Qué es:

La insolación se caracteriza por el enrojecimiento de la piel, dolor de cabeza, fiebre y, en algunos casos, alteración del nivel de consciencia debido al aumento rápido de la temperatura del cuerpo cuando se permanece mucho tiempo expuesto al sol, en un ambiente muy caliente o la práctica de actividad física de forma intensa al aire libre durante el día.

La insolación puede causar síntomas graves que podrían representar un riesgo para la salud, como deshidratación, desmayo y convulsiones. Por ello, para evitar la insolación, es importante tener algunos cuidados antes de exponerse al sol, evitando las horas con mayor calor, que es entre las 12h y las 16h o utilizar protector solar, por ejemplo.

Aunque pueda suceder en cualquier persona, la insolación generalmente es más frecuente en bebés o ancianos, ya que tienen mayor dificultad para controlar la temperatura corporal, además personas con enfermedades crónicas o que abusan de bebidas alcohólicas también tiene mayor posibilidad de insolación.

Síntomas de insolación

Los primeros sintomas de que alguien puede tener insolación son:

Piel enrojecida, caliente y seca;
Dolor de cabeza;
Aumento de los latidos cardíacos y respiración rápida;
Sed, boca y ojos secos y sin brillo;
Mareos;
Vómitos;
Diarrea;
Confusión mental;
Desmayo;
Debilidad muscular.

Siempre que haya sospecha de insolación es muy importante llevar a la persona a un lugar fresco, retirarle el exceso de ropa, ofrecerle agua y, en caso de que los síntomas no mejoren después de 30 minutos, se debe acudir al al servicio de urgencias más cercano para recibir atención médica.

Síntomas de insolación en niños

Los síntomas de insolación en el niño o bebé son muy semejantes a los del adulto, sin embargo, es común que el niño también presente labios resecos, llanto sin lágrimas, cansancio excesivo, sueño y pérdida de las ganas para jugar, como sucede en la deshidratación. Vea más síntomas de deshidratación en niños.

Debido a la menor capacidad de adaptación a las condiciones externas, es importante que el niño con insolación sea llevado al pediatra lo antes posible par que sea evaluado y se inicie el tratamiento adecuado.

Qué hacer en caso de insolación

Los primeros auxilios que se deben brindar a una persona con insolación mientras llega el servicio médico, son:

Llevar a la persona a un lugar ventilado y con sombra, si es posible con ventilador o aire acondicionado;
Colocar a la personas acostada o sentada;
Aplicar compresas frías sobre el cuerpo, pero evitando el uso de agua congelada;
Ofrecer líquido para beber en abundancia, evitando bebidas alcohólicas, café y refrescos tipo coca-cola;
Vigilar el estado de consciencia de la persona, preguntando su nombre, edad, día actual de la semana, por ejemplo.

En el caso de que la persona presente vómitos intensos o si pierde la consciencia, debe acostarla del lado izquierdo para evitar que aspire el vómito, así como llamar a una ambulancia o llevarlo al hospital.

Causas de insolación

La principal causa de insolación es la exposición prolongada al sol sin el uso de protector solar o gorra, por ejemplo, lo cual produce un aumento de la temperatura corporal, dando como resultado síntomas de insolación.

Además de la exposición excesiva al sol, la insolación puede producirse debido a cualquier situación que aumente rápidamente la temperatura del cuerpo, como por ejemplo la práctica excesiva de actividad física, uso de varias prendas de ropa y ambiente con mucho calor.

Diferencia entre insolación y golpe de calor

El golpe de calor es semejante a la insolación, pero presenta síntomas más graves de temperatura elevada del cuerpo, pudiendo llevar a la muerte.

En el golpe de calor la temperatura del cuerpo sube por arriba de los 40º, causando respiración débil, debiendo acudir al hospital para iniciar el tratamiento lo más rápido posible, pudiendo ocurrir por estar encerrado en un sitio muy caliente o por una ola de calor. Vea las consecuencias de una ola de calor y cómo prevenirlo.

Peligros de la insolación para la salud

La insolación puede tener varios riesgos para la salud, como deshidratación excesiva y alteraciones nerviosas, como convulsiones, daño cerebral y coma.

Los peligros de la insolación existen debido al hecho de que hay una falla en el mecanismo de transpiración, lo cual hace que la temperatura corporal no logre regularse, permaneciendo elevada incluso después de que la persona deja de estar expuesta al sol.

Además, debido al aumento rápido de la temperatura del cuerpo, la persona termina perdiendo también agua de forma rápida, vitaminas y sales minerales, que son fundamentales para el buen funcionamiento del organismo.

Cómo prevenir la insolación

Para prevenir la insolación, existen algunos cuidados que pueden ponerse en práctica, como:

Aplicar protector solar, por lo menos 15 minutos antes de permanecer debajo del sol;
Beber muchos líquidos a los largo del día, especialmente en días muy calientes;
Evitar estar debajo del sol en las horas de mayor calor, entre las 12h y las 16h;
Usar ropa leve y de algodón u otro material natural, para facilitar la transpiración.

Además de esto, se recomienda el uso de sombreros o gorras para proteger la cabeza y evitar un caso de insolación.