Harina de garbanzo: beneficios para la salud y cómo prepararla en casa

La harina de garbanzo puede ser usada como sustituto de la harina de trigo tradicional, siendo una excelente opción para utilizarse en dietas de adelgazamiento porque tiene más fibras, proteínas, vitaminas y minerales, además de tener un sabor agradable que se adapta a varias recetas. 

Esta puede utilizarse en recetas para pasteles, panes, tartas y galletas, además, puede ser fácilmente añadida en jugos naturales y batidos, proporcionando los siguientes beneficios para la salud:

  1. Mejorar la digestión, por no contener gluten y ser rica en fibras;
  2. Dar mayor sensación de saciedad y ayudar a adelgazar, gracias a que es rica en fibras y proteínas;
  3. Ayudar a controlar el colesterol y la diabetes, debido a su contenido de fibras;
  4. Ayudar a adelgazar, por tener bajo índice glucémico;
  5. Prevenir anemia, por contener ácido fólico y hierro;
  6. Prevenir calambres, por contener magnesio y fósforo;

Además de esto, el consumo de harina de garbanzo podría prevenir la osteoporosis, debido a que es rica en calcio y fósforo, nutrientes importantes para mantener la salud ósea.

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Aparte de esto, por no contener gluten, la harina de garbanzo es de fácil digestión y puede ser utilizada por personas que poseen enfermedad celíaca o intolerancia al gluten. 

Cómo elaborar harina de garbanzo en casa

Para prepararla en casa, se deben seguir los pasos mostrados a continuación:

Ingredientes

  • 500 g de garbanzos;
  • Agua mineral o filtrada.

Modo de preparación

Colocar los garbanzos en un recipiente, cubrirlos con agua y dejarlos en remojo de 8 a 12 horas. Después de este período, se debe escurrir el agua y esparcir los garbanzos sobre un paño limpio para ayudar a retirar el exceso de humedad. Luego, colocar los garbanzos en una bandeja y hornear a 180 ºC en el horno precalentado, dejándolos cocinar durante 40 minutos o hasta que estén dorados, moviéndolos ocasionalmente para que no se quemen. Retirar del horno y dejar enfriar. 

Una vez fríos, licuar los garbanzos hasta que se vuelvan harina. Luego, pasar la harina por un colador y hornear nuevamente a temperatura baja durante 15 minutos para secarla totalmente (mover cada 5 minutos). Esperar a que se enfríe y guardar en un recipiente de vidrio limpio y bien cerrado. 

Información nutricional

La siguiente tabla refleja el valor nutricional de 100 g de harina de garbanzo:

Cantidad en 100 g
Energía 340 kcals
Carbohidratos 70 g
Proteína 17 g
Grasa 5 g
Fibra 17 g
Ácido Fólico 437 mg
Fósforo 318 mg
Calcio 107 mg
Magnesio 166 mg
Hierro 6,67 mg
Potasio 1220 mg

Por no contener gluten, esta harina irrita menos al intestino de las personas sensibles o con afecciones como la enfermedad celíaca, el síndrome del intestino irritable y la enfermedad de Crohn. Conozca cuáles son los síntomas de la intolerancia al gluten

Pastel de zanahoria con harina de garbanzo

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Ingredientes

  • 1 taza de harina de garbanzo;
  • 1 taza de fécula de papa;
  • 1/2 taza de harina de avena;
  • 3 huevos;
  • 240 g de zanahoria cruda (2 zanahorias grandes);
  • 200 ml de aceite vegetal;
  • 1 1/2 taza de azúcar mascabado o demerara;
  • 1 cucharada de polvo de hornear.

Modo de Preparación:

Licuar la zanahoria, el aceite y los huevos. Luego, en un recipiente profundo, mezclar las harinas y el azúcar y verter la mezcla en la licuadora, licuar bien hasta que se forme una masa homogénea. Añadir el polvo de hornear y mezclar nuevamente.

Colocar la masa en un molde para pasteles untado con margarina y enharinado y hornear a 200 ºC en el horno precalentado, durante 30 a 40 minutos.