Manchas blancas en el rostro: 6 causas (y qué hacer)

Las manchas blancas en el rostro pueden aparecer debido a cambios normales asociados al envejecimiento de la piel o a la exposición frecuente al sol, sin que necesariamente representen un problema. Sin embargo, en algunos casos, estas manchas pueden ser indicativas de afecciones como el vitíligo o la pitiriasis alba, o ser provocadas por el contacto con productos químicos.

En general, las manchas blancas son resultado de alteraciones en la función de los melanocitos, las células encargadas de producir melanina, que es responsable de darle color a la piel. Estas células pueden ser destruidas o producir menos melanina en casos de enfermedades, exposición a productos tóxicos o debido al envejecimiento, entre otras causas.

Por lo tanto, si se observa una o más manchas blancas en el rostro, se recomienda consultar a un dermatólogo para una evaluación adecuada, de manera que se pueda identificar la causa y, si es necesario, iniciar el tratamiento más apropiado.

Principales causas

Las principales causas de las manchas blancas en el rostro son

1. Envejecimiento

La disminución del número de melanocitos y de la producción de melanina es un fenómeno común asociado al envejecimiento, lo que provoca la aparición de manchas blancas en el rostro. Estas manchas pueden aparecer primero en el rostro y luego extenderse a otras partes del cuerpo, especialmente en los brazos.

Qué hacer: en estos casos, no es necesario tratamiento, ya que se consideran cambios normales del envejecimiento.

Sin embargo, es recomendable consultar a un dermatólogo para que evalúe las manchas. Aunque el tratamiento no sea imprescindible, el uso de protector solar suele ser aconsejado, y en algunos casos se pueden prescribir pomadas con corticoides para reducir las manchas y mejorar el aspecto de la piel.

2. Exposición frecuente al sol

La exposición frecuente al sol también puede estar relacionada con la aparición de manchas blancas en el rostro a lo largo del tiempo, aunque generalmente afectan más a los brazos. Se cree que estas manchas son causadas por una ligera inflamación que la luz solar puede provocar en la piel.

Qué hacer: las manchas blancas en el rostro y los brazos causadas por la exposición frecuente al sol generalmente no requieren tratamiento, aunque tienden a aumentar en número si la exposición continúa. Sin embargo, el uso de protector solar puede ser útil para evitar que las manchas se hagan más evidentes en la piel.

Además, se recomienda consultar a un dermatólogo para que pueda indicar tratamientos que mejoren el aspecto de la piel, como la aplicación de pomadas con corticoides y retinoides. Vea para qué sirven las pomadas con corticoides y cuándo utilizarlas.

3. Productos químicos

La exposición a ciertos productos químicos, como fenoles o hidroquinona, en profesiones relacionadas con la producción de goma o cuero, por ejemplo, así como algunos ácidos utilizados en peelings químicos, puede provocar manchas blancas en el rostro o en otras partes del cuerpo, dependiendo de la zona expuesta.

Esto ocurre debido a la destrucción de los melanocitos en la piel o a la alteración de la producción de melanina causada por estos productos.

Qué hacer: es fundamental evitar el contacto directo con productos químicos utilizando el equipo de protección adecuado. Además, se debe evitar el uso inapropiado y sin supervisión médica de ácidos y de hidroquinona. Conozca qué es y para qué sirve la hidroquinona.

Si sospechas que las manchas blancas son causadas por productos químicos, se recomienda consultar a un dermatólogo para una evaluación y para iniciar el tratamiento adecuado, que puede incluir corticoides orales o en forma de pomadas.

4. Deficiencias nutricionales

La desnutrición y la deficiencia de nutrientes como hierro, cobre o vitamina B12 pueden causar manchas blancas en el rostro y en otras partes del cuerpo.

Generalmente, estos casos también pueden ir acompañados de anemia y síntomas como debilidad, hormigueo en el cuerpo, así como uñas y cabello quebradizos, dependiendo del tipo de deficiencia nutricional.

Qué hacer: es fundamental mantener una alimentación equilibrada y de calidad para prevenir la falta de nutrientes. 

Sin embargo, si sospechas de una deficiencia nutricional, es importante consultar a un médico general para una evaluación. En caso de que se identifique una deficiencia nutricional, se puede recomendar la reposición de nutrientes como hierro y vitamina B12, y el seguimiento con un nutricionista puede ser aconsejado.

5. Pitiriasis alba

La pitiriasis alba es una alteración cutánea que provoca la aparición de manchas blancas, generalmente en el rostro, debido a una ligera inflamación. Sin embargo, otras partes del cuerpo, como los brazos y el tronco, también pueden verse afectadas, y las manchas tienden a ser enrojecidas al principio. Vea cómo identificar la pitiriasis alba y cómo confirmar el diagnóstico.

Qué hacer: la mancha blanca causada por la pitiriasis alba suele desaparecer sin tratamiento específico en un plazo de hasta un año. Se recomienda el uso de protector solar para evitar que la mancha se vuelva más visible en la piel. Además, el uso de cremas hidratantes puede ayudar a reducir la descamación de la piel en la zona afectada.

También es aconsejable consultar a un dermatólogo, especialmente si la mancha presenta enrojecimiento y picazón, ya que puede ser necesaria la aplicación de pomadas con corticoides para aliviar los síntomas y acelerar la repigmentación de la piel.

6. Vitiligo

El vitiligo puede causar manchas blancas en el rostro, generalmente alrededor de la boca o los ojos, así como en otras partes del cuerpo, como el cuello, las manos y el tronco, debido a la ausencia de melanocitos en la piel. Vea cómo identificar los síntomas del vitíligo.

Estas manchas pueden cambiar de tamaño con el tiempo y no están asociadas a otros síntomas.

Qué hacer: si sospechas que padece vitiligo, es fundamental consultar a un dermatólogo para una evaluación y para iniciar el tratamiento adecuado. Este puede incluir fototerapia y el uso de corticoides orales, que pueden ayudar a prevenir el avance de la enfermedad e incluso recuperar la pigmentación de la piel en algunos casos.