Qué es:
El síndrome de muerte súbita, conocido también como muerte de cuna, es cuando un bebé aparentemente sano muere de forma repentina, inesperada e inexplicable durante el sueño, antes del primer año de edad.
Aunque no se sepa a ciencia cierta qué origina este síndrome, existen diversos factores que pueden aumentar el riesgo de muerte súbita. Por este motivo, es importante tomar algunas medidas que protejan al bebé del síndrome de la muerte súbita, como acostarlo boca arriba en su cuna, por ejemplo.
Principales causas
Aunque las causas continúan a ser desconocidas, algunas posibilidades indican que la muerte súbita puede estar relacionada con el mecanismo que controla la respiración durante el sueño. Se cree que esto ocurre porque una parte del cerebro todavía es inmaduro, y cuyo desarrollo se va produciendo a lo largo del primer año de vida, período durante el cual hay mayor riesgo de que el bebé sufra de este síndrome.
Otras causas podrán ser el nacimiento con bajo peso y el surgimiento de infecciones respiratorias, las cuales pueden dificultar la respiración.
Además de esto, el síndrome de muerte súbita puede estar relacionado a algunos factores de riesgo como:
- Que el bebé duerma boca abajo;
- Padres fumadores y que hayan expuesto al bebé al humo del tabaco durante el embarazo;
- Nacer de madre adolescente (menos de 20 años);
- Que el bebé duerma en la cama de los padres.
La muerte súbita es más común durante el invierno. Se cree que esta situación se debe a que durante esta estación, el bebé posee ropa muy caliente y mantas que hacen que el cuerpo se calienta de más, haciendo que el bebé se sienta más cómodo y con tendencia a despertarse con menos frecuencia. Además de esto, cuando hay elevadas temperaturas el bebé puede presentar pequeñas pausas en la respiración, una situación llamada apnea del lactante conocida como ALTE.
Cómo evitar la muerte súbita en lactantes
La única forma de evitar la muerte súbita en bebés es evitando los factores de riesgo mencionados anteriormente y cuidar del bebé, haciendo que la cuna sea un lugar seguro para que descanse. Algunas estrategias que pueden ayudar son:
- El bebé debe dormir siempre boca arriba, incluyendo durante la siesta. En caso de que se voltee mientras duerme, debe volver a colocarlo en la posición recomendada;
- Se le puede ofrecer el chupón para dormir, debido a que aumenta el funcionamiento del sistema parasimpático haciendo con que se despierte más veces (aunque no quede despierto por completo);
- En caso de que el bebé se haya dormido en el silla del carro, en el marsupio, en un columpio o en un porta bebés debe pasarlo a una superficie firme, para que duerma con mayor seguridad;
- Evitar colocar edredones, mantas pesadas, peluches, almohadas o sábanas que queden holgadas que puedan cubrir al bebé en caso se mueva durante el sueño. Se debe vestir al bebé con pijamas de mangas largas y pantalón con tejido caliente y utilizar una sábana fina para cubrirlo. Si está muy frío se debe cubrir al bebé con una manta polar, evitando cubrirle la cabeza y agarrando muy bien los laterales de la manta por debajo del colchón;
- Colocar al bebé a dormir en su cuna. Aunque la cuna pueda ser colocada en el cuarto de los padres, no se recomienda esta práctica si uno de los padres es fumador;
- Si es posible alimentar al bebé con leche materna;
- Posicionar al bebé con los pies recostados en el borde inferior de la cuna, para evitar que se deslice y quede por debajo de la manta.
El síndrome de muerte súbita no está totalmente clara y es necesario la realización de más estudios científicos para comprender sus causas.
¿Con cuántos meses el bebé puede dormir boca abajo?
El bebé sólo puede dormir boca abajo después del 1 año de edad, que es cuando no hay riesgo de que ocurra este síndrome de muerte súbita. Mientras tanto debe dormir boca arriba en todo momento. Esta posición es la más segura y como la cabeza del bebé se mantiene de lado no ocurre el riesgo de que se atragante, también recuerde que es muy importante sacarle los gases antes de acostarlo a dormir.