Onicólisis: qué es, causas y tratamiento

La onicólisis es el desprendimiento de la uña del lecho ungueal, es decir, la uña se separa total o parcialmente de la piel del dedo de manera espontánea, y puede afectar tanto las uñas de las manos como las uñas de los pies, causando síntomas como deformación, engrosamiento o decoloración de la uña.

Las principales causas de la onicólisis son traumas, como un golpe en la uña, o infección por hongos; no obstante, también puede surgir por alergias a productos químicos o psoriasis ungueal.

El tratamiento de la onicólisis es llevado a cabo por el dermatólogo y varía según su causa, pudiendo indicarse la realización de cuidados con la uña o el uso de medicamentos.

Foto de onicólisis, donde se muestra la uña separada del lecho ungueal.

Posibles causas

Las principales causas de onicólisis incluyen:

  • Trauma fuerte en la uña, principalmente en la base, que es donde la uña comienza;
  • Uso de zapatos muy apretados;
  • Mantener los dedos de los pies inmersos en agua por mucho tiempo;
  • Uso de mucha fuerza para cortar, pulir o lustrar las uñas;
  • Exposición prolongada o frecuente a productos químicos, inclusive geles, tintas, uñas postizas y removedores de esmalte;
  • Infecciones fúngicas en las uñas, llamadas onicomicosis;
  • Medicamentos como quimioterapia, tetraciclinas, retinoides y antiinflamatorios no esteroideos;
  • Enfermedades como psoriasis ungueal, liquen plano y dermatitis de las manos.

Asimismo, algunas enfermedades sistémicas como diabetes, problemas de tiroides y amiloidosis, también aumentan el riesgo de onicólisis.

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¿La onicólisis es contagiosa?

La onicólisis no es contagiosa cuando es causada por trauma o efecto secundario de medicamentos o cuando ocurre como consecuencia de una enfermedad.

Sin embargo, cuando es causada por una infección fúngica, la onicólisis puede ser contagiosa.

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Síntomas de onicólisis

Los principales síntomas de onicólisis incluyen:

  • Desprendimiento espontáneo de la uña del lecho ungueal, de forma parcial o total;
  • Deformación de la uña;
  • Aumento del grosor de la uña;
  • Uña de color blanquecino, amarillento, verdoso, amarronado o negruzco debido a la acumulación de aire o sangre o a infección bajo la uña;
  • Presencia de una masa por debajo de la uña;
  • Borde anormal entre el área rosada y el borde blanco de la uña, que puede ser ondulado.

Asimismo, puede surgir dolor o sensibilidad en la uña afectada, especialmente si el desprendimiento fue reciente o si hubo un golpe o una infección.

La onicólisis generalmente afecta la punta o los lados de la uña y surge solo en una uña de la mano o del piel, pero también puede ocurrir en más uñas.

Ante la presencia de síntomas de onicólisis, se recomienda consultar al dermatólogo para que su causa sea identificada y sea indicado el tratamiento más adecuado, de ser necesario.

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Cómo confirmar el diagnóstico

El diagnóstico de la onicólisis es realizado por el dermatólogo a través de la evaluación de los síntomas, antecedentes de salud o de trauma en la uña, además del examen físico, en el cual se evalúan las características de la uña afectada.

En los casos donde el médico sospecha de alguna enfermedad o infección, pueden ser solicitados exámenes de sangre, raspado de la uña para evaluar la presencia de hongos o biopsia de la uña. 

Cómo es realizado el tratamiento

El tratamiento de la onicólisis debe ser llevado a cabo bajo orientación del dermatólogo y tiene como objetivo el nuevo crecimiento de la uña adherida al lecho ungueal, pues la uña desprendida no volverá a adherirse.

Los principales tratamientos para onicólisis incluyen:

1. Cuidados con la uña

Algunos cuidados con la uña afectada son importantes para evitar el empeoramiento de la onicólisis o incluso que afecte otras uñas. De esta manera, se recomienda mantener la uña afectada siempre seca, evitar la exposición a productos químicos o a agentes irritantes y usar guantes de protección al manipular sustancias potencialmente irritantes.

Además, si el desprendimiento ocurrió debido a un trauma, se debe evitar realizar actividades que puedan dañar la uña, manteniéndolas cortas para evitar más lesiones, y cortar las partes afectadas de la uña.

También se recomienda utilizar zapatos cómodos que no aprieten los dedos de los pies.

2. Uso de medicamentos

Si el desprendimiento de la uña ocurrió debido a una infección bacteriana, el médico podrá prescribir antibióticos tópicos u orales, según sea necesario.

En caso de que la infección sea fúngica, pueden ser indicados medicamentos antifúngicos tópicos u orales. 

Si la onicólisis es causada por una enfermedad asociada, como diabetes o un problema de la tiroides, es esencial tratar la enfermedad.

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Cómo prevenir

Para prevenir la onicólisis se recomienda:

  • Evitar el exceso de humedad en la uña;
  • Mantener las uñas cortas;
  • Evitar morderse las uñas;
  • Usar medias y zapatos cómodos.

Asimismo, se debe evitar el contacto con agentes irritantes, usando guantes de protección siempre que sea necesario.