Los granitos en los brazos normalmente no son preocupantes y pueden tratarse de queratosis pilar, foliculitis, espinillas, sarpullidos o incluso una alergia en la piel.
Dependiendo de la causa, las bolitas en el brazo pueden tener diferentes características y estar acompañadas de síntomas como picazón, enrojecimiento, dolor y calor en el área, así como la presencia de pus.
La identificación correcta de la causa es importante para que se adopten los cuidados más adecuados para cada situación, lo que puede incluir el uso de cremas para la piel, medicamentos, además de procedimientos dermatológicos. Para esto, es importante que un dermatólogo sea consultado.

Qué puede causar granitos en los brazos
Si desea saber qué podrían ser las bolitas en sus brazos, por favor, responda las siguientes preguntas:
Esta herramienta es solo una orientación y, por lo tanto, no debe reemplazar la consulta con un dermatólogo, quien es el responsable de diagnosticar y recomendar el tratamiento adecuado.
5 causas de granitos en los brazos
Las principales causas de granitos en los brazos son:
1. Queratosis pilaris
Los granitos en los brazos causados por la queratosis pilaris pueden ser rojizos o blanquecinos, y se parecen a espinillas o pequeños granos de arena adheridos a la piel.
Los granitos también pueden aparecer en los muslos, glúteos y rostro, y durante el invierno pueden picar y la piel volverse más reseca. Conozca más sobre la queratosis pilar.
Qué hacer: en el caso de la queratosis pilaris, el dermatólogo debe indicar las mejores opciones de hidratante, según cada tipo de piel.
La hidratación puede ayudar a suavizar los granitos y reducir la resequedad de la piel, siendo recomendable el uso de cremas hidratantes a base de urea, ácido glicólico o ácido salicílico.
2. Foliculitis
Los granitos causados por la foliculitis aparecen cuando hay entrada de bacterias, hongos o virus en el lugar donde crecen los vellos, o cuando hay un vello encarnado.
Generalmente, son rojos, dolorosos y con pus, además de causar picazón en la zona.
El aumento de la transpiración, el uso de ropa con tejidos gruesos y ajustados también pueden favorecer su aparición. Vea más sobre la foliculitis.
Qué hacer: el tratamiento para la foliculitis debe seguir las indicaciones del dermatólogo, quien puede recomendar la aplicación de compresas, limpieza del área y, en algunos casos, el uso de antibióticos.
3. Granitos en los brazos
Las espinillas, o acné, en los brazos son similares a las espinillas que aparecen en el rostro, con pequeños bultos rojizos. Estos bultos aparecen debido a la obstrucción de los poros por el acumulamiento de grasa y células muertas.
Además de los bultos rojos en el brazo, es común que haya dolor en el área y presencia de pus.
Qué hacer: el dermatólogo puede prescribir cosméticos y medicamentos para controlar la grasa de la piel, prevenir manchas y cicatrices derivadas de las espinillas, además de antibióticos en algunos casos. Es importante no exprimir las espinillas para evitar aumentar la inflamación en la zona. Vea más detalles sobre cómo eliminar las espinillas.
4. Sudamina
La sudamina o miliaria está relacionada con la transpiración excesiva que obstruye los poros.
Junto con los bultos, pueden aparecer síntomas como picazón y malestar en la zona. Vea cómo reconocer la sudamina.
Qué hacer: se recomienda evitar el uso de ropa demasiado ajustada en la zona de los brazos afectada por la sudamina, mantener la piel seca siempre que sea posible, libre de sudor, y tomar baños o aplicar compresas frías para aliviar el malestar causado por las sudamina.
5. Alergias en los brazos
La alergia en la piel, especialmente en los brazos, es una reacción inflamatoria del cuerpo desencadenada por el contacto con sustancias irritantes, alérgenos alimentarios, picaduras de insectos, pelos de animales, colorantes o reacciones a medicamentos.
Los bultos generalmente son rojizos o blancos, y van acompañados de picazón e hinchazón. Conozca más sobre las alergias en la piel.
Qué hacer: en primer lugar, se debe identificar qué está desencadenando la alergia, para evitar el contacto directo con ello.
También puede ser necesario el uso de medicamentos antialérgicos para aliviar los síntomas, los cuales deben ser recomendados por el dermatólogo y/o alergólogo.