El lisinopril es un medicamento que pertenece al grupo de los inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (ECA), el cual actúa promoviendo la relajación de los vasos sanguíneos, por lo que sirve para tratar la hipertensión arterial, la insuficiencia cardíaca y el infarto de miocardio.
Este medicamento puede ser adquirido en farmacias convencionales en su forma genérica como "lisinopril dihidrato", o bajo los nombres comerciales de Dosteril, Zestril, Lisipril, Prinivil, entre otros.
El lisinopril está disponible en forma de comprimidos de 5 mg, 10 mg y 20 mg, y solo debe utilizarse en adultos y en niños mayores de 6 años de edad, bajo las indicaciones del médico general o el cardiólogo.
Para qué sirve
El lisinopril está indicado para tratar las siguientes condiciones en adultos:
- Hipertensión arterial;
- Insuficiencia cardíaca congestiva;
- Infarto agudo de miocardio.
Asimismo, el lisinopril también puede utilizarse para el tratamiento de alteraciones renales y de la retina en personas con diabetes mellitus.
Este medicamento puede ser utilizado para tratar la hipertensión arterial en niños mayores de 6 años de edad, siempre bajo la indicación del pediatra o cardiólogo.
En qué dosis tomar
El lisinopril debe tomarse vía oral, siempre en el mismo horario, con o sin alimentos, y la dosis debe ser indicada por el médico, pues puede variar de acuerdo con la condición a tratar, de la siguiente forma:
1. Hipertensión arterial
La dosis inicial en adultos con hipertensión es de 10 mg, una vez al día. Luego, el médico puede indicar una dosis de mantenimiento de 20 mg diarios.
Aquellas personas que estén bajo tratamiento con medicamentos diuréticos, el médico puede suspender el uso de los mismos 2 o 3 días antes de iniciar el uso del lisinopril, esto con el objetivo de evitar cuadros de hipotensión. No obstante, en aquellos pacientes que no pueden dejar de tomar diuréticos, la dosis inicial es de 5 mg diarios, y luego el médico debe ajustar la dosis de acuerdo con la respuesta de la presión arterial al tratamiento.
En personas con insuficiencia renal, la dosis de lisinopril debe ser indicada por el médico y va a depender de los niveles de aclaramiento de creatinina, siendo que la dosis máxima es de 40 mg por día.
Pacientes con hipertensión renovascular, también llamada estenosis arterial renal, pueden generar una respuesta exagerada al lisinopril, por lo cual la dosis inicial indicada por el médico es de 2,5 a 5 mg diarios, que luego puede ajustarse según la respuesta al tratamiento.
Para tratar la hipertensión arterial en niños de 6 a 16 años de edad, la dosis inicial indicada por el cardiólogo va a depender del peso. De esta forma, en niños que pesen de 20 a 50 kg, la dosis es de 2,5 mg, una vez al día, y en niños que pesen más de 50 kg, la dosis inicial es de 5 mg, una vez al día. Posteriormente, la dosis debe ser ajustada hasta un máximo de 20 mg diarios en pacientes que pesen entre 20 a 50 kg, y 40 mg diarios en pacientes que pesen más de 50 kg.
2. Insuficiencia cardíaca congestiva
La dosis inicial de lisinopril en adultos con insuficiencia cardíaca congestiva es de 2,5 mg diarios. El médico puede aumentar la dosis del medicamento en intervalos mínimos de 2 semanas, a una dosis máxima de 35 mg, una vez al día, de acuerdo con la respuesta de cada paciente al tratamiento.
3. Infarto agudo de miocardio
El tratamiento debe ser iniciado en las primeras 24 horas luego del inicio de los síntomas, siendo que la dosis inicial de lisinopril en adultos es de 5 mg, luego 5 mg a las 24 horas, 10 mg a las 48 horas y después 10 mg una vez al día. En aquellos pacientes con presión arterial baja (igual o menor de 120 mmHg), la dosis inicial durante los primeros 3 días posteriores al infarto es de 2,5 mg.
La dosis de mantenimiento es de 10 mg, una vez al día. En casos de hipotensión, la dosis diaria de manteniendo es de 5 mg. El tratamiento debe mantenerse al menos 6 semanas, hasta que el médico realice una evaluación.
4. Complicaciones renales y de retina de la diabetes mellitus
Tanto en adultos diabéticos dependientes de insulina con la presión arterial normal como en adultos hipertensos y diabéticos no dependientes de insulina, la dosis es de 10 mg de lisinopril al día. Posteriormente, esta dosis puede ser aumentada por el médico a 20 mg diarios.
Efectos secundarios
Los efectos secundarios más frecuentes que pueden surgir en personas que están bajo tratamiento con lisinopril incluyen mareos, dolor de cabeza, tos, fatiga, diarrea, vómitos y problemas renales. Asimismo, otros efectos colaterales menos frecuentes incluyen hipotension ortostática y erupciones cutáneas.
Contraindicaciones
El lisinopril está contraindicado en personas alérgicas al lisinopril o a cualquier otro componente de la fórmula y en aquellas con antecedentes de reacciones alérgicas o angioedema asociados a otros medicamentos inhibidores de la ECA. Vea qué es el angioedema y cómo es el tratamiento.
Asimismo, también debe ser evitado en personas con angioedema hereditario o idiopático y en aquellas que están bajo tratamiento con sacubitrilo y valsartán.
El uso de lisinopril junto con medicamentos con aliskiren debe ser evitado en personas con diabetes mellitus o insuficiencia renal.
El lisinopril no debe utilizarse en el segundo ni en el tercer trimestre de gestación y solo debe ser empleado por mujeres embarazadas y en período de lactancia bajo la indicación del médico.