Qués es:
La lipotransferencia es una técnica quirúrgica plástica en que se utiliza la grasa del propio cuerpo para llenar, definir o dar volumen a ciertas partes del cuerpo, como los senos, glúteos, alrededor de los ojos, mentón o muslos, por ejemplo.
Para realizar esta técnica es necesario extraer grasa de otras zonas del cuerpo en que se encuentra en exceso, como la barriga, espalda o muslos, por ejemplo. Para ello, se realiza la lipotransferencia, que remueve la grasa localizada de zonas indeseadas y también ayuda a esculpir, afinar y definir la zona en que se realiza.
Además de la lipotransferencia, que ayuda a dar volumen a ciertas áreas del cuerpo, un procedimiento semejante y muy solicitado es la lipoescultura, que utiliza la grasa localizada para redistribuirla a lo largo del contorno del cuerpo, creando una silueta más armónica y estéticamente proporcional. Conozca más sobre qué es la lipoescultura y cómo se realiza.
Usar el injerto de la propia grasa es una estrategia realizada por el cirujano plástico, en hospitales y su precio varia de acuerdo al tipo de cirugía, zona en que se realiza y el equipo médico que hará el procedimiento.
Para qué sirve
La lipotransferencia está indicada en personas que desean mejorar la apariencia de alguna parte de su cuerpo. Algunas de las principales indicaciones son:
1. En los senos
El injerto de la propia grasa en los senos puede hacerse para aumentar el volumen o suavizar el aspecto de la prótesis de silicón, dando un aspecto más natural, o para corregir pequeños defectos y asimetrías.
Vea más sobre otra cirugía plástica que combate la flacidez de los senos.
2. En los glúteos
Esta técnica también está indicada para aumentar el tamaño de los glúteos, corregir asimetrías, diferencias en los tamaños o defectos de los glúteos. También se puede extender en los muslos para dar mayor definición y volumen.
3. En el rostro
Utilizada para atenuar arrugas o líneas de expresión del rostro, como en el caso del surco nasogeniano o para restaurar el volumen facial o de las mejillas.
Además, la lipotransferencia puede hacerse en cualquier parte del cuerpo, pudiendo usarse incluso para aumentar o definir los labios vaginales.
Cómo se realiza la lipotransferencia
El uso de la propia grasa corporal debe hacerse por un cirujano plástico, el cual seleccionará el área y aspirará la grasa de ciertas partes del cuerpo, como muslos o barriga, por ejemplo, a través de una lipoaspiración.
Después, la grasa es obtenida y purificada con la intención de remover la sangre y otros restos celulares. Cuando la grasa está lista, será injertada en la zona pretendida, utilizando agujas finas, por medio de micro inyecciones.
La lipotransferencia se realiza bajo anestesia local, con o sin sedación, no causando dolor ni malestar. Generalmente, solo es necesaria la hospitalización por algunas horas, hasta un máximo de 2 a 3 días.
Cómo es la recuperación y cicatrización
La recuperación de la lipotransferencia es bastante rápida, siendo común que surjan síntomas como dolor ligero, malestar, hinchazón o hematoma. Estos síntomas desaparecen generalmente al final de 3 o 4 semanas, siendo recomendado reposar y evitar esfuerzos en el primer mes de recuperación.
Los primeros 3 días de recuperación pueden ser los más dolorosos, y en estos casos, el médico puede indicar la toma de medicamentos analgésicos para aliviar el dolor y malestar.