Eritrocitos bajos: qué son, causas y qué hacer

Los eritrocitos bajos son una condición que puede surgir debido a sangrado excesivo causado por accidentes, cirugías o cambios en el ciclo menstrual, deficiencia de vitamina B12, agrandamiento del bazo, anemia hemolítica o alteraciones en el funcionamiento del hígado o de la médula ósea.

Debido a la reducción de la cantidad de eritrocitos circulantes, es común que surjan síntomas como cansancio excesivo, palidez, debilidad y/o falta de aire, siendo importante que el médico sea consultado para que indique la realización de un hemograma, con el objetivo de evaluar los niveles circulantes de eritrocitos y de las otras células sanguíneas.

Los eritrocitos, también conocidos como hematíes o glóbulos rojos, son células de la sangre responsables por transportar oxígeno, favorecer el transporte de dióxido de carbono y ayudar en el equilibrio del pH de la sangre. Vea más sobre los eritrocitos

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Principales causas

Las principales causas de eritrocitos bajos incluyen:

1. Sangrado excesivo

El sangrado excesivo puede estar causado por accidentes, cirugías, cambios en la coagulación sanguínea, sangrados intestinales o cambios en la menstruación, teniendo como resultado la reducción de la cantidad de eritrocitos circulantes. Asimismo, también disminuye la cantidad de hemoglobina, lo que da como resultado el surgimiento de síntomas como debilidad, cansancio excesivo y piel pálida.

Qué hacer: es importante que la persona sea referida al servicio de salud más cercano para que sean realizadas medidas para parar el sangrado y para reponer la cantidad de sangre perdida, lo que puede ser realizado por medio de una transfusión sanguínea y el uso de medicamentos.

2. Anemia hemolítica

La anemia hemolítica es un tipo de anemia en la que los propios anticuerpos atacan los eritrocitos, provocando su destrucción y, por consecuencia, reduciendo su cantidad circulante. Como resultado de esta alteración, pueden notarse síntomas como cansancio, palidez, mareos, somnolencia y falta de aire.

La anemia hemolítica puede ocurrir debido a enfermedades autoinmunes, como lupus o artritis reumatoide, o debido a infecciones o linfoma, por ejemplo. Vea otras causas de anemia hemolítica.

Qué hacer: es importante consultar al hematólogo para que sea investigada la causa de la anemia hemolítica y, de esta manera, pueda ser iniciado el tratamiento más adecuado, el cual puede implicar el uso de medicamentos corticosteroides, inmunomoduladores o inmunosupresores, y transfusión sanguínea, en ciertos casos. 

3. Deficiencia de vitamina B12

La vitamina B12 participa en la formación de las células de la sangre, razón por la que si existe una menos concentración de esta vitamina, puede haber una menor cantidad de eritrocitos siendo formados. Conozca cuáles son los síntomas de vitamina B12 baja

Qué hacer: se recomienda acudir al nutricionista para evaluar los niveles de vitamina B12 y, de esta manera, verificar la necesidad de utilizar un suplemento de vitamina B12. Asimismo, es importante consultar al gastroenterólogo para investigar la causa de la deficiencia de vitamina B12 y, de esta forma, iniciar el tratamiento más adecuado. 

4. Agrandamiento del bazo

El agrandamiento del bazo, situación conocida como esplenomegalia, puede provocar el aumento de la velocidad de destrucción de los eritrocitos, pues este órgano es el responsable por eliminar los glóbulos rojos más viejos y/o dañados. Vea más sobre las funciones del bazo.

Qué hacer: se recomienda consultar al gastroenterólogo para que sea realizada una evaluación general, confirmado el aumento de tamaño del bazo e identificada la causa, con el objetivo de que sea posible iniciar el tratamiento, en el que puede ser recomendado el uso de antibióticos, transfusión de sangre, quimioterapia o cirugía para remoción del bazo. Vea más detalles del tratamiento para el agrandamiento del bazo.

5. Alteraciones en el hígado

Una de las funciones del hígado es promover la destrucción de los eritrocitos que ya tienen más de 120 días en la circulación. Sin embargo, cuando hay alteraciones en su funcionamiento debido a la inflamación crónica de este órgano, la velocidad de destrucción de los eritrocitos puede aumentarse, de manera que puede determinarse la reducción de la cantidad de eritrocitos.

Qué hacer: es importante que sean llevados a cabo exámenes que evalúen el funcionamiento del hígado para que sea identificada la alteración y sea iniciado el mejor tratamiento, el cual es llevado a cabo bajo la orientación del hepatólogo o gastroenterólogo. Vea cuáles son los principales problemas en el hígado y qué hacer

6. Aplasia medular

La aplasia medular es una alteración en la médula ósea que tiene como consecuencia cambios en los niveles de células circulantes de la sangre, incluyendo los eritrocitos, que comienzan a ser producidos en una menor cantidad por la médula ósea. Además, también puede notarse la presencia de eritrocitos inmaduros circulantes en la sangre. Conozca más sobre la aplasia medular.

Qué hacer: el tratamiento de la aplasia medular es indicado por el hematólogo de acuerdo con la causa de la aplasia, siendo que, en los casos más graves, puede ser recomendada la realización de trasplante de médula ósea y el uso de medicamentos inmunosupresores.

Cómo saber si el nivel está bajo

Para saber si los niveles de eritrocitos están bajos, debe ser realizado un hemograma, que es el examen de sangre que evalúa las células sanguíneas y sus características. De esta forma, se considera que los eritrocitos están bajos en las siguientes condiciones:

  • Menos de 4,0 millones de eritrocitos por µL de sangre en la mujer, o de acuerdo con el valor de referencia del laboratorio;
  • Menos de 4,2 millones de eritrocitos por µL de sangre en el hombre, o de acuerdo con el valor de referencia del laboratorio.

La cantidad de los eritrocitos es evaluada por el médico en conjunto con otros parámetros del hemograma, como hemoglobina, tamaño de los eritrocitos, cantidad de hemoglobina por eritrocito y cantidad de plaquetas y de leucocitos. Conozca cómo entender el hemograma.

Calculadora del hemograma

Para evaluar si los niveles de eritrocitos están bajos, introduzca los datos del resultado de su hemograma en la siguiente calculadora:

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Mínimo admitido, el valor puede verse alterado según su laboratorio.
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Máximo admitido, el valor puede verse alterado según su laboratorio.
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