Qué son:
El implante dental es un procedimiento que consiste en la fijación de un tornillo en el maxilar que servirá como apoyo para la colocación de un diente, estando indicado en los casos en que la persona perdió uno o más dientes debido a caries, periodontitis o infecciones, por ejemplo.
Este procedimiento es realizado bajo anestesia local para que la incisión en la encía y la fijación en el hueso no sea percibida por la persona. Además, después del procedimiento, el dentista puede indicar el uso de medicamentos antiinflamatorios, antibióticos y analgésicos para favorecer la recuperación y disminuir el dolor que puede experimentarse.
Indicaciones del implante dental
El implante dental puede ser indicado por el dentista cuando la persona perdió uno o más dientes, o cuando se necesita una rehabilitación oral total, debido a infecciones, caries profundas, accidentes o enfermedades periodontales. De esta forma, se puede recomendar la colocación de implantes para mejorar la sonrisa, así como el autoestima de la persona.
A pesar de que muchas veces puede estar relacionada con la estética, la colocación de un implante dental puede ser importante para mejorar la masticación, habla y dolor en la articulación temporomandibular (ATM).
Cómo se realiza el procedimiento
El implante dental se realiza en el consultorio del dentista bajo anestesia local. Antes de realizar la colocación del implante, el dentista puede solicitar algunos exámenes que permiten visualizar mejor la localización de los dientes, calidad, estructura ósea y los dientes que deberán ser sustituidos.
Después de esta evaluación inicial, puede iniciarse el proceso de implante dental, en que el dentista realiza la limpieza bucal completa de la persona, aplica anestésico en la zona en que se realizará el procedimiento, hace una excisión en un diente, en caso de que haya necesidad, y realiza un corte en la encía para que sea posible tener contacto con el hueso que servirá como base para el implante. A continuación, se realiza un pequeño agujero en el hueso para aplicar correctamente el tornillo que sustentará al diente y de esta forma, sea posible el éxito del implante.
En el implante dental tradicional, el encaje y adaptación del diente en el implante llevará en promedio 6 meses para los dientes de arriba y 4 meses para los de abajo. Después del procedimiento, el médico indicará analgésicos y reposo, que podrá ser de 24 horas y en el que es importante evitar la realización de esfuerzo y realizar actividad física en la primera semana. Además, es importante que después del procedimiento la persona tenga una alimentación leve y realice la limpieza bucal normal.
Implantes de carga inmediata
El implante dental de carga inmediata ocurre cuando se coloca el diente en la estructura metálica poco después del acto quirúrgico. En la técnica de implante dental tradicional, sólo después de 3 o 6 meses de la fijación de la estructura es que se colocan los dientes sustitutos. Este tiempo es necesario para que haya una mayor fijación de la prótesis al hueso, pudiendo así colocarse la corona del diente.
En la técnica de implante dental de carga inmediata el proceso es más rápido y estéticamente cómodo para el paciente, sin embargo, esta técnica tiene restricciones, principalmente relacionadas con la localización del implante, estado de salud del paciente, y el estado en que se encuentra el hueso que recibirá el implante.
Contraindicaciones de los implantes dentales
La colocación de un implante dental está contraindicado en niños y jóvenes que están en fase de crecimiento óseo y en personas que están bajo tratamiento con medicamentos para la osteoporosis, enfermedad de Paget o que están en quimioterapia. En esos casos, lo más adecuado es que se utilice una dentadura en lugar de un implante.
Además, la colocación de un implante dental no se recomienda en personas con problemas cardíacos de alto riesgo y diabetes no tratada, debido al riesgo de infección y posibles complicaciones.