Flujo amarillo (con y sin olor): 6 causas y qué hacer

El flujo amarillo puede ser normal en algunas mujeres que presentan un flujo vaginal más grueso, especialmente durante la ovulación, principalmente si es de coloración amarillo claro y no presenta olor.

No obstante, si el flujo amarillo posee olor fétido o está acompañado de otros síntomas como comezón en la región genital o dolor al orinar, por ejemplo, puede indicar la presencia de una infección. 

Por este motivo, lo ideal es acudir a un ginecólogo para que realice una evaluación que permita identificar el problema e iniciar el tratamiento más adecuado, el cual puede variar dependiendo de cuál sea el origen del flujo.

6 causas de flujo amarillo

Las principales causas de flujo amarillo son:

1. Tricomoniasis

La tricomoniasis es una infección de transmisión sexual causada por el protozoario Trichomonas vaginalis, que lleva al surgimiento de flujo amarillo-verdoso, de olor fuerte, dolor y malestar al orinar y enrojecimiento en la zona genital. Vea cómo identificar la infección por tricomoniasis.

Qué hacer: el tratamiento para la tricomoniasis debe hacerse en la pareja, incluso cuando no haya signos ni síntomas aparentes, siendo recomendado por el ginecólogo el uso de metronidazol en comprimidos o pomada para aplicación local.

2. Clamidia

La clamidia también es una infección de transmisión sexual, causada por la. bacteria Chlamydia trachomatis, que causa flujo amarillo, dolor y ardor al orinar, además de sangrado y dolor durante la relación sexual, dolor pélvico y sangrado fuera del período menstrual.

Qué hacer: es importante seguir el tratamiento médico, que normalmente incluye el uso de antibióticos como azitromicina o doxiciclina. Conozca más sobre el tratamiento de la clamidia. 

3. Gonorrea

La gonorrea es una enfermedad causada por la bacteria Neisseria gonorrhoeae, que puede transmitirse a través de una relación sexual sin protección. La infección por esta bacteria puede causar flujo amarillo, dolor y ardor al orinar, además de ganas frecuentes para orinar.

Qué hacer: se recomienda consultar al ginecólogo para que oriente el tratamiento, el cual incluye el uso de antibióticos. Vea más sobre los síntomas y tratamiento de la gonorrea.

4. Uretritis

La inflamación de la uretra, conocida científicamente como uretritis, puede ocurrir por un traumatismo en la uretra o debido a una infección, por lo que es más frecuente en mujeres que tienen infecciones urinarias recurrentes o que no tienen una higiene adecuada.

En estos casos el flujo puede presentar una coloración amarillo verdosa y puede acompañarse de otros síntomas como: ardor al orinar, dificultad para comenzar a orinar y comezón en la región, por ejemplo.

Qué hacer: debe consultar al ginecólogo para confirmar el diagnóstico e iniciar el tratamiento con un antibiótico, como Azitromicina o Ceftriaxona. Conozca otros medicamentos que pueden ser utilizados en el tratamiento. 

5. Enfermedad inflamatoria pélvica

La enfermedad inflamatoria pélvica, o EIP, es una infección de los órganos reproductores femeninos que generalmente se inicia en la vagina y progresa hasta el útero, causando el surgimiento de un flujo amarillento y otros síntomas como fiebre por encima de 38ºC, dolor de vientre y hasta sangrado vaginal.

Qué hacer: es muy importante consultar al ginecólogo si se sospecha de EIP, debido a que por lo general, es necesario iniciar el tratamiento a base de antibióticos durante 2 semanas aproximadamente. Durante el tratamiento se debe evitar tener relaciones sexuales para facilitar la recuperación. Conozca más sobre cómo se realiza el tratamiento de esta infección. 

6. Cervicitis

La cervicitis es la inflamación del cérvix o cuello uterino, que es la parte más baja y estrecha del útero que se conecta con la vagina. 

Esta inflamación provocando síntomas como flujo vaginal amarillo, tipo pus, así como sangrado fuera del período menstrual, enrojecimiento en la región genital, dolor al orinar y durante el contacto íntimo. 

Qué hacer: es importante consultar al ginecólogo para que indique el tratamiento más adecuado, el cual suele implicar el uso de antibióticos, como azitromicina, doxiciclina, ceftriaxona o metronidazol, por ejemplo, dependiendo del tipo de microorganismo que causó la inflamación. Conozca los diferentes tratamientos de la cervicitis.

Flujo amarillo en el embarazo

Durante el embarazo, el flujo amarillento puede ser causado también por la tricomoniasis, pudiendo provocar parto prematuro o que el recién nacido nazca bajo peso. Vea cuáles son las posibles causas de flujo vaginal en el embarazo y cuándo puede ser grave.

Por lo que es importante que la embarazada consulte al obstetra para que sea evaluada y, dependiendo de la causa, indique el tratamiento más adecuado, el cual puede realizarse con el uso de medicamentos, como el Metronidazol o Tinidazol, por ejemplo.

Recomendaciones importantes durante el tratamiento

Aunque el tratamiento puede variar de acuerdo a la causa del flujo, existen algunos consejos que son importantes para cualquiera de las situaciones. Uno de estos consejos es que la pareja también debe realizar el tratamiento, aunque no presente síntomas, para evitar que la persona sea contagiada nuevamente.

Además de esto se recomienda:

• Utilizar condón para no contagiar a la pareja;
• Evitar el uso de duchas vaginales, porque remueven las bacterias de la región íntima responsables por proteger esta región de las infecciones;
• Evitar el uso de perfumes o sprays de higiene íntima, ya que alteran el pH vaginal;
• Utilizar ropa íntima de algodón, porque permite que la piel transpire y no causa irritación;
• Evitar el uso de pantalones apretados, prefiriendo el uso de faldas o vestidos para permitir airear la región.

Otro consejo para el tratamiento del flujo amarillo es evitar el uso de tampones higiénicos, prefiriendo las toallas sanitarias. 

Vea en el video a continuación cómo identificar correctamente el flujo de cada color y qué puede ser: