Cristales de oxalato de calcio en orina: 5 causas y qué hacer

El oxalato de calcio es una sustancia que puede formar cristales en forma de sobre, el cual se puede encontrar en la orina de pH ácido o neutro, siendo considerado muchas veces normal cuando no se identifica ninguna otra alteración en el examen de orina y cuando no hay signos o síntomas asociados, pudiendo estar relacionado en este caso a disminución del consumo de agua durante el día o a una dieta rica en calcio y oxalato.

Sin embargo, cuando la presencia de cristales de oxalato de calcio se asocian a la presencia de signos y síntomas como dolor y ardor al orinar, dolor en la parte baja de la espalda y orina más oscura, por ejemplo, puede ser señal de diabetes o cálculos renales, por ejemplo.

Los cristales de oxalato de calcio se diagnostican a través del examen de orina, también llamado EGO. Además de los cristales de oxalato de calcio, también pueden identificarse otros cristales en la orina, como cristal de fosfato triple, leucina o de ácido úrico, cuya causa debe identificarse y tratarse. Conozca más sobre los cristales en la orina.

Causas de cristales de oxalato de calcio en la orina

Las principales causas del surgimiento de cristales de oxalato de calcio en la orina son:

1. Alteraciones en la alimentación

Las alteraciones en la alimentación diaria pueden favorecer la formación de cristales de oxalato de calcio, principalmente cuando existe una alimentación rica en calcio, oxalato, como al ingerir tomate, espinaca, ajo, naranja, espárrago y ruibarbo, y altas dosis de vitamina C, en cantidades diarias por encima de lo recomendado, además de la baja ingesta de agua durante el día. Esto hace que la orina esté más concentrada y ocurra la precipitación del exceso de calcio, notándose los cristales en el examen de orina.

Qué hacer: a pesar de que la presencia de cristales de oxalato de calcio en la orina no sea considerado un motivo de preocupación, es importante aumentar la ingesta de agua y ajustar la dieta bajo orientación de un nutricionista, pues así es posible disminuir el riesgo de desarrollar cálculos renales. De esta manera, es importante aumentar el consumo de frutas, verduras y alimentos integrales, además de disminuir el consumo de sal. Sepa más sobre la alimentación para evitar piedras en los riñones.

Vea el siguiente video y conozca cómo la alimentación puede favorecer la formación de los cristales de oxalato de calcio:

2. Cálculo renal

El cálculo renal, popularmente conocido como piedra en los riñones, es una situación bastante incómoda caracterizada por la presencia de masas semejantes a piedras en el tracto urinario. Por medio del examen de orina general es posible determinar el tipo de piedra presente en el riñón, pues son identificados cristales en la orina, pudiendo ser encontrados cristales de oxalato de calcio cuando la piedra surge como consecuencia de una alimentación rica en calcio, sodio y proteínas.

Las piedras normalmente causan bastante dolor e incomodidad, principalmente en la espalda baja, además de generar dolor y sensación de ardor al orinar. En ciertos casos, la persona también puede notar que la orina tiene una coloración rosada o roja, lo que es indicativo de que la piedra puede estar atascada en el canal urinario, causando obstrucción e inflamación.

Qué hacer: en este caso, es importante que la persona se dirija al hospital para que sea evaluada, y se realice el tratamiento más adecuado, pudiendo varias de acuerdo con la localización, cantidad y tamaño de la piedra. De forma general, el urólogo o el nefrólogo puede llegar a indicar el uso de medicamentos para aliviar el dolor y para favorecer la eliminación de piedras a través de la orina.

Sin embargo, en el caso en que la piedra es muy grande y no consigue ser eliminada, puede ser necesario la realización de un pequeño procedimiento quirúrgico. Vea cómo se realiza el tratamiento para las piedras en los riñones.

3. Diabetes

La diabetes puede caracterizarse por diversas alteraciones en el examen de sangre y de orina, pudiendo notarse en ciertos casos la presencia de cristales de oxalato de calcio en la orina, principalmente cuando la diabetes no está controlada y genera alteraciones en los riñones, ya sea por falta de tratamiento o por ausencia de respuesta al tratamiento indicado por el médico.

Aparte de la presencia de cristales de oxalato de calcio, también puede ser notado en ciertos casos la presencia de glucosa en la orina y de bacterias o levaduras, pues las personas con diabetes no controlada tienen mayor probabilidad de desarrollar infecciones urinarias debido a la elevada concentración de glucosa circulante, lo que favorece el desarrollo de microorganismos.

Conozca otras complicaciones de la diabetes.

Qué hacer: es fundamental que la persona siga el tratamiento indicado por el endocrinólogo, pues así es posible mantener la glucosa en una concentración adecuada, evitando las complicaciones. El tratamiento para la diabetes normalmente incluye el uso de medicamentos que ayudan a regular la cantidad de glucosa en sangre, además de mejorar los hábitos alimentarios y practicar actividad física.

4. Alteraciones en el hígado

Algunas alteraciones en el hígado también pueden favorecer la formación de cristales de oxalato de calcio, que son identificados a través del examen de orina. Asimismo, cuando hay alteraciones en el hígado, el examen de orina también puede indicar la presencia de bilirrubina y/o hemoglobina en la orina. Conozca otros exámenes que evalúan la función del hígado.

Qué hacer: en este caso, es importante que el hepatólogo o clínico general sea consultado para que sea realizada una evaluación completa del hígado y sea identificada la alteración, dando inicio al tratamiento más adecuado.

5. Enfermedades renales

Las alteraciones en los riñones como infección, inflamación o insuficiencia también pueden generar el surgimiento de cristales de calcio en la orina, pues la actividad de los riñones puede ser perjudicada, de forma que el proceso de filtración y reabsorción puede estar afectado.

Qué hacer: es importante que el médico evalúe el resultado del examen de orina, verificando si hay cualquier otra alteración, además de la presencia de cristales para que sea identificada la causa e iniciado el tratamiento adecuado, evitando daños más graves en los riñones.