La frecuencia cardíaca (FC) o pulsaciones indica la cantidad de veces que el corazón late por minuto y su valor normal en adultos varía entre 60 a 100 latidos por minuto en reposo. Sin embargo, puede variar de acuerdo a algunos factores como la edad, nivel de actividad física realizada o la presencia de alguna enfermedad cardíaca.
Para medir la frecuencia cardíaca se pueden colocar los dedos índice y medio en el cuello y contar las pulsaciones durante 1 minuto o usar un dispositivo que mida la frecuencia cardíaca.
Si se produce un aumento o disminución de la frecuencia cardíaca en reposo, es fundamental consultar al cardiólogo para que realice pruebas que identifiquen la causa de la alteración y así iniciar el mejor tratamiento.
Pulsaciones normales por edades
La pulsaciones normales en reposo de acuerdo a la edad son:
- 0 a 28 días de vida: 100 a 205 lpm;
- 28 días a 1 año: 100 a 180 lpm;
- 1 a 3 años: 98 a 140 lpm;
- 3 a 5 años: 80 a 120 lpm;
- 5 a 12 años: 75 a 118 lpm;
- A partir de 13 años: 60 a 100 lpm.
El ritmo cardíaco, así como la presión arterial y el peso, es un indicador importante del estado de salud de la persona. Vea cuál es la frecuencia cardíaca en niños según la edad.
Evalúa tu frecuencia cardíaca
En caso quiera saber si su frecuencia cardíaca está normal, coloque sus datos en la calculadora a continuación:
La calculadora es solo una herramienta orientativa y no sustituye la consulta con el cardiólogo o médico de familia.
Tabla de ritmo cardíaco normal por edad
La siguiente tabla muestra cómo se encuentra la frecuencia cardíaca en reposo en hombres según la edad:
En la tabla a continuación se muestra cómo se encuentra la frecuencia cardíaca en mujeres en reposo según la edad:
Cuando una persona tiene una buena capacidad cardíaca, el corazón es capaz de bombear la misma cantidad de sangre, con menos esfuerzo, lo que naturalmente reduce la frecuencia cardíaca en reposo. Por ello, se recomienda hacer ejercicio con regularidad. Para saber si su frecuencia cardíaca está bien lo ideal es consultar a un cardiólogo.
Cómo medir la frecuencia cardíaca
Para medir la frecuencia cardíaca puede colocar el dedo índice y el medio en la parte lateral del cuello donde se puede sentir los latidos cardíacos y contar cuántas pulsaciones se sienten durante 1 minuto. El cálculo también puede realizarse contando los latidos hasta 15 segundos y multiplicar el resultado por 4.
Otras opciones incluyen el uso de un dispositivo llamado oxímetro, que se coloca en el dedo y, en unos segundos, comprueba la frecuencia cardíaca, o relojes deportivos que miden los latidos del corazón. Estos productos se pueden adquirir en tiendas médicas o deportivas.
Frecuencia cardíaca alta (taquicardia)
Se considera frecuencia cardíaca alta, conocida como taquicardia, cuando supera los 100 latidos por minuto y sus principales causas son:
- Emociones fuertes;
- Ataque de pánico o ansiedad;
- Fiebre;
- Esfuerzo físico, como hacer ejercicio;
- Uso de algunos medicamentos;
- Hipertensión arterial. Vea qué hacer si la presión es alta;
- Consumo excesivo de alcohol o cafeína;
- Enfermedades cardíacas, especialmente arritmias.
El aumento de los latidos del corazón no siempre indica una situación preocupante; sin embargo, en los casos más graves, puede ser señal de un infarto, siendo común que aparezcan otros síntomas, como dolor en el pecho, indigestión, mareos y sudoración fría. Vea cuáles son los primeros síntomas de un infarto.
Además, si el aumento de los latidos del corazón es frecuente y ocurre sin motivo aparente, se recomienda acudir al cardiólogo para comprobar si hay algún problema que requiera tratamiento.
Frecuencia cardíaca baja (taquipnea)
La frecuencia cardíaca se considera baja cuando es inferior a 60 latidos por minuto, siendo más frecuente en personas que realizan mucho ejercicio físico, como deportistas, personas mayores y en caso de uso de algunos medicamentos para el corazón, por ejemplo.
Sin embargo, la frecuencia cardíaca baja, conocida como taquipnea, también puede indicar problemas cardíacos como arritmias, y se recomienda consultar a un cardiólogo para una evaluación, especialmente si se acompaña de otros síntomas como mareos, cansancio o dificultad para respirar. Conozca más sobre los principales síntomas de taquipnea y qué hacer.
Cómo normalizar la frecuencia cardíaca
Si la frecuencia cardíaca está muy alta y la persona siente el corazón muy acelerado, lo que puede intentar hacer para normalizar los latidos del corazón en aquel momento es:
- Mantenerse de pie y agacharse un poco apoyando las manos en las piernas, toser con fuerza 5 veces seguidas;
- Respirar profundo y soltar el aire lentamente por la boca, como si estuviera apagando suavemente una vela;
- Realizar un conteo regresivo de 20 a 0, tratando de calmarse.
De esta forma el ritmo cardíaco deberá disminuir un poco, pero si observa que esta taquicardia ocurre de manera frecuente, es necesario ir al médico para verificar lo que puede estar causando ese aumento y si es necesario hacer algún tratamiento.
Cuando la persona mide su frecuencia cardíaca en reposo y cree que podría estar más baja, la mejor forma de normalizarla es haciendo actividad física regularmente. Pueden ser caminatas, carreras, clases de hidrogimnasia o cualquier otra actividad que lleve al acondicionamiento físico. Vea cuál es la frecuencia cardíaca para bajar de peso.
Cuál es la frecuencia cardíaca máxima para entrenar
La frecuencia cardíaca máxima para entrenar se puede verificar calculando: 220 menos la edad de la persona. Sin embargo, la frecuencia cardíaca ideal para entrenar varía según la intensidad de la actividad física, situándose normalmente entre el 64 y el 76% del máximo para ejercicios de intensidad moderada.
Además, dependiendo de la condición física de cada persona, la frecuencia cardíaca máxima de una persona puede ser diferente a otra de su misma edad, siendo normalmente menor en deportistas, por ejemplo.
Para perder peso normalmente se debe entrenar en un rango entre el 60-75% de tu frecuencia cardíaca máxima, que varía según el sexo y la edad. Vea cuál es la frecuencia cardíaca recomendada para adelgazar.