Qué es:
La estomatitis aftosa es una situación caracterizada por el surgimiento de aftas, ampollas o úlceras en la boca de forma frecuente, siendo más común en bebés, niños o personas que tienen el sistema inmunológico debilitado debido a enfermedades crónicas, como en el caso de VIH/SIDA, por ejemplo.
Las aftas, ampollas y heridas pueden surgir, en algunos casos, cada 15 días pudiendo desencadenarse por estrés, alteraciones hormonales o del sistema inmune, además de que también pueden presentarse debido a deficiencias de vitaminas y minerales, principalmente de vitamina B12.
Principales síntomas
El principal síntoma de estomatitis aftosa es el surgimiento de aftas, ampollas o heridas en la boca de forma ovalada y tienen menos de 1 cm de diámetro. Además, las aftas y heridas pueden ser dolorosas, dificultar la ingesta de bebidas y alimentos, además de que hay una mayor sensibilidad en la boca.
A pesar de que la estomatitis surja con mayor frecuencia en los labios, en algunos casos también puede surgir en el paladar, garganta y encías, lo cual puede ser incluso más molesto.
De acuerdo con las características, el tamaño y cantidad de las aftas que se forman en la boca, la estomatitis puede clasificarse como:
1. Estomatitis aftosa Menor
Ese tipo de estomatitis es el más común y se caracteriza por producir aftas pequeñas, de aproximadamente 10 mm y generalmente les toma de 10 a 14 días en desaparecer. En este tipo de estomatitis las aftas tienen forma redondeada, son de color grisáceo o amarillento con bordes rojizos.
2. Estomatitis aftosa Mayor
Este tipo de estomatitis provoca aftas mayores, que pueden llegar a medir hasta 1 cm, pudiendo tardar desde días a meses para sanar por completo debido a su tamaño. Este tipo de estomatitis es menos común y cuando surgen las aftas lo hacen en menor cantidad, dejando cicatrices en la boca.
3. Estomatitis Herpetiforme
En este caso, las aftas que surgen son pequeñas, miden alrededor de 1 a 3 mm, y generalmente aparecen en grandes cantidades, pudiendo surgir 100 aftas por episodio.
Posibles causas
La estomatitis puede surgir en cualquier momento sin que haya un factor desencadenante. Sin embargo, algunas situaciones pueden favorecer el surgimiento de las aftas y heridas en la boca, siendo las principales:
- Antecedentes familiares de estomatitis aftosa;
- Infección por virus, como el del herpes;
- Alteraciones hormonales, siendo más común en mujeres;
- Deficiencias nutricionales, principalmente ácido fólico y vitamina B12;
- Alteraciones en el sistema inmune, como en el caso de enfermedades autoinmunes y SIDA, por ejemplo;
- Situaciones de estrés emocional o físico.
El diagnóstico de la estomatitis es realizado por el médico de acuerdo con los síntomas presentados por la persona, frecuencia con que surgen las aftas y sus características, además de evaluarse el factor que favorece el surgimiento de la estomatitis.
¿Cuál es el tratamiento?
El tratamiento para la estomatitis aftosa se realiza con el objetivo de aliviar los síntomas como dolor y malestar, además de ayudar a la cicatrización de las úlceras. De esta forma, pueden recomendarse algunos medicamentos antiinflamatorios, como triamcinolona; antibióticos o anestésicos como benzocaína, por ejemplo, debiendo ser utilizados de acuerdo con la orientación del médico.
Además, también puede recomendarse el uso de remedios naturales y homeopáticos como la quercetina, extracto de mangle rojo, extracto de regaliz o propóleo, que ayudan a reducir los síntomas presentados.
Conozca algunos tratamientos caseros que puede realizar en casa para ayudar a curar más rápido las aftas: