La otitis media es una inflamación y/o infección del oído que puede ocurrir debido a la presencia de virus o bacterias, y es más frecuente después de un resfriado o crisis de sinusitis, por ejemplo. No obstante, la otitis media también puede surgir como consecuencia de traumatismos o alergias.
Debido a la inflamación en el oído, es posible que sean notados síntomas como dolor de oído, presencia de secreción amarillenta o blanquecina en el canal auditivo, fiebre e irritabilidad.
Ante la presencia de signos y síntomas que indiquen otitis, es importante consultar a un otorrinolaringólogo, en el caso de los adultos, o a un pediatra, en el caso de los niños, para confirmar el diagnóstico e iniciar el tratamiento más adecuado, el cual puede ser llevado a cabo con medicamentos para aliviar los síntomas, como ibuprofeno o dipirona, y/o antibióticos.
Síntomas de otitis media
Los principales síntomas de otitis media incluyen:
- Secreción o acumulación de líquido en el oído;
- Disminución de la audición;
- Dolor de oído;
- Fiebre;
- Irritabilidad;
- Enrojecimiento;
- Perforación del tímpano, en ciertos casos, notándose la presencia de pus.
Si ocurre en bebés, puede sospecharse de otitis cuando este coloca muchas veces las mano en la oreja, está irritado, llora mucho y tiene dificultades para dormir, por ejemplo, siendo importante consultar al pediatra.
Cómo confirmar el diagnóstico
El diagnóstico es llevado a cabo por el otorrinolaringólogo o el pediatra, en el caso de los niños, mediante la evaluación de los signos y síntomas y la realización de un examen físico, el cual consiste en observar el oído con un dispositivo llamado otoscopio.
De esta forma, es posible observar cualquier alteración en el oído e indicar el tratamiento más adecuado para combatir la inflamación y promover el alivio de los síntomas.
Tipos de otitis media
De acuerdo con los signos y los síntomas presentes y la duración y la frecuencia en la que ocurren, la otitis media también puede dividirse en los siguientes tipos:
- Otitis media aguda: es la forma más común, en la que los signos y síntomas inician de forma rápida, como dolor de oído y fiebre, causados por la infección aguda del oído medio;
- Otitis media aguda recurrente: es la otitis media aguda que se repite más de 3 veces en 6 meses, o más de 4 veces en 12 meses, debido generalmente al mismo microorganismo, que vuelve a proliferar, o por nuevas infecciones;
- Otitis media serosa: también conocida como otitis media con efusión, es la presencia de líquido en el oído medio, el cual puede permanecer por varias semanas o meses, sin causar signos ni síntomas de infección. Vea los síntomas y tratamiento de la otitis media serosa;
- Otitis media crónica supurativa: se caracteriza por la presencia de secreción purulenta persistente o recurrente, junto con perforación de la membrana timpánica.
Para diferenciar entre estos tipos de otitis, el médico debe realizar una evaluación clínica, con examen físico, observando el oído con un otoscopio, además de tomar en cuenta los signos y síntomas. Descubra más sobre los principales tipos de otitis.
Posibles causas
La otitis media normalmente ocurre como consecuencia de una gripe, resfriado o crisis de sinusitis, razón por la que suele estar causada por virus y bacterias.
Los principales virus relacionados con la otitis media son influenza, virus sincitial respiratorio y rinovirus; y las bacterias más frecuentes son Streptococcus pneumoniae, Haemophilus influenzae y Moraxella catarrhalis.
Lea también: Virus sincitial respiratorio (VSR): síntomas y tratamiento tuasaude.com/es/virus-sincitial-respiratorioAsimismo, este tipo de otitis también puede ser desencadenada por otras situaciones, como alergias, reflujo, infección por hongos o alteraciones anatómicas en el oído; sin embargo, estas causas son menos comunes.
Cómo es realizado el tratamiento
El tratamiento para la otitis media puede variar de acuerdo con los síntomas presentados y la causa. Por lo general, el médico indica el uso de medicamentos para promover el alivio de los síntomas, como la dipirona y el ibuprofeno, por ejemplo.
En caso de que la otitis media esté asociada a una gripe, resfriado o alergia, el médico también puede indicar descongestionantes y antihistamínicos.
Si se verifica la presencia de infección, puede recomendarse el uso de antibióticos durante 5 a 10 días, como la amoxicilina, por ejemplo, que suelen ser utilizados si los síntomas aún se mantienen después de iniciado el tratamiento con los otros medicamentos, si hay alteraciones en el examen de la membrana timpánica o si los síntomas son muy intensos.
Dependiendo del tipo y de la gravedad de la otitis, el tratamiento puede inclusive implicar la realización de una cirugía para drenar el líquido del oído, o de una timpanoplastia, en caso de perforación del tímpano.
Opciones de tratamiento casero
Algunas medidas pueden ser llevadas a cabo en casa para complementar el tratamiento indicado por el médico y ayudar a acelerar la recuperación y a aliviar los síntomas, tales como:
- Beber bastante cantidad de líquidos, manteniéndose hidratado a lo largo del día;
- Guardar reposo, evitando ejercicios o actividades desgastantes;
- Tener una alimentación saludable y equilibrada, con una dieta rica en frutas, hortalizas, verduras, legumbres y semillas, pues son ricas en omega-3 y otros nutrientes que favorecen la recuperación de la inflamación;
- Aplicar una compresa tibia en la región externa del oído, para aliviar el dolor.
Asimismo, nunca se deben colocar gotas de ningún producto en el oído, excepto aquellas indicadas por el médico, pues esto puede empeorar la inflamación y perjudicar la recuperación.