El examen oftalmológico es un conjunto de pruebas que se realizan por un oftalmólogo, optometrista u óptico para comprobar la salud de los ojos y determinar si presenta algún problema.
Existen muchos tipos de exámenes de la vista, aunque los principales son exámen de agudeza visual, exploración de la motilidad ocular y fondo de ojos entre otros. Los mismos se realizan para diagnosticar enfermedades a la vista como miopía, astigmatismo, glaucoma, parálisis de los músculos oculares y alteraciones genéticas.
El exámen oftalmológico debe realizarse al nacimiento, a los 5 años de manera obligatoria y conforme la persona va creciendo debe continuar haciéndose chequeos con su oftalmólogo. Estas evaluaciones pueden ser solicitadas por su médico, instituciones educativas y aseguradoras.
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Para qué sirve
El examen oftalmológico sirve para evaluar diversas características del ojo, como la capacidad visual, la presión intraocular, el estado de los lagrimales y la salud de la retina, entre otros aspectos.
Algunas evaluaciones de la vista se realizan con las pupilas dilatadas, lo que permite al oftalmólogo ver con mayor precisión el interior del ojo, especialmente la retina, el nervio óptico y los vasos sanguíneos.
Es importante realizar este examen de manera periódica, ya que muchas enfermedades oculares no presentan síntomas en sus etapas iniciales.
Tipos de exámenes
Los principales tipos de exámenes de la vista son:
1. Exámen de agudeza visual
El examen de agudeza visual es el más conocido de los exámenes oftalmológicos y en este examen se mide la calidad de la visión a varias distancias utilizando una tabla especial.
La tabla que se utiliza para el examen se denomina tabla de Snellen, contiene letras y símbolos de diferentes tamaños y se utiliza a diferentes distancias para determinar si existe alguna alteración, como miopía, astigmatismo, hipermetropía, presbicia, entre otros. Conozca más sobre el exámen de agudeza visual y sus valores normales.
2.Exploración de la motilidad ocular
La exploración de la motilidad ocular sirve para evaluar los movimientos del ojo con el objetivo de detectar posibles alteraciones en la musculatura o en los nervios que controlan el movimiento ocular.
Este examen permite llegar a diagnósticos como el estrabismo y parálisis de los músculos oculares.
En esta exploración, el oftalmólogo pedirá al paciente que permanezca sentado con la cabeza fija hacia adelante. Luego, el profesional le solicitará que siga el movimiento de un objeto únicamente con los ojos. Se evaluarán los movimientos oculares en todas las direcciones para observar la coordinación y la simetría de los mismos.
3. Fondo de ojos
El fondo de ojos es un examen que se realiza con un oftalmoscopio, un dispositivo que emite luz y permite amplificar la imagen del ojo hasta 16 veces, lo que facilita la observación detallada del estado de la retina y del disco óptico.
En este examen, el oftalmólogo coloca gotas de tropicamida que provocan la dilatación de la pupila, lo que puede causar visión borrosa. Este efecto generalmente dura entre 4 y 6 horas.
A través de este estudio, se pueden llegar a diagnósticos como anomalías congénitas, alteraciones del nervio óptico, cambios en los vasos sanguíneos, trastornos inflamatorios, infecciosos y degenerativos, entre otros.
4. Tonometría
La tonometría se utiliza para medir la presión intraocular. Existen dos métodos para realizar este examen: uno consiste en aplicar una ráfaga de aire sobre el ojo, mientras que el otro implica el contacto directo de un instrumento con una punta sensible que registra la presión ocular.
Este exámen permite identificar la presencia de glaucoma que se caracteriza principalmente por un aumento de la presión intraocular. Conozca más sobre el glaucoma, sus causas, síntomas y tratamiento.
5. Evaluación de los conductos lagrimales
En la evaluación de los conductos lacrimales, el oftalmólogo analiza mediante el uso de colirio la cantidad de lágrimas, el tiempo que permanecen en los ojos y su producción y eliminación.
Este examen es crucial para diagnosticar problemas como ojo seco, obstrucción del conducto lacrimal o dificultades en la drenaje lagrimal.
Además, ante la sospecha de alguna alteración el profesional puede recomendar que se realicen exámenes adicionales más específicos, como tomografía de coherencia óptica, curva tensional diaria, mapeo de la retina, paquimetría y campimetría visual.
¿Cuándo debo hacer el examen de la vista?
El exámen oftalmológico se recomienda realizar en las siguientes situaciones:
- Al nacer: se realiza en el hospital al momento del nacimiento o en un consultorio oftalmológico para detectar posibles problemas visuales desde el principio.
- A los 5 años: antes de entrar a la escuela, se realiza un diagnóstico de posibles problemas visuales que podrían dificultar el proceso de aprendizaje.
- Entre los 20 y los 40 años: es importante realizar al menos dos chequeos durante este periodo para detectar cualquier alteración que pueda afectar la visión.
- Entre los 40 y 65 años: se debe evaluar la vista cada 1 o 2 años, ya que la presbicia comienza a presentarse en la mayoría de los adultos a partir de los 40 años.
- Después de los 65: se recomienda evaluar la vista una vez al año, ya que las personas mayores son más propensas a padecer diversas enfermedades oculares.
Además, el oftalmólogo podría recomendar exámenes más frecuentes en casos de diabetes, presión arterial elevada, glaucoma o en personas que realicen actividades visualmente exigentes, como trabajar con piezas pequeñas o pasar largas horas frente a una computadora.
Las personas con problemas visuales deben realizar consultas con su oftalmólogo al menos una vez al año. Si se presentan alteraciones en la visión, como dolor en el ojo o visión borrosa, es importante consultar a un oftalmólogo lo antes posible para descartar cualquier enfermedad ocular.
¿Para qué me pueden solicitar estos exámenes?
Los exámenes oftalmológicos pueden ser solicitados por su médico, empleador, instituciones deportivas, instituciones educativas y aseguradoras por diversas razones:
1.Fines diagnósticos
Para detectar alteraciones en la visión o problemas oculares que puedan afectar la salud visual.
2.Seguridad laboral
En trabajos que requieren buena visión para garantizar la seguridad de la persona, como conducir, operar maquinaria o realizar trabajos de precisión.
3.Obtención del permiso de conducir
Para verificar que la persona cumple con los requisitos visuales necesarios para conducir de manera segura.
4.Deportes y actividades físicas
Para asegurar que los deportistas tengan la visión adecuada para desempeñar sus actividades de manera óptima.
5.Instituciones educativas
Las instituciones educativas solicitan estos exámenes para detectar problemas visuales que puedan afectar el aprendizaje y el rendimiento escolar de los estudiantes.
6.Prevención de problemas de salud
Estos exámenes también pueden ayudar a detectar problemas de salud general, como la hipertensión o la diabetes, que pueden tener efectos en la salud ocular.