Medicamentos para el COVID: en casa y en el hospital

Evidencia científica

Los medicamentos aprobados para la COVID-19 por el Departamento de Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU (FDA, por sus siglas en inglés), como el Paxlovid, el Evusheld y el Remdesivir, impiden la replicación del virus y/o su entrada en las células, evitando la infección o el desarrollo de casos graves de la COVID-19. Sin embargo, este tipo de medicamentos deben ser utilizado solo en el hospital y bajo la indicación del médico, debido a que su uso varía según el estado general de salud de la persona y de la gravedad de la enfermedad, pudiendo también ocasionar efectos secundarios a los que se debe estar atento.

Además, también existen otros medicamentos que se encuentran aprobados, como los analgésicos y los antipiréticos, que no combaten el virus pero pueden ser usados en casa para aliviar los síntomas de la COVID-19, como la fiebre, el cansancio o el dolor de garganta. 

Los casos más leves de COVID-19 pueden ser tratados en casa con reposo, hidratación y el uso de medicamentos para la fiebre y analgésico. En los casos más graves, con síntomas más intensos y complicaciones como neumonía, deben ser tratados en el hospital, pudiendo ser necesario el uso de los medicamentos aprobados por la FDA para eliminar el virus. Es importante recalcar, que estos medicamentos aprobados pueden variar según el Ministerio de Salud de cada país de América Latina. Conozca más detalles sobre el tratamiento para la COVID-19.

Imagem ilustrativa número 1

Medicamentos para usar en casa

Los medicamentos que son utilizados para aliviar los síntomas del COVID-19 en casa son:

  • Antipiréticos (paracetamol): para disminuir la temperatura y combatir la fiebre;
  • Analgésicos (paracetamol e ibuprofeno): para aliviar los dolores musculares;
  • Antibióticos: para tratar posibles infecciones bacterianas que puedan surgir junto con el COVID-19.

Aunque estén aprobados, estos medicamentos sólo deben ser utilizados bajo orientación médica.

Medicamentos de uso hospitalario

Los medicamentos que se encuentran aprobados para el tratamiento del COVID por el Departamento de Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. (FDA, por sus siglas en inglés) son: 

1. Remdesivir

El remdesivir es un medicamento antiviral de uso hospitalario que es colocado por vía intravenosa y es capaz de impedir la replicación del virus, evitando así el desarrollo de la enfermedad. El uso de este medicamento es indicado en personas positivas para SARS-CoV-2 a partir de los 12 años y por lo menos 40 Kg que presentan neumonía y que están haciendo o no oxigenoterapia, desde que no se encuentren bajo ventilación mecánica y de que presenten mayor riesgo de padecer COVID-19 grave. 

Efectos secundarios: los efectos más comunes son el aumento o disminución de la presión arterial, alteración de los latidos cardíacos, fiebre, dificultad para respirar, sibilancias, náuseas, vómitos, heridas en la piel y escalofríos, además de alteraciones en el hígado y en los riñones. Por esto, es fundamental que el remdesivir sea aplicado en el hospital, de manera que la persona sea monitorizada, previniendo así o controlando estos posibles efectos.  

2. Baricitinib

El baricitinib es un medicamento que reduce la respuesta del sistema inmune, disminuyendo la inflamación provocada por la COVID-19. Esta aprobado para uso en adultos hospitalizados que necesitan recibir oxígeno a través de una mascarilla, cateter nasal o una cánula de alto flujo.

De manera general, el uso de este medicamento está indicado si la persona empeora o cuando no existe mejoría después de haber iniciado el tratamiento con corticosteroides, que pueden ser asociados al Remdesivir.

Efectos secundarios: el baricitinib puede causar alteraciones en el hígado, aumento del riesgo de infecciones urinarias, embolia pulmonar, trombosis venosa profunda y alteraciones en las células sanguíneas, pudiendo haber disminución en la cantidad de neutrófilos y aumento en la cantidad de plaquetas. Por este motivo, el baricitinib debe ser administrado apenas en un medio hospitalario.

3. Paxlovid

El Paxlovid es un medicamento de uso de emergencia que se compone por comprimidos de ritonavir y nirmatrelvir, que son empaquetados juntos, y que se encargan de inhibir la replicación del SARS-CoV-2, combatiendo la infección. El Paxlovid es de uso hospitalario, siendo recomendado que su uso se inicie hasta 5 días después de haber iniciado los síntomas, siendo indicado en adultos infectados que no necesitan recibir oxígeno pero que poseen un riesgo elevado de desarrollar infección grave.

Efectos secundarios: puede provocar diarrea, dolor muscular, aumento de la presión arterial y alteraciones en el paladar. Además de esto, el Paxlovid puede interactuar con otros medicamentos, incluyendo anticonvulsivos, anticoagulantes y sedantes.

4. Molnupiravir

El molnupiravir es un medicamento antiviral de uso de emergencia que actúa impidiendo la replicación del virus y el desarrollo de la infección. Este medicamento es indicado para pacientes positivos para la COVID-19 que no necesitan tratamiento con oxígeno y que poseen mayor riesgo de sufrir complicaciones. Este medicamento está indicado hasta 5 días después de haber iniciado los síntomas.  

Efectos secundarios: sus efectos secundarios están relacionados con el uso en dosis excesivas, pudiendo interferir en el desarrollo y crecimiento del feto, en caso sea utilizado en mujeres embarazadas, además de poder causar diarrea y mareos.

5. Evusheld (tixagevimab y cilgavimab)

El Evusheld es un fármaco de emergencia compuesto por dos anticuerpos monoclonales, tixagevimab + cilgavimab, que actúan sobre la proteína de superficie del SARS-CoV-2, la cual facilita su entrada en las células. Con el uso de este medicamento, es posible dificultar la entrada de virus en las células, lo que reduce el riesgo de desarrollar COVID-19.

Este medicamento es de uso hospitalario, en forma de inyección, y se recomienda para prevenir el COVID-19 en personas mayores de 12 años, que pesen más de 40 kg, que no puedan recibir la vacuna contra el COVID-19, poseen compromiso moderado o grave a nivel inmunológico, que estén usando medicamentos inmunosupresores y/o que no hayan tenido contacto reciente con personas positivas para SARS-CoV-2.

A pesar de estar indicado para la prevención, el uso de Evusheld no reemplaza la vacunación en personas que no presentan contraindicaciones.

El uso de emergencia de Evusheld fue aprobado por la FDA en el año 2022. Sin embargo, debido a la baja efectividad de este medicamento contra las variantes preocupantes de COVID-19, como omicron y las subvariantes BQ.1 y BA.5, el 26 de enero de 2023, la FDA suspendió temporalmente el uso de este medicamento en los Estados Unidos.

Efectos secundarios: los principales efectos  están relacionados con la aplicación de la inyección, pudiendo sufrir dolor, moretones, hinchazón y comezón en el lugar de la inyección. En algunos casos, también puede haber una reacción alérgica grave, con fiebre, escalofríos, latidos cardíacos anormales, aumento o disminución de la presión arterial y/o hinchazón de los labios. Por lo tanto, es importante que Evusheld se utilice en el hospital para controlar la aparición de estos efectos adversos.

6. Sotrovimab

El sotrovimab es otro anticuerpo monoclonal de emergencia que imita la acción del sistema inmunológico, bloqueando la unión del virus a las células humanas. Está indicado para personas de 12 años o más y que pesen al menos 40 kg, que tengan una infección de leve a moderada, que no estén en oxigenoterapia y que tengan un mayor riesgo de complicaciones.

Este fármaco se administra por vía intravenosa en dosis única, y se recomienda entre el 8º y el 10º día de enfermedad.

Efectos secundarios: algunos de los efectos relacionados son fiebre, dificultad para respirar, escalofríos, cambios en la frecuencia cardíaca y la presión arterial, picazón, dolor muscular y mareos, así como una reacción de hipersensibilidad severa. Por lo tanto, se recomienda que este medicamento se use solo en el hospital bajo la supervisión del médico.

7. Bebtelovimab

El bebtelovimab es un medicamento de emergencia que está autorizado en el tratamiento de la COVID-19 leve a moderado en adultos y en niños a partir de los 12 años de edad o que pesen al menos 40 kg. Además, deben tener un resultado positivo al virus del SARS-CoV2 y es indicado cuando la persona tiene riesgo elevado de desarrollar COVID-19 grave, que incluya hospitalización o muerte, y donde las opciones de tratamiento aprobadas o autorizadas por la FDA no están disponibles o no son clinicamente apropiadas.

Efectos secundarios: algunos efectos adversos del bebtelovimab es la producción de una reacción alérgica durante y después de la inyección, pudiendo surgir algunos síntomas como fiebre, dificultad respiratoria, escalofríos, frecuencia cardíaca rápida o lenta, dolor o molestias en el pecho, comezón e hinchazón en los labios, rostro o en la garganta. 

Además, también puedo ocasionar hematomas en la piel, dolor breve, sangrado, hinchazón y posible infección en el lugar de la inyección. 

8. Tocilizumab

El tocilizumab es un medicamento que pertenece a la familia de los anticuerpos monoclonales, siendo autorizado su uso de emergencia por la FDA para el tratamiento de la COVID-19, siendo indicado en adultos y niños mayores de 2 años que se encuentran hospitalizados y que están recibiendo corticosteroides sistémicos y que requiere suplementación de oxígeno, tanto no invasivo como invasivo, ya sea en ventilación mecánica o con oxigenación por membrana extracorporal (OMEC). Vea otras indicaciones del tocilizumab

Efectos secundarios: este medicamento puede ocasionar algunos efectos adversos como infección de las vías respiratorias superiores, neumonía, herpes simple oral, herpes zóster, erupción, comezón, mareos, hipertensión arterial, náuseas, diarrea, gastritis, conjuntivitis y edema. 

9. Dexametasona

La dexametasona es un corticosteroide que ha sido autorizado para el tratamiento de la COVID-19, tanto en adultos como en niños, pues aparentemente su uso en personas hospitalizadas ayuda a mitigar la respuesta inflamatoria sistémica provocado por el virus SARS-CoV-2, el cual puede provocar lesión pulmonar y disfunción orgánica multisistémica.

La dexametasona puede ser indicada por el pediatra en los casos donde el niño se encuentre hospitalizado y requiera oxígeno de alto flujo, ventilación no invasiva, ventilación mecánica u oxigenación por membrana extracorpórea. No se recomienda de forma rutinaria en los niños que requieran niveles bajos de soporte de oxígeno, es decir, a través de una cánula nasal.

En el caso de los adultos, también se recomienda en los casos donde la persona se encuentra hospitalizada y recibiendo algún tipo de oxigenoterapia

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