Para saber si tiene asma se debe acudir a un neumólogo o alergólogo para que realicen un examen físico y una evaluación de los síntomas presentes por la persona, los antecedentes médicos y familiares.
Los síntomas principales que están asociados con el asma son: tos intensa, sensación de falta de aire y opresión en el pecho. En algunos casos, esta evaluación suele ser suficiente para confirmar el diagnóstico. Conozca otros síntomas que puede ocasionar el asma.
No obstante, el médico también puede indicar la realización de otros exámenes con el objetivo de evaluar la gravedad del asma, pues de esta forma el médico podrá prescribir el tratamiento más adecuado.
Cómo confirmar el diagnóstico de asma
Los exámenes realizados por el médico para saber si es o no asmático son:
1. Evaluación clínica
El diagnóstico inicial se realiza por medio de la evaluación de los signos y síntomas presentados, además de la evaluación de los antecedentes familiares y la presencia de alergias, por ejemplo. De esta forma, los síntomas ayudan a confirmar el diagnóstico de asma son:
- Tos intensa;
- Silbido al respirar;
- Sensación de falta de aire;
- Sensación de "opresión en el pecho";
- Dificultad para llenar de aire los pulmones.
Las crisis de asma tienden a ser más frecuentes en la noche y pueden llevar a la persona a despertarse. Sin embargo, pueden suceder en cualquier otro momento del día, dependiendo del factor desencadenante.
Algunas informaciones que pueden ayudar al médico a llegar con más rapidez al diagnóstico, además de los síntomas, incluyen el tiempo de duración de las crisis, la frecuencia, intensidad, o lo que estaba realizando en el momento que surgieron los primeros síntomas, si existen otras personas en la familia con asma y si existe mejoría de los síntomas después de hacer algún tipo de tratamiento.
2. Exámenes
A pesar de que en la mayoría de los casos el asma puede ser diagnosticada con solo la evaluación de los signos y síntomas presentados, el médico puede solicitar, en algunos casos, la realización de exámenes, con el objetivo de evaluar la gravedad de la enfermedad.
El examen que normalmente se indica en casos de asma es la espirometría, que tiene como objetivo identificar la presencia del estrechamiento de los bronquios, que es común en esta enfermedad, a través de la evaluación de la cantidad de aire que se logra espirar después de una respiración profunda y la rapidez con que el aire es exhalado. Normalmente, los resultados de este examen indican una disminución en los valores de VEF, FEP y en la relación VEF/CVF. Conozca más sobre cómo se realiza la espirometría.
Después de hacer la evaluación clínica y la espirometría el médico puede recurrir a otros exámenes, como:
- Rayos X de tórax;
- Exámenes de sangre;
- Tomografía computarizada.
Estos exámenes no suelen utilizarse, ya que sirven para descartar otros problemas pulmonares, como neumonía o neumotórax, por ejemplo.
Criterios para diagnosticar el asma
Para hacer el diagnostico del asma, el médico generalmente se basa en los siguientes parámetros:
- Presentación de uno o mas síntomas de asma, como falta de aire, tos por más de 3 meses, silbidos al respirar, opresión o dolor en el pecho especialmente en la noche o en las primeras horas de la mañana;
- Resultados positivos en los exámenes para diagnosticar el asma;
- Mejora de los síntomas después del uso de medicamentos para el asma como broncodilatadores o antiinflamatorios, por ejemplo;
- Presencia de 3 o más episodios de silbidos al respirar en los últimos 12 meses;
- Antecedente familiar de asma;
- Exclusión de otras enfermedades como apnea del sueño, bronquiolitis o insuficiencia cardíaca, por ejemplo.
Después de que el médico realiza el diagnóstico de asma a través de estos parámetros, determina la gravedad y el tipo de asma, evalúa cuál es el mejor tratamiento y monitorea al paciente regularmente ajustando el tratamiento, de forma tal que la enfermedad esté controlada.
Test online de síntomas
Para conocer sus posibilidades de tener asma, seleccione los síntomas que presenta a continuación:
La prueba de síntomas es solo una herramienta de orientación, no sirve como diagnóstico y no reemplaza la consulta con el neumólogo, alergólogo o médico general.
Cómo se evalúa la gravedad del asma
Después de confirmar el diagnóstico y antes de prescribir el tratamiento, el médico necesita identificar la gravedad de los síntomas y conocer algunos de los factores que parecen llevar al surgimiento de los síntomas. De esta forma, es posible adaptar mejor las dosis de medicamentos e incluso el tipo de medicamentos.
La gravedad del asma puede clasificarse de acuerdo a la frecuencia e intensidad con la que surgen los síntomas en:
De acuerdo con la gravedad del asma, el médico orienta el tratamiento adecuado que generalmente incluye el uso de medicamentos para el asma como antiinflamatorios y broncodilatadores. Vea en qué consiste el tratamiento del asma.
Los factores que normalmente contribuyen a la aparición de una crisis de asma incluyen infecciones respiratorias, alteraciones del clima, polvo, hongos, algunos tipos de materiales con los que se hace ropa, o el uso de medicamentos. A lo largo del tratamiento es importante evitar los factores identificados para evitar la aparición de nuevas crisis e incluso disminuir la intensidad de los síntomas cuando surjan.
Aunque algunos factores desencadenantes puedan ser identificados en el momento del diagnóstico, otros pueden ser identificados a lo largo de los años, siendo siempre importante informar al médico. Conozca también qué debe hacer ante una crisis de asma.