Los medicamentos para la gripe niños son los analgésicos, antiinflamatorios, antipiréticos y/o antihistamínicos, ya que poseen propiedades que ayudan a aliviar síntomas de la gripe como dolor en el cuerpo, garganta y cabeza, fiebre, congestión nasal, coriza o tos, por ejemplo.
Además, el reposo también es importante, así como la ingesta de líquido y alimentos ricos en agua, que ayudan a prevenir una deshidratación y favorecen la recuperación más rápida del niño.
Los medicamentos para la gripe en los niños deben usarse bajo la orientación del pediatra, después de la evaluación del estado de salud e indicación correcta de la dosis, de acuerdo al tipo de medicamento y peso corporal del niño.
Principales medicamentos para la gripe en niños
Los medicamentos que puede indicar el pediatra para tratar la gripe pueden variar de acuerdo a los síntomas presentados, pueden ser:
1. Fiebre y escalofríos
La fiebre es un síntoma de la gripe muy común, que puede ser aliviada con medicamentos antipiréticos, como el acetaminofén (paracetamol), dipirona o ibuprofeno, por ejemplo:
- Paracetamol: este medicamento debe ser administrado en gotas o jarabe cada 6 horas, y la dosis administrar depende del peso del niño.
- Dipirona (Novalcina): puede ser administrada en gotas, jarabe o supositorios cada 6 horas para niños y bebés a partir de los 3 meses de edad. La dosis administrar depende del peso del niño. Vea los pasos para poner un supositorio infantil.
- Ibuprofeno: puede ser administrado en niños a partir de 6 meses de edad, se administra cada 6 a 8 horas, la dosis es de acuerdo al peso del niño. Vea cuál es la dosis de las gotas y de la suspensión oral.
Además del tratamiento farmacológico, existen otras medidas que pueden ayudar aliviar la fiebre en el niño, como retirar el exceso de ropa, colocar una toalla mojada con agua fría en la frente y en los pulsos, axilas y detrás de las rodillas y mantenerse hidratado.
2. Dolor en el cuerpo, cabeza y garganta
En algunos casos, la gripe puede provocar dolor de cabeza, garganta y dolor muscular, que puede ser aliviada con los mismos medicamentos usados para el tratamiento de la fiebre, que además de propiedades antipiréticas poseen también acción analgésica como el Paracetamol, la Dipirona y el Ibuprofeno.
En caso que el niño presente dolor de garganta, puede también utilizar un aerosol con acción antiséptica y analgésica, como el Tantum, por ejemplo, que debe ser administrado localmente, pero solo en niños con edad superior a los 6 años.
3. Tos
La tos es uno de los síntomas comunes de la gripe y puede ser seca o con secreción. En el caso de la tos con flema, la hidratación se aconseja aún más que los medicamentos, ya que pueden causar efectos secundarios indeseados.
El uso de antitusígenos normalmente no se recomienda en niños, ya que la tos es un mecanismo de defensa del organismo para eliminar la secreciones. Sin embargo, existen medicamentos que están indicados por el médico en casos muy específicos. Algunos de ellos son:
- Ambroxol (Mucosolvan Pediátrico, Broxol): puede ser administrado 2 a 3 veces al día, en jarabe o gotas, en niños mayores de 2 años;
- Acetilcisteína: puede ser administrado 2 a 3 veces al día, en jarabe, en niños mayores de 2 años;
- Bromexina (Bisolvon Infantil): puede ser administrado 3 veces al día, en jarabe o gotas, en niños mayores de 2 años;
- Carbocisteína (Arbistin Pediátrico): puede ser administrado en forma de jarabe, en niños con edad superior a 5 años.
- Dropropizina (Dalvear Pediátrico): indicado para niños a partir de los 2 años. Puede administrarse hasta 4 veces al días en una dosis que varía de acuerdo a la edad del niño;
- Levodropropizina (Zyplo): indicado para niños a partir de los 2 años. Puede administrarse hasta 3 veces al día en una dosis que varía de acuerdo al peso del niño.
Es importante que el medicamento sea indicado por el pediatra, ya que de esta forma puede orientarse el mejor tratamiento de acuerdo al tipo de tos, edad y peso del niño.
4. Congestión nasal
Para niños con congestión o goteo nasal, el médico puede indicar una solución de lavado nasal, como el Iliadin Aqua o el NeilMed, por ejemplo, que ayudan a lavar la nariz y diluir las secreciones.
Si la congestión nasal es muy intensa y causa mucha molestia en el bebé y en el niño, el médico puede recetar descongestionante nasales y/o antihistamínicos como:
- Desloratadina: que es un antihistamínico cuya dosis puede variar de acuerdo a la edad del niño;
- Loratadina: es un antihistamínico cuya dosis puede variar de acuerdo al peso del niño;
- Oximetazolina (Afrin pediátrico, Iliadin pediátrico): es un descongestionante nasal que puede administrarse hasta 2 veces al día por la mañana y noche.
Como alternativas el médico puede recomendar medicamentos que tengan ambas acciones, descongestionante nasal y antihistamínico como es el caso de Rhinovín, solución oral que puede ser administrado a niños mayores de 2 años y la dosis recomendada es de 2 gotas por cada kg de peso.