La insulina es una hormona producida naturalmente por el páncreas, principalmente después de las comidas, y es responsable de transportar la glucosa de la sangre al interior de las células, para que sea utilizada como fuente de energía.
Cuando la producción de insulina es insuficiente o está ausente, el azúcar no puede ser llevado al interior de las células y, por lo tanto, termina acumulándose en la sangre y en el resto del organismo, provocando diabetes.
Lea también: Síntomas de diabetes (tipo 1, tipo 2 y gestacional) tuasaude.com/es/sintomas-de-diabetesEs importante consultar a un endocrinólogo si se sospecha de cualquier alteración relacionada con los niveles de insulina, ya que de esta forma es posible identificar si hay algún problema relacionado con la producción de insulina y, así, indicar el tratamiento más adecuado.
Para qué sirve la insulina
La insulina sirve para:
- Disminuir la cantidad de azúcar circulante en la sangre;
- Permitir que la glucosa entre en las células para ser utilizada como fuente de energía;
- Promover el almacenamiento de glucosa en el hígado, los músculos y el tejido adiposo;
- Regular el metabolismo de los carbohidratos, grasas y proteínas.
Además, al mismo tiempo que la insulina actúa promoviendo la disminución de la cantidad de azúcar circulante, aumenta la producción de otra hormona, el glucagón, que actúa aumentando la glucosa en la sangre, por ejemplo, en situaciones de ayuno.
La acción de estas dos hormonas, insulina y glucagón, es muy importante para equilibrar la cantidad de glucosa en la sangre, evitando que haya un exceso o una deficiencia, ya que ambas situaciones causan complicaciones en el organismo.
Lea también: Glucagón: qué es, función y cuándo es indicado tuasaude.com/es/glucagonTipos de insulina y cuándo usar
La insulina puede ser sintetizada para "imitar" la acción de la insulina producida naturalmente en el cuerpo cuando su producción es insuficiente o reducida.
Así, dependiendo del tiempo que tarda en comenzar su efecto y de la duración de su acción, la insulina sintética se clasifica en diferentes tipos, siendo los principales:
Además, existen presentaciones que combinan diferentes tipos de insulina para permitir un mejor control de los niveles de glucosa en sangre. Vea otros tipos de insulina sintética. Conozca más sobre cuáles son los tipos de insulina y cómo usarlas.
Cuándo es necesario tomar insulina
Es necesario utilizar insulina sintética en las siguientes situaciones:
- Diabetes tipo 1, en todos los casos, ya que no hay producción suficiente de insulina por parte del páncreas;
- Diabetes tipo 2, cuando el uso de antidiabéticos orales o una dieta adecuada no controlan los niveles de azúcar en la sangre;
- Diabetes gestacional, cuando no se tiene un control adecuado de la glucemia solo con la dieta;
- Cetoacidosis diabética o hiperglucemia hiperosmolar, que son complicaciones de la diabetes no controlada;
- Hiperglucemia relacionada con el estrés, en personas no diabéticas en estado crítico, como internadas en la UCI o con traumatismos graves;
- Niveles altos de potasio en la sangre (hipercalemia) en personas con enfermedad renal en etapa terminal.
Es importante que la insulina sea indicada por el endocrinólogo y que se siga el esquema prescrito por el médico, el cual puede depender de la condición de salud de la persona. Entiende mejor cuándo es necesario iniciar el uso de insulina.
Cómo y dónde se aplican
Las insulinas inyectables son aplicadas en el tejido graso debajo de la piel con la ayuda de una jeringa o plumas especiales para este fin en el abdomen, brazos o muslos. Vea cómo aplicar una inyección subcutánea de forma correcta.
Además, otra opción es el uso de una bomba de insulina, que es un pequeño dispositivo que se adhiere al cuerpo y se puede programar para administrar tanto la insulina basal como la insulina en bolo, según las necesidades de cada persona.
Lea también: Bomba de insulina: para qué sirve, cómo funciona y cuándo se indica tuasaude.com/es/bomba-de-insulina