El examen de la vista, o examen oftalmológico, sirve para evaluar la capacidad visual y la salud de los ojos, lo que permite identificar alteraciones que pueden causar o ser signo de problemas de visión o enfermedades, como glaucoma o retinopatía diabética.
Existen varios tipos de examen de la vista, como el examen de fondo de ojo, la topografía corneal o el examen del campo visual, que pueden ser indicados por el oftalmólogo para evaluar las estructuras del ojo, como retina, iris, córnea y vasos sanguíneos, además de la evaluación externa del canal lagrimal y los párpados.
Se recomienda realizar consultas con el oftalmólogo al menos una vez por año, en especial después de los 40 años de edad, o siempre que surjan síntomas relacionados con la visión, como dificultad para ver, visión doble o borrosa, dolor de cabeza frecuente o enrojecimiento ocular, por ejemplo.
Lea también: Problemas de la vista: 11 síntomas y cómo tratar tuasaude.com/es/sintomas-de-problemas-de-la-vistaPrincipales exámenes de la vista
Existen varios tipos de examen de la vista que pueden ser realizados de acuerdo con la condición que se está intentando identificar, incluyendo:
1. Test del reflejo rojo
El test del reflejo rojo es un examen de la vista simple e indoloro, el cual es realizado por el pediatra en la primera semana de vida del recién nacido, con el objetivo de evaluar las estructuras del ojo, garantizando que están correctamente desarrolladas.
Este examen de la vista permite que el médico identifique alteraciones que pueden indicar enfermedades oculares en el recién nacido, como catarata congénita, glaucoma, retinoblastoma, grados elevados de miopía, astigmatismo, hipermetropía e incluso ceguera.
Cuándo hacerlo: el test del reflejo rojo normalmente es realizado en la maternidad, luego del nacimiento del bebé, pero también puede llevarse a cabo en la primera consulta del bebé luego de salir de la maternidad. Para hacer el examen, el médico emplea un oftalmoscopio, que es un pequeño aparato que proyecta una luz en los ojos del recién nacido, permitiendo evaluar sus estructuras y el reflejo de la retina.
2. Test de motilidad ocular
El test de motilidad ocular es llevado a cabo por el oftalmólogo para evaluar la fuerza de los músculos que mueven los ojos, así como la falta de control o de coordinación de estos músculos. Normalmente, es indicado para identificar problemas como estrabismo, dificultad de convergencia o falta de capacidad visual.
Por lo general, este test es realizado colocando un pequeño objeto enfrente de la persona, como un bolígrafo o una luz. Luego, el médico realiza movimientos con el objeto para que puedan ser seguidos con los ojos.
Cuándo hacerlo: el test de motilidad ocular es realizado en exámenes oftalmológicos de rutina, y también puede ser indicado cuando la persona presenta síntomas como dolor de cabeza, cansancio, visión doble o dificultad de concentración, en especial después de leer.
3. Test de agudeza visual
El test de agudeza visual, también conocido como test de Snellen, es el examen de la vista más común realizado por el oftalmólogo. Este sirve para evaluar cuánto ve una persona, al observar letras de una escala o números mediante un aparato, conocido como autorrefractómetro, colocado enfrente de la cara.
Este examen permite al médico evaluar la presencia de miopía, hipermetropía, presbicia y astigmatismo, y verificar la necesidad de gafas, lentes de contacto o cirugía refractiva.
Cuándo hacerlo: el examen de refracción debe ser llevado a cabo siempre que la persona presente alteraciones de la visión para ver de cerca o de lejos o dificultad para enfocar, por ejemplo.
4. Examen de perimetría visual
El examen de perimetría visual, también conocido como campimetría, es realizado para evaluar la capacidad de percibir el campo visual central y periférico, y está indicado principalmente para diagnosticar el glaucoma y hacer seguimiento de su tratamiento.
Además, este examen puede ser llevado a cabo para identificar alteraciones en el campo visual y enfermedades de la retina, como retinopatía diabética, degeneración o edema macular, retinitis pigmentaria, tumores o retinosis.
Cuándo hacerlo: el examen de perimetría visual debe ser llevado a cabo en caso de dolor en los ojos o cuando existe diagnóstico de glaucoma, hipertiroidismo, esclerosis múltiple, diabetes, presión alta, tumor cerebral o enfermedades de la hipófisis, pues permite verificar si existen alteraciones del campo visual.
5. Topografía corneal
La topografía corneal, también conocida como fotoqueratoscopía, es un examen que mide el grosor y la curvatura de la córnea, lo que permite identificar deformaciones de la misma, como en el caso del queratocono, por ejemplo.
Este examen también puede ser realizado en el pre y posoperatorio de cirugías para el tratamiento de la catarata, pterigión, miopía, astigmatismo, hipermetropía o incluso para trasplante de córnea, con el objetivo de determinar si la persona está apta para la realización de cirugía, o para verificar los resultados de la cirugía.
Cuándo hacerla: la topografía corneal es realizada por el oftalmólogo siempre que existe la sospecha de alteraciones en el cambio y el grosor de la córnea, o para evaluar la córnea antes o después de cirugías oftalmológicas.
6. Examen de fondo de ojo
El examen de fondo de ojo es un tipo de examen de la vista que permite evaluar las estructuras del ojo, como el nervio óptico, los vasos sanguíneos de la retina y la región de la mácula.
Este examen permite visualizar detalladamente y en colores las arterias, las venas y los nervios del ojo, facilitando la identificación de alteraciones en la retina, o incluso enfermedades sistémicas que pueden causar retinopatía.
Cuándo hacerlo: el examen de fondo de ojo puede ser llevado a cabo en consultas de rutina anuales en adultos, en especial luego de los 40 años de edad o cuando la persona tiene diabetes o presión alta. Asimismo, este examen puede ser llevado a cabo en recién nacidos prematuros para evaluar la presencia de problemas oftalmológicos, como retinoblastoma, o infecciones como sífilis, rubéola, toxoplasmosis o citomegalovirus, en caso de que la madre haya presentado alguna infección durante el embarazo.
7. Test de Ishihara
El test de Ishihara, también conocido como examen de visión cromática, es un examen de la vista que evalúa la percepción de los colores y sirve para diagnosticar el daltonismo.
Este examen tiene como objetivo evaluar la capacidad de la persona de distinguir varias tonalidades de colores, lo que puede ser realizado empleando cartones con imágenes circulares y que poseen puntos de varias tonalidades distintas. Vea otros exámenes para identificar el daltonismo.
Cuándo hacerlo: el test de Ishihara puede ser realizado en niños o adultos cuando se determina alguna dificultad para identificar colores.
8. Test TCO
El test TCO, o tomografía de coherencia óptica, es un examen realizado por el oftalmólogo, en el cual utiliza una máquina que emite una luz, que es captada por la computadora, y produce imágenes en colores de las estructuras del ojo, como retina, iris, cristalino, humor vítreo y córnea.
Este examen permite diagnosticar varias enfermedades de los ojos que afectan la córnea, la retina, el humor vítreo o el nervio óptico, como degeneración o edema macular, glaucoma o retinopatía diabética, por ejemplo.
Cuándo hacerlo: el test TCO debe ser realizado siempre que el oftalmólogo sospeche de enfermedades del humor vítreo o de la retina, en especial cuando la persona presenta otras condiciones de salud, como diabetes, o para hacer el seguimiento posoperatorio de cirugías oftalmológicas.
¿Cómo hacer el examen de la vista en casa?
Para realizar el examen de la vista en casa, debe seguir las siguientes instrucciones:
- Coloque el monitor a la distancia indicada en la tabla de abajo;
- Observe la imagen y tape su ojo izquierdo con la mano izquierda, sin hacer presión. En caso de utilizar lentes no se los quite al momento de hacer esta prueba;
- Intente leer las letras de la imagen de arriba hacia abajo;
- Repita los pasos anteriores para el ojo derecho.
Las distancias recomendadas del monitor para esta prueba son:
En caso de lograr leer hasta la línea de abajo con ambos ojos, se dice que la capacidad visual es de 100%, sin embargo en caso de no lograrlo puede que sea necesario corregir la vista. Para ello, se recomienda consultar a un oftalmólogo que confirme el grado de visión y haga la corrección necesaria.