La isquemia cardíaca es la disminución del flujo de sangre rica en oxígeno hacia el músculo cardíaco (miocardio), lo que resulta en síntomas como dolor y sensación de ardor en el pecho, palpitaciones, falta de aire y una sensación general de malestar.
La isquemia cardíaca, también conocida como enfermedad cardíaca isquémica o enfermedad arterial coronaria, generalmente es causada por la presencia de placas de grasa en el interior de las arterias coronarias. Cuando estas placas no son tratadas adecuadamente, pueden romperse y obstruir el vaso, aumentando el riesgo de infarto.
El tratamiento de la isquemia miocárdica lo realiza el cardiólogo con medicamentos para mejorar el flujo sanguíneo hacia el corazón, además del control del colesterol y la sal en la alimentación y la realización de actividad física.
Principales síntomas
Los síntomas de una isquemia cardíaca pueden ser:
- Dolor o ardor en el pecho que se puede irradiar a la nuca, barbilla, hombros o brazos;
- Palpitaciones cardíacas;
- Presión en el pecho;
- Falta de aire o dificultad para respirar;
- Mareos, sudoración fría, palidez y malestar.
Sin embargo, la isquemia cardíaca puede no generar síntomas, siendo descubierta en una examen de rutina o cuando se genera un ataque cardíaco. Vea cuáles son los 12 signos y síntomas que pueden indicar problemas en el corazón.
Qué puede causar una cardiopatía isquémica
La isquemia cardíaca puede causar bloqueo total de las arterias coronarias o su ruptura, comprometiendo el flujo de sangre, oxígeno y nutrientes hacia el músculo cardíaco, lo que puede resultar en un infarto o arritmias graves.
Cuando el músculo cardíaco no recibe un suministro adecuado de sangre, su capacidad para bombear sangre al cuerpo se reduce, lo que provoca los síntomas.
Cómo se realiza el diagnóstico
El diagnóstico de la isquemia miocárdica es realizado por el cardiólogo a partir de la evaluación de los síntomas, el historial de salud y de enfermedades cardiovasculares, el examen físico, y pruebas de laboratorio e imagen.
Así, el médico puede solicitar exámenes de colesterol, triglicéridos, glucemia y dosificación de las enzimas cardíacas, entre otros. Conozca qué exámenes se solicitan para evaluar el corazón.
Además, el médico puede pedir exámenes como electrocardiograma, prueba de esfuerzo, ecocardiograma, gammagrafía miocárdica o cateterismo cardíaco para confirmar la presencia de isquemia cardíaca.
Lea también: Cateterismo cardíaco: qué es, cómo se hace y cuidados tuasaude.com/es/cateterismo-cardiacoPosibles causas
Las principales causas de isquemia cardíaca son:
- Aterosclerosis;
- Espasmos en las arterias coronarias;
- Embolia coronaria;
- Traumatismos en el corazón;
- Estenosis aórtica.
Sin embargo, otras enfermedades pueden llevar a la isquemia cardíaca, como lupus, diabetes, sífilis, apnea obstructiva del sueño, hipertiroidismo severo y el uso de drogas como cocaína y anfetaminas.
Además, algunos factores pueden aumentar el riesgo de isquemia cardíaca, como colesterol y triglicéridos elevados, presión arterial alta no controlada, sedentarismo, hábito de fumar, obesidad o grasa visceral.
Tipos de cardiopatía isquémica
La obstrucción del flujo sanguíneo por las arterias coronarias pueden ocurrir de formas diferentes:
1.Angina estable
Es un tipo de isquemia crónica, pero transitoria, porque el dolor en el pecho surge cuando la persona hace algún esfuerzo, sufre algún estrés emocional o después de comer, mejorando en pocos minutos o cuando se mantiene de reposo.
Sin embargo, si no se trata, puede convertirse en un infarto en el futuro. Vea más sobre la angina de pecho.
2. Angina inestable
La angina inestable también es un tipo de isquemia crónica, pero el dolor en el pecho puede surgir en cualquier momento, dura más de 20 minutos, no mejora con el descanso, y, si no se trata rápidamente, evolucionará a un infarto.
3. Infarto agudo de miocardio
El infarto puede ocurrir tras la transformación de la angina, o puede ser repentino, surgiendo sin previo aviso. Se caracteriza por un dolor o ardor en el pecho, intenso, que no mejora, y debe ser tratado lo más pronto posible en el hospital. Vea cómo identificar un infarto.
4. Isquemia silenciosa
Es la disminución del paso de sangre en las arterias coronarias que no causa síntomas, siendo muchas veces descubierta en exámenes de rutina, y elevan el riesgo de causar un infarto o un paro cardiaco súbito.
Estos tipos de isquemia compromete la salud del corazón, por esto, deben ser diagnosticados y tratados a la brevedad posible, ya sea con una revisión médica anual o acudiendo a un médico general o cardiólogo siempre que surgen síntomas como dolor o ardor en el pecho.
Cómo se realiza el tratamiento
Los principales tratamientos para la cardiopatía a isquémica son:
1. Uso de medicamentos
El uso de medicamentos para la isquemia cardíaca varía según la gravedad de la isquemia, los síntomas o si es aguda o crónica. Los principales incluyen:
- Antiagregantes plaquetarios, como el ácido acetilsalicílico
- Nitratos, como la nitroglicerina
- Beta-bloqueadores, como atenolol, bisoprolol, metoprolol o nebivolol
- Bloqueadores de los canales de calcio, como verapamilo o diltiazem
- Estatinas, como simvastatina, atorvastatina o rosuvastatina
- Vasodilatadores, como isosorbida
Estos medicamentos deben ser usados bajo la indicación del cardiólogo, pudiendo también indicarse ranolazina en combinación con otros medicamentos para el tratamiento de la angina crónica.
Además, es importante controlar enfermedades como colesterol alto, presión alta, diabetes o apnea del sueño, ya que pueden aumentar el riesgo de isquemia cardíaca.
2. Cambios en el estilo de vida
Cambios en el estilo de vida, como seguir una dieta saludable y nutritiva y practicar actividades físicas recomendadas por el médico, pueden ayudar a reducir el colesterol y controlar la diabetes o la presión alta, disminuyendo el riesgo de isquemia cardíaca y sus complicaciones.
Además, es fundamental reducir la ingesta de bebidas alcohólicas, azúcares y alimentos grasos o procesados, dejar de fumar y reducir el estrés.
3. Cirugía
En los casos más graves, cuando el uso de medicamentos no es suficiente, el cardiólogo puede recomendar una cirugía, como la angioplastia con o sin la colocación de un stent, o la cirugía de revascularización del miocardio, que implica la sustitución de una arteria coronaria por una vena safena, por ejemplo. Entienda cómo se realiza la cirugía de bypass coronario.
¿La isquemia cardíaca tiene cura?
La isquemia cardíaca no tiene una cura definitiva, pero los síntomas pueden ser controlados con el tratamiento indicado por el cardiólogo.
Además, el tratamiento permite mejorar la calidad de vida y evitar complicaciones de la isquemia cardíaca.
Posibles complicaciones
La isquemia cardíaca puede causar complicaciones como infarto agudo de miocardio, arritmias cardíacas o insuficiencia cardíaca.
Por ello, es importante buscar atención médica de inmediato si se presentan síntomas de isquemia cardíaca, además de realizar un seguimiento regular con el cardiólogo, especialmente en personas con angina o factores de riesgo para isquemia cardíaca.