Fosfatidilserina: para qué sirve y cómo ingerirlo

Evidencia científica

Qué es:

La fosfatidilserina es un compuesto fosfolípido ácido, que se encuentra en elevadas concentraciones en el cerebro y en el tejido neural, debido a que forma parte de la membrana celular. Este compuesto participa en diversas funciones biológicas, incluida la activación de enzimas, la muerte celular, la neurotransmisión y en las sinapsis de las células neuronales.

Por este motivo, la fosfatidilserina podría contribuir en la función cognitiva, principalmente en adultos mayores, ayudando a mejorar la memoria, la concentración y la atención.

Este compuesto es producido naturalmente por el organismo, sin embargo, puede obtenerse a través del consumo de algunos alimentos de origen animal y/o vegetal o de la suplementación. Estos suplementos pueden comprarse en algunas farmacias, tiendas naturistas o tiendas online, debiendo ser utilizados bajo la orientación de un médico o profesional de salud. 

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Para qué sirve la fosfatidilserina

La fosfatidilserina sirve para: 

1. Mejorar la función cognitiva y la memoria

Se ha encontrado diversos beneficios en la suplementación con fosfatidilserina, algunos estudios[1] han demostrado que ayuda a mejorar la función cognitiva y la memoria en personas mayores, incluyendo personas con Alzheimer, demencia senil y personas con deterioro de la memoria asociado a la edad, previniendo o retardando la pérdida cognitiva.

Esto debido a que la fosfatidilserina aparentemente incrementa la comunicación neuronal al aumentar la fluidez de las membranas e incrementar los niveles de acetilcolina, un importante neurotransmisor, además protege las membranas de las células del daño oxidativo y de los radicales libres. 

En personas saludables no hay suficientes estudios que comprueben esta mejoría, pero se cree que podría ser positiva. Otros estudios [2] también indican que la desregulación del metabolismo de la fosfatidilserina está asociada con diferentes enfermedades del sistema nervioso central, incluida la enfermedad de Alzheimer, la enfermedad de Parkinson, el trastorno depresivo mayor, ACV y la enfermedad del espectro autista.

2. Podría reducir los síntomas del déficit de atención e hiperactividad 

La suplementación con fosfatidilserina podría mejorar los síntomas del déficit de atención y los trastornos de hiperactividad en niños con TDAH, observándose también una mejoría en la memoria auditiva a corto plazo y en la impulsividad. Conozca cuáles son los síntomas de los TDAH.

3. Mejorar la atención y el aprendizaje

Según algunos estudios [3], en el caso de los adultos jóvenes, este suplemento podría mejorar significativamente la capacidad de procesar la información, así como la precisión en las respuestas realizadas en algunas pruebas que miden la capacidad cognitiva. 

4. Podría mejorar el estrés

La suplementación prolongada con fosfatidilserina podría ejercer efectos antiestrés en personas saludables, no se conoce con exactitud cómo este compuesto actúa en el organismo para generar este efecto, por lo que se necesitaran más estudios para confirmarlo. 

Lista de alimentos que contienen fosfatidilserina

Los alimentos que contienen fosfatidilserina son:

  • Pescados;
  • Krill;
  • Carnes rojas y blancas, como pollo y pavo, concentrándose principalmente en las vísceras, como el hígado o los riñones;
  • Leche;
  • Huevos;
  • Frijoles blancos;
  • Semillas de girasol;
  • Soya y derivados.

Actualmente, se estima que la ingesta dietética de fosfatidilserina, por su presencia natural en la dieta, está en el rango entre 75 a 184 mg al día.

Cómo consumir este suplemento

La FDA aprobó este suplemento dietético, recomendado una dosis máxima de 300 mg por día. Por lo general, para prevenir el deterioro cognitivo se recomienda la ingesta de 100 mg, 3 veces al día, sin embargo, es importante leer las instrucciones del fabricante, ya que los suplementos podrán variar en cuanto a la dosis.  

En el caso de los niños y adolescentes, para mejorar la atención se recomienda la ingesta de 200 mg por día, y la dosis de 200 a 400 mg por día ha sido utilizada en adultos saludables. 

Efectos secundarios y contraindicaciones

La ingesta del suplemento de fosfatidilserina es aparentemente seguro, observándose solo problemas gastrointestinales como náuseas, vómitos e indigestión.

Este suplemento no debe ser ingerido por embarazadas o mujeres que sospechen de embarazo y durante la lactancia materna, debido a la falta de estudios que comprueben su seguridad.