La gasometría arterial es un análisis de sangre que evalúa el pH sanguíneo, la concentración de bicarbonato, la presión parcial de CO2 y otros parámetros sanguíneos que permiten comprobar si el intercambio gaseoso se está produciendo correctamente.
Este examen suele ser indicado por el médico a las personas que se encuentran hospitalizadas en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) o de Trauma Shock.
Además, es un examen que se puede solicitar durante la hospitalización para ayudar a diagnosticar enfermedades respiratorias, renales o infecciones graves, así como comprobar si el tratamiento está siendo efectivo o no. Por tanto, puede utilizarse como uno de los criterios que pueden influir en el alta del paciente.
Valores normales de la gasometría
Los valores normales de la gasometría arterial son:
- pH: 7.35 - 7.45.
- pO2 (presión parcial de oxígeno): 80 - 100 mmHg.
- Bicarbonato (HCO3): 22 - 26 mEq/L.
- PCO2 (presión parcial dióxido de carbono): 35 - 45 mmHg.
La gasometría arterial indica cómo está funcionando el pulmón, es decir, si el intercambio gaseoso se está realizando correctamente, indicando así el estado de la persona, que puede ser acidosis o alcalosis respiratoria o metabólica. Conozca qué significa acidosis metabólica y respiratoria, alcalosis metabólica y alcalosis respiratoria.
Cómo entender el resultado del examen
La tabla a continuación indica algunos ejemplos de valores alterados de la gasometría arterial y qué puede significar:
Este examen no es suficiente para confirmar el diagnóstico, apenas sugiere alteraciones respiratorias, renales o metabólicas, siendo normalmente solicitados por el médico otros exámenes complementarios, como rayos X, tomografía, otros análisis de sangre, exámenes de orina para que el diagnóstico pueda confirmarse y el tratamiento pueda ser iniciado de acuerdo con la causa de la alteración gasométrica.
Cómo se realiza el examen
La gasometría arterial se hacer a partir de la obtención de una muestra de sangre proveniente de la arteria del brazo o de la pierna. La forma en que se obtiene la muestra puede llegar a ser doloroso, ya que se trata de una muestra más invasiva. La sangre obtenida es llevada al laboratorio para que sean hechos los exámenes bioquímicos para verificar el pH sanguíneo, concentración de bicarbonato y presión parcial de CO2.
La gasometría arterial no debe ser realizada en caso de enfermedad arterial periférica, ya que puede haber dificultades para obtener la sangre, problemas de coagulación o si la persona estuviera con el uso de anticoagulantes. En estos casos, el médico podrá solicitar otros exámenes para identificar las enfermedades que están causando alteraciones respiratorias.
Para qué sirve
La gasometría arterial sirve para:
- Verificar la función pulmonar, principalmente en crisis de asma o bronquitis y en caso de insuficiencia respiratoria. Vea qué es la insuficiencia respiratoria;
- Ayudar a evaluar el pH y acidez de la sangre, lo que es útil para ayudar en el diagnóstico de insuficiencia renal y fibrosis cística, por ejemplo;
- Evaluar el funcionamiento del metabolismo, lo cual es importante en la identificación de enfermedades cardíacas, accidente vascular cerebral (ACV) o diabetes tipo 2, por ejemplo;
- Determinar la función de los pulmones después de procedimientos quirúrgicos o trasplantes.
Además, la gasometría también se solicita en caso de sobredosis por drogas. Las realización de este examen no es común, por lo que no es realizado en clínicas o en consultas de rutina, teniendo que ser solicitado por el médico en casos más graves.
Diferencia entre gasometría arterial y gasometría venosa
La gasometría arterial determina los valores exactos de la cantidad de oxígeno y si los riñones y pulmones están funcionando correctamente, lo que ayuda en el diagnóstico de enfermedades pulmonares, renales e infecciones.
Por otro lado, ça gasometría venosa se realiza como segunda opción cuando la obtención de sangre arterial no es posible, siendo obtenida de la vena, y tiene como principal objetivo ayudar en el diagnóstico de enfermedades arteriales periféricas o problemas de coagulación de la sangre.