Lipoma: qué es, síntomas y tratamiento

Qué es:

El lipoma es un tumor benigno formado por células grasas que puede aparecer en cualquier parte del cuerpo, siendo más frecuente en hombros, tórax, espalda, cuello, muslo y axilas. En algunos casos también pueden surgir en órganos internos, huesos o músculos.

Muchas veces el lipoma es confundido con un quiste sebáceo, no obstante se diferencian en su composición, pues el lipoma se compone de células adiposas y el quiste sebáceo se compone de una sustancia llamada sebo. Vea cómo identificar un quiste sebáceo. 

Generalmente, no es necesario ningún tratamiento, pero si la persona tiene preocupaciones sobre la estética, o si el lipoma se vuelve doloroso o crece demasiado rápido, el dermatólogo puede recomendar la cirugía.

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Foto de un lipoma en la espalda

Síntomas de un lipoma

Los signos y síntomas del lipoma son:

  • Lesión redonda que surge debajo de la piel, principalmente en el cuello, espalda, hombros y abdomen;
  • No suelen causar dolor pero, en algunos casos, pueden causar incomodidad o dolor al tocarlos;
  • El bulto tiene consistencia firme, elástica o suave;
  • Pequeño tamaño, alrededor de 5 cm, sin embargo, su tamaño puede variar desde 1/2 cm hasta 10 cm de diámetro, siendo este último el tamaño característico de un lipoma gigante. 

Los lipomas van creciendo progresivamente a lo largo de los años y sin causar ningún malestar por mucho tiempo. No obstante, los de mayor tamaño pueden comprimir u obstruir algún tejido cercano y ocasionar síntomas como dolor en la región y signos de inflamación, como enrojecimiento o aumento de la temperatura.

¿El lipoma puede ser maligno?

El lipoma es un tumor graso ubicado justo debajo de la piel y generalmente es inofensivo. No obstante, en casos muy raros, puede transformarse en un liposarcoma, el cual es un tumor canceroso que se inicia en el tejido graso del organismo y que se puede extender fácilmente hacia la piel o los músculos, ocasionando síntomas como dolor e hinchazón de la región afectada, surgiendo principalmente en brazos, piernas y abdomen.

Principales causas

Se desconoce la causa exacta del lipoma y puede presentarse en hombres y mujeres, a cualquier edad, pero es más común entre los 40 y 60 años, siendo raro en niños, debiendo ser evaluado por un dermatólogo. Sin embargo, algunos factores pueden contribuir a la aparición del lipoma, como por ejemplo:

  • Antecedentes de lipoma en la familia;
  • Síndrome de Gardner;
  • Síndrome de Cowden;
  • Enfermedad de Madelung.

Además, otra condición que puede causar lipoma es la lipomatosis familiar múltiple, en la que la persona tiene múltiples quistes, que suelen ser más grandes y dolorosos. 

Cómo se realiza el diagnóstico

El lipoma debe ser diagnosticado por el médico a través de la observación de sus características pero, para asegurarse de que es un tumor benigno, el médico podrá solicitar exámenes como una radiografía o una ecografía, pero la tomografía computarizada puede generar una mejor imagen del tamaño, densidad y la forma del tumor.

Además, el médico puede indicar la realización de una biopsia, en caso lo considere necesario, retirando la muestra durante la cirugía y enviándolo al laboratorio para su posterior evaluación. Vea en qué consiste la biopsia y cómo se realiza. 

Cómo se realiza el tratamiento

Por lo general, los lipomas no requieren tratamiento, sin embargo, el dermatólogo, en los casos que lo considere necesario, puede indicar la extirpación del lipoma, siendo recomendado cuando es muy grande y no es estético visualmente o porque causa dolor. La extirpación se puede realizar a través de una cirugía o de una liposucción, como se indica a continuación:

1. Cirugía

La cirugía para extirpar el lipoma consiste en realizar un pequeño corte en la piel, generalmente bajo anestesia local, a menos que sea muy grande y sea necesario el uso de anestesia general, y se procede a retirar la grasa allí acumulada.

La cirugía es segura y bastante efectiva, por lo que raramente vuelve a surgir. Además, la persona regresa a casa el mismo día y la recuperación suele ser rápida.

Durante el posquirúrgico es posible que el médico indique el uso de analgésicos, como el paracetamol, por ejemplo, para aliviar el malestar y el dolor. Además, también puede indicar el uso de cremas para ayudar a mejorar la cicatrización de la piel y evitar las marcas. Vea algunas cremas cicatrizantes.

2. Liposucción

Los lipomas también se pueden eliminar mediante liposucción, lo que podría ser más beneficioso si el lipoma se encuentra en un área donde se desea evitar la cicatrización. Este procedimiento se realiza a través de la inserción de una aguja y, mediante el uso de una jeringa, se aspira el exceso de grasa de la región, la cual suele estar anestesiada de forma local.

La liposucción es una cirugía efectiva, que trae menos riesgos para la persona y la recuperación es bastante rápida. No obstante, el riesgo de que vuelva a surgir es un poco más elevado que la extracción a nivel quirúrgico.