para respirar;
- Ansiedad;
- Respiración sibilante.
En los casos de epiglotitis aguda, la persona tiende a inclinarse hacia adelante mientras extiende el cuello hacia atrás, intentando facilitar la respiración.
Posibles causas
Las causas de la epiglotitis pueden ser una gripe mal curada, atragantamiento con un objeto, aparición de infecciones respiratorias, como neumonía, por ejemplo, e inflamaciones y quemaduras de la garganta.
En los adultos, las causas más comunes de esta condición son el tratamiento de cáncer con quimioterapia y radioterapia o la inhalación de drogas.
Transmisión de la epiglotitis
La transmisión de la epiglotitis se produce por medio del contacto directo con la saliva de la persona afectada, a través de estornudos, tos, besos e intercambio de cubiertos, por ejemplo. Por tanto, los pacientes infectados deben utilizar mascarilla y evitar compartir objetos que estén en contacto con la saliva.
La prevención de esta condición se puede realizar a través de la vacuna Haemophilus influenzae tipo b (Hib), que es el principal agente etiológico de la epiglotitis, y la primera dosis debe ser realizada a los 2 meses de edad.
En qué consiste el diagnóstico
Cuando el médico sospecha de epiglotitis, se debe asegurar de inmediato que la persona pueda respirar. Una vez estabilizada, esta puede someterse a una evaluación de la garganta, radiografías, pruebas de sangre y toma de muestra de la garganta para ser analizada.
Cómo se realiza el tratamiento
La epiglotitis tiene cura y el tratamiento consiste en la hospitalización del paciente, con el objetivo de recibir oxígeno a través de un tubo colocado en la garganta y controlar su respiración por medio de máquinas adecuadas para tal fin.
Asimismo, el tratamiento también incluye la inyección por vía intravenosa de antibióticos, como ampicilina, amoxicilina o ceftriaxona, hasta que la infección disminuya. Después de 3 días, la persona puede regresar a casa, pero necesita tomar medicamentos por vía oral indicados por el médico por un máximo de 14 días.