Haloperidol: para qué sirve, dosis y efectos secundarios

El haloperidol es un antipsicótico indicado para tratar trastornos psiquiátricos como delirios, alucinaciones y otros síntomas psicóticos en casos de esquizofrenia. También se utiliza para él tratamiento de la agitación psicomotora y puede ser eficaz en casos de hipo incontrolable, náuseas y vómitos. 

Este medicamento se puede encontrar en farmacias en diferentes presentaciones: tabletas de 5 mg y 10 mg, gotas de 2 mg/mL, solución inyectable de 5 mg/mL, o como haloperidol inyectable de 50 mg/mL bajo los nombres comerciales Haldol, Haloperil o Haldol Decanoas.

El haloperidol debe ser utilizado exclusivamente bajo prescripción médica, respetando siempre la dosis indicada por el profesional. Este medicamento se encuentra en farmacias con la presentación de la receta médica.

persona tomando un medicamento

Para qué sirve

El haloperidol sirve para aliviar trastornos como:

  • Delirios o alucinaciones en caso de esquizofrenia aguda o crónica;
  • confusión mental aguda;
  • manía o demencia;
  • agitación o agresividad en adultos mayores;
  • psicosis infantiles acompañadas de excitación psicomotora;
  • estados impulsivos y agresivos;
  • síndrome de Tourette;
  • agitación psicomotora;
  • náuseas y vómitos que no mejoran con otros medicamentos;
  • hipo incontrolable;
  • tics nerviosos.

Además, el haloperidol decanoas puede ser indicado como tratamiento de mantenimiento para personas con psicosis crónica estabilizada.

Los efectos pueden observarse después de aproximadamente 3 semanas de tratamiento.

Dosis y cómo tomar

El modo de administración del haloperidol varía según la presentación del medicamento, que puede incluir:

1. Haloperidol tabletas de 1 mg, 5 mg y 10 mg

El haloperidol en tabletas debe tomarse por vía oral con un vaso de agua, preferentemente junto con las comidas o entre ellas.

La dosis inicial recomendada para adultos varía entre 0,5 mg y 2 mg, con una frecuencia de 2 a 3 tomas diarias, según la indicación médica. Esta dosis puede ajustarse por el médico en función de la respuesta al tratamiento y los efectos secundarios

La dosis de mantenimiento suele ser de 1 a 15 mg por día, y debe ajustarse a la menor dosis efectiva, siempre siguiendo las indicaciones del médico.

En adultos mayores, las dosis de haloperidol suelen ser la mitad de las de los adultos, con una dosis máxima de 5 mg por día. El médico ajustará la dosis según el caso.

2. Haloperidol gotas 2 mg/mL

El haloperidol gotas de 2 mg/mL debe tomarse por vía oral y las gotas pueden disolverse en una pequeña cantidad de agua o jugo de frutas.

La dosis recomendada en niños es de 0,1 mg (1 gota) por cada 3 Kg de peso corporal, 2 veces al día y siempre siguiendo la indicación del pediatra.

3. Haloperidol solución inyectable 5 mg/mL

La solución inyectable de haloperidol 5 mg/mL se utiliza en centros médicos y es administrada por enfermeros mediante vía intramuscular. La dosis varía según la condición a tratar y siempre debe ser prescrita por un médico. 

Generalmente, el haloperidol inyectable se indica en casos de agitación psicomotora aguda o cuando no es posible utilizar la vía oral para la administración del medicamento.

4. Haloperidol decanoas 50 mg/mL 

El haloperidol decanoas es una solución inyectable disponible en una concentración de 50 mg/mL. Se administra por vía intramuscular, en la región glútea, una vez al mes, como parte del tratamiento para la psicosis crónica estable y se utiliza junto con otros medicamentos antipsicóticos.

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La dosis de haloperidol decanoas varía según las condiciones de salud y la gravedad de los síntomas, y debe ser determinada individualmente por un médico psiquiatra.

El efecto del medicamento comienza generalmente entre 3 y 9 días después de la primera dosis.

Posibles efectos secundarios

Los efectos secundarios más frecuentes durante el tratamiento con haloperidol son:

  • Somnolencia y dolor de cabeza;
  • mareos y alteraciones en la vista;
  • náuseas y vómitos;
  • ansiedad e inquietud;
  • insomnio o dificultad para dormir;
  • presión baja;
  • alteración del ciclo menstrual en mujeres:
  • impotencia sexual o disfunción eréctil en hombres;
  • producción de leche en el pezón, en mujeres y hombres;
  • movimientos lentos, rígidos o espásticos del cuello, rostro, ojos, boca y/o lengua.

El haloperidol puede causar efectos secundarios, tales como movimientos descontrolados en el rostro, espasmos en el cuello, dificultad para tragar, cambios rápidos en el estado de ánimo y comportamiento, aumento de la frecuencia cardíaca, sensación de vibración en el pecho, falta de aire o mareos. 

Ante cualquiera de estos síntomas, es fundamental que se comunique de inmediato con su médico.

Además, debe informar a su médico si presenta tos con expectoración, dolor en el pecho, fiebre, escalofríos, sudor excesivo, úlceras en la boca o en la piel, confusión mental o temblores.

Contraindicaciones 

El haloperidol está contraindicado en personas con enfermedad de Parkinson, en aquellas que presenten somnolencia y lentitud debido a enfermedades, medicamentos o consumo de alcohol, o en quienes tengan alergia a cualquiera de los componentes de la fórmula.

En mujeres embarazadas o en período de lactancia, su uso solo debe realizarse cuando el médico haya evaluado cuidadosamente los riesgos y beneficios para la madre y el bebé, ya que este medicamento puede pasar al bebé a través de la placenta o la leche materna.

Asimismo, este medicamento debe utilizarse con precaución en personas con riesgo de formación de coágulos sanguíneos, depresión de la médula ósea, depresión endógena, problemas hepáticos, epilepsia, hipertiroidismo o enfermedades cardíacas graves.